Viacrucis migrante: este domingo arranca caravana desde Tapachula rumbo a la Ciudad de México

Temerosos y al mismo tiempo esperanzados, varios cientos de inmigrantes varados en Tapachula, sur de México, (frontera con Guatemala) se preparaban este sábado en los alrededores del Parque Bicentenario para iniciar a primera hora del domingo el viacrucis migrante 2023.

“Primero Dios saldremos de aquí (Tapachula) porque ya no podemos esperar más tiempo sin trabajar”, dice Ronald Rivera, un inmigrante hondureño de 22 años quien huyó de su país junto a su esposa de 20 y una pequeña de apenas 9 meses. “Aquí está tremendo, no puedo esperar cinco o seis meses más por papeles y un permiso de trabajo”, agrega.

Rivera dice que salió de su país debido a amenazas de la ‘mara’ (pandillas). “Viven todo el tiempo amenazándolo a uno. Todo allá está difícil, da mucho miedo. Pero aquí en México también está difícil y seguimos con miedo. Y nos quieren cobrar $2,500 dólares por los papeles. Salimos de allá sin dinero y no tenemos dinero”.

A la pregunta por qué se une al viacrucis migrante, alza la voz y dice más confiado: “Porque es la forma de poder salir de aquí. Ya le dije, no puedo esperar otros cinco o seis meses por un permiso de trabajo que no sé si me lo van a dar. Y si nos vamos mañana, puede que en el camino lo consigamos. Y si en la capital se arreglan los papeles, entonces seguiremos viaje al norte, a Estados Unidos, para pedir asilo”.

El inmigrante contó que hasta el sábado al medio día “según el conteo de fotocopias de cédulas (carné de identidad), se habían registrado unas 4,500 personas”.

Con la tragedia de Ciudad Juárez en mente

“Vamos a arrancar a las 6:00 am de este domingo en dirección al norte, hasta la capital mexicana (Ciudad de México)”, dice Irineo Mujica, director de la organización Pueblos Sin Fronteras y uno de los organizadores del evento que por primera vez no se llevó a cabo en Semana Santa.

La falta de recursos, la baja capacidad de convocatoria y el miedo a las advertencias de las autoridades federales migratorias y la inseguridad generada por los cárteles mexicanos y las maras, “pues todo eso afectó que nos organizáramos”, reconoce Mujica.

“Fue la tragedia de Ciudad Juárez la que nos hizo reflexionar y organizarnos”, cuenta el activista. “Después del incendio no hemos sabido de amenazas ni advertencias. Todo el mundo está más callado, lo que lleva a pensar que este viacrucis será el más tranquilo. Eso es lo que esperamos”, añade.

Mujica asegura que el Viacrucis marchará en dirección a la capital mexicana con la esperanza que el trayecto el gobierno federal otorgue a los migrantes visas humanitarias y permisos de trabajo. “Si eso sucede, como en ocasiones anteriores, la caminata irá desapareciendo y la gente por fin tendrá sus papeles”, dijo.

Las organizaciones que defienden los derechos de los migrantes reiteran que las caravanas surgen en respuesta a los lentos procesos migratorios que, en muchos casos, tardan casi un año. Agregan que la gente forma caravanas para salir y, una vez caminando, conseguir algún tipo de documentación.

“Por eso nos preguntamos por qué esperan que salga una caravana para actuar. Da la impresión de que lo hacen adrede para presionar luego a Estados Unidos y que Estados unidos les envíe dólares para controlar la inmigración”, comentó Mujica.

Los muertos de Ciudad Juárez

A finales de marzo un incendio desatado en un centro de detención de inmigrantes de Ciudad Juárez, que operaba bajo el mando del Instituto Nacional de Migración de México (INM), dejó un saldo de 40 inmigrantes muertos y unos 35 heridos, algunos de gravedad.

Al día siguiente del suceso el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador dijo que el percance se trató de un incidente “desafortunado”. Y agregó que el fuego “tuvo que ver con una protesta que ellos (los migrantes) iniciaron a partir, suponemos, de que se enteraron (de) que iban a ser deportados, movilizados y como protesta en la puerta del albergue pusieron colchonetas y les prendieron fuego y no imaginaron que esto iba a causar esta terrible desgracia".

Casi un mes después de la tragedia las investigaciones continúan y todavía no se conocen las verdaderas causas del incendio ni de la totalidad de los responsables del siniestro. De los 40 fallecidos, 28 eran de nacionalidad guatemalteca. Las familias dicen que se marcharon para escapar de la pobreza y la falta de trabajos para mantener sus hogares.

El diario The New York Times reportó que en lo que va del año el gobierno de Guatemala ha ayudado a repatriar a 58 ciudadanos fallecidos. En 2022 los cuerpos repatriados sumaron 427. De ellos, 361 habían perdido la vida en Estados Unidos.

“Hay que hacer visible el sufrimiento”

A diferencia de otros viacrucis, este año el padre Heyman Vásquez Medina, de la parroquia San Francisco de Asis, en Huixtla, Chiapas, se disculpa porque no estará presente en la caravana. “No voy a participar porque me avisaron tarde y tenía muchos compromisos en la parroquia”, dice. “Pero bendigo este esfuerzo poque hay que hacer visible el sufrimiento de los migrantes”.

El sacerdote católico señala que la Iglesia “apoya y promueve la defensa de los migrantes, la ayuda, el acompañamiento en el peregrinaje por encontrar un lugar seguro donde vivir”. Y señala que, en la diócesis católica de Chiapas, “el obispo ha invitado a todos los sacerdotes a ayudar a los migrantes cuando pasen por los pueblos y ciudades en dirección a la capital”, distante unos 1,160 kilómetros (720 millas) de Tapachula.

A la pregunta si teme que las caravanas afecten innecesariamente la seguridad de los migrantes al arriesgarlos a caminar durante días a la intemperie bajo un clima tropical y la amenaza constante del crimen organizado y los cárteles del narcotráfico, el padre Heyman respondió “se trata del peregrinaje que todos los días emprenden los migrantes desde que salen de sus casas, sus pueblos y sus países”.

“Yo no creo que el viacrucis los exponga a ningún peligro. Hay que hacer visible la situación del migrante. Necesitamos estar recordándoselo siempre al gobierno y a la sociedad, el sufrimiento de ellos. Yo pienso que el gobierno es insensible y que el viacrucis lo va a hacer reaccionar. Ellos saben la situación de los migrantes, saben el sufrimiento, el maltrato que se le da al migrante de parte de muchas autoridades en el trayecto. Hay que visualizar todo esto”, indicó.

“La prueba de todo esto está en los 40 que se quemaron y murieron en el centro de detención de Ciudad Juárez. Eso dejo claro el trato que se le da a los migrantes en México”, precisó.

Historia del viacrucis migrante

El 'viacrucis migrante' arrancó en 2013 como un acto religioso y de protesta organizado por activistas y defensores de los derechos de inmigrantes indocumentados en territorio mexicano.

Los organizadores de la marcha en aquel momento, pertenecientes al Movimiento Migrante Mesoamericano, indicaron que la caravana pretendía sensibilizar a la sociedad y a las autoridades sobre el "calvario que a diario sufren los indocumentados que cruzan el país, arriesgándose a ser víctimas del crimen organizado y las autoridades corruptas".

En los años siguientes la caminata se convirtió en una vía segura para emigrar hacia el norte, eludir extorsiones, secuestros, pago de coyotes y violaciones sexuales. Y también como una manera segura de llegar hasta la capital de México y proseguir luego el largo y difícil viaje hacia la frontera sur de Estados Unidos.

“Pero en estos 10 años las cosas han cambiado”, dice el padre Vásquez. “Ya no es lo mismo. Ahora le aconsejo a las personas que piensen bien, que se informen, porque el camino no es fácil, es un calvario. Y también deben reflexionar muy bien la salida de sus países de origen”.

En el norte de México están vigilantes

Organizaciones en el norte de México están pendientes del avance de la caravana. Conocen su historia y la respaldan. Pero advierten: “El viacrucis no solo se vive en estas fechas, los migrantes lo llevan a cabo todos los días en su trayecto”, dice Soraya Vásquez, directora de la organización Families Belong Together capítulo México, en Tijuana, Baja California.

Vásquez agregó que durante la conmemoración de la Cuaresma y la Semana Santa “muchos organizaron viacrucis en distintas ciudades. Y este año en particular fue significativo porque en eso se ha convertido la migración, en un viacrucis, un calvario, en la muerte para muchas personas que huyeron para salvar sus vidas y no pudieron conseguirlo”.

“La tragedia en el centro de detención de migrantes en Ciudad Juárez es un ejemplo. A partir de esa tragedia hay un cambio de perspectiva y estamos a la espera de cambios (por parte de las autoridades mexicanas). Esperamos una mayor sensibilidad después de esta tragedia”, indicó.

Al igual que el año pasado, activistas advierten que la situación tanto en la frontera sur como en el norte de México las ciudades viven un “cuello de botella” debido al alto número de migrantes que busca una oportunidad de pedir asilo en Estados Unidos.

El gobierno estadounidense, por su parte, advierte que la frontera permanece cerrada y recuerda a los migrantes procedentes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que sólo pueden ingresar por medio de un patrocinador autorizado por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS). Y que sólo pueden ingresar vía aérea con un pasaporte válido.

Del resto de no ciudadanos sin visa, puntualiza que deben ingresar a la página digital CBO One, postular a un programa legal vigente y obtener una citación para presentarse en un puerto de entrada autorizado en una fecha y hora señalada. Quienes no lo hagan de esa manera, advierte, serán expulsados (deportados) de manera expedita.