Caravana de migrantes que salió en octubre de Tapachula pide trenes y buses para llegar a la capital de México
Unos 700 inmigrantes que integran la caravana que salió el 23 de octubre desde Tapachula, en la frontera con Guatemala, rumbo a la Ciudad de México para presionar al gobierno de Andrés Manuel López Obrador que les otorgue residencias permanentes, se encuentra varada desde hace casi cinco días en Tierra Blanca, Veracruz, ubicado a unas 193 millas (312 kilómetros) del Distrito Federal.
“No podemos seguir avanzando, se ha vuelto muy difícil la caminata”, dijo a Univision Noticias Irineo Mujica, director de la organización Pueblos Unidos Migrantes que convocó y lidera la marcha.
Cuando la caravana salió de Tapachula, hace 40 días, Mujica aseguró que el destino de la caminata era la capital mexicana, pero con el paso de los días la ruta final se dirige a la frontera sur de Estados Unidos.
“Allá queremos llegar, para pedir asilo”, dice Antonio, un inmigrante de origen hondureño que viaja en la caravana. Asegura que su sueño es llegar a California para trabajar y poder sostener a su familia. “En mi país no tenía trabajo”, asegura.
Piden buses, trenes y residencias para los de la caravana
A primera hora del sábado Mujica envió un mensaje en su cuenta de la red social WhatsApp denunciando que la caravana había detenido la caminata por el “bloqueo” ejercido por agentes federales de inmigración, la policía y la Guardia Nacional. Y aseguró que “nosotros estamos pidiendo un diálogo con el Instituto Nacional de Migración (INM) para que nos dejen llegar a la Ciudad de México.
A la pregunta respecto a qué tipo de diálogo buscan con las autoridades migratorias mexicanas, el activista dijo que “demandamos autobuses y trenes para que la gente pueda ser transportada al DF”, el destino original de la marcha.
La respuesta del gobierno a los de la caravana de migrantes
El INM respondió a Mujica por medio de un comunicado en el que pidió al dirigente que “no exponga a mujeres y niños migrantes al riesgo de viajar sobre el ferrocarril y aceptar apoyo de tarjetas migratorias”.
La nota de prensa dice además que “en el marco de la estrategia nacional para atender el flujo migratorio y el INM de la Secretaría de Gobernación, con apoyo de la Guardia Nacional (GN), rescató a 210 extranjeros de diversas nacionalidades que eran trasladados en condición de hacinamiento en la caja de un tráiler” con destino a la capital.
El vehículo en el que se trasladaban los migrantes fue detenido por las autoridades en un punto de revisión en el perímetro del municipio Esperanza, Puebla, “y al no detenerse se inició la persecución y alcance cerca de la localidad de Tecamachalco”, dijeron las autoridades.
El reporte agrega que, tras ser detenido el tráiler, “se escucharon golpes y gritos (que provenían del contenedor de arrastre) los que evidenciaron la presencia de personas al interior del camión. Tras abrir una puerta se encontraron mujeres y hombres adultos, jóvenes y menores de edad entre andamios de metal, cobijas y ventiladores caseros acondicionados”.
Avisan de los peligros de La Bestia para los migrantes de la caravana
El INM también advirtió a la caravana “a no exponer a familias, mujeres y menores de edad migrantes al riesgo o lesiones que implica viajar sobre ferrocarriles”.
El ferrocarril que recorre el territorio mexicano de sur a norte hasta cerca de la frontera con México se le conoce como La Bestia, un peligroso sistema de movilización que durante años han utilizado los inmigrantes indocumentados y que ha dejado decenas de muertes y heridos en el camino.
Las autoridades mexicanas también denunciaron que Pueblos Unidos Migrantes “rompió un acuerdo con el INM para proporcionar tarjetas migratorias a mujeres, menores de edad y núcleos familiares que integran dicha caravana, y les incitó subir a los vagones de uno de los ferrocarriles que permanece varado desde entonces en la estación de la empresa Ferromex en el municipio de Tierra Blanca, Veracruz”.
Mujica insistió en que las tarjetas de visas humanitarias ofrecidas por el gobierno “no es lo que nosotros estamos pidiendo y que promedió el gobierno. Exigimos residencias. Y además estas tarjetas no protegen a los inmigrantes que las reciben, porque de todas maneras los están deportando”, agregó.
Visas humanitarias
El pasado 23 de noviembre funcionarios del INM alcanzaron un acuerdo con la segunda caravana que había salido cinco días antes de de Tapachula rumbo a la Ciudad de México con la misma intención que la primera: presionar al gobierno de López Obrador para que les otorgue una residencia legal permanente.
"La caravana aceptó la oferta del gobierno de visas humanitarias”, dijo a Univision Noticias Luis García Villagrán, director del Centro de Dignificación Humana A.C., organización que convocó y encabezó el segundo movimiento de inmigrantes.
Según García, los beneficiarios del acuerdo con el INM fueron “3,852 compañeros que serán repartidos en los 10 estados". Agregó que las visas humanitarias “las recibirán aquellos que no tenían iniciado ningún tipo de trámite. Pero aquellos que tenían avanzadas sus solicitudes de asilo ante la Comisión de refugiados (COMAR), les prometieron la residencia permanente”, dijo.
Los 10 estados seleccionados por el gobierno mexicano son: Puebla, Querétaro, Hidalgo, Estado de México, Michoacán, Guerrero, Colima, Jalisco y Guanajuato, en la sede de León y de San Miguel de Allende.
García dijo, además, que la oferta del INM pudo haber llegado hace al menos dos años “cuando le comenzamos a exigir al gobierno que cumpliera con la ley en el trato a los inmigrantes. Debería ahora destinar más recursos y atender la crisis humanitaria en Tapachula donde aguardan más de 120,000”.
Texas se prepara para la posible llegada de inmigrantes de la caravana
Con simulacros, envío de tropas de la Guardia Nacional y agentes de la policía del estado, Texas se prepara para una eventual llegada de caravanas de migrantes que salieron de Tapachula y se dirigen al sur de Estados Unidos en busca de asilo.
Entre las medidas de contención, a principios de noviembre el gobernador Greg Abbott (republicano), un fiel defensor de la política migratoria de ‘tolerancia cero’ del expresidente Donald Trump, ordenó la instalación de contenedores en las carreteras que se comunican con los cruces fronterizos del estado para detener los flujos de personas, a quienes amenaza con detenerlos y encarcelarnos.
En junio Abbott, quien en 2022 buscará la reelección y en 2024 probablemente competirá por la nominación presidencial del Partido Republicano, anunció que implementaría un severo plan migratorio en la frontera sur que incluye seguir con la construcción del muro de Trump y arrestar a extranjeros sin estatus legal de permanencia.
Según dijo, el plan es en respuesta a “las políticas de fronteras abiertas” del presidente Joe Biden que han llevado a una “crisis humanitaria en nuestra frontera sur”.
Abbott también dijo que la crisis registra niveles récord de inmigrantes ilegales, drogas y contrabando llegando a Texas. Pero no aporta cifras o datos de los problemas en los que está envuelto el estado.
Cabe recordar que la presencia indocumentada sigue siendo una falta de carácter civil no criminal en Estados Unidos.
