Informe revela que el gobierno de Trump ha “restringido” un sistema migratorio que ya estaba “roto”
Un nuevo informe reveló que las restricciones impuestas por el gobierno han restringido aún más un sistema migratorio que ya se encontraba roto cuando el presidente Donald Trump llegó a la Casa Blanca, en enero de 2017.
Titulado “La restricción de la inmigración“ (Restricting Immigration) el reporte, elaborado por la por la organización FWD.us, señala que el gobierno de manera “implacable” ha atacado un sistema imperante que ya se encontraba quebrantado y dejaba escasas opciones a la inmigración indocumentada.
Los cambios, operados desde el 25 de enero de 2017 con la firma de dos órdenes ejecutivas, una sobre el jurisdicciones santuario, han sido llevados a cabo a pesar de que “el pueblo estadounidense cree que la inmigración es beneficiosa para Estados Unidos”, dice FDW.us, grupo de presión integrado por líderes de la comunidad tecnológica, entre ellos Mark Zukerberg, fundador de la red social Facebook; Reid Hoffman, fundador de Linkedln; Erick Schmidt, presidente de Google; y Drew Houston, fundador de Dropbox, entre otros.
El reporte agrega que los economistas coinciden en que la inmigración es vital para la creación de empleos, el crecimiento económico y la competitividad global. “A pesar de esto, Trump ha sostenido un ataque desenfrenado contra el sistema migratorio estadounidense desde sus primeros días en el cargo”.
A golpe de memos
FWD.us dice en el reporte que desde que Trump asumió la presidencia, “cientos de acciones regulatorias y cambios en las políticas han contribuido a una reducción del 50% de los niveles de inmigración negándole oportunidades a millones de personas y destruyendo familias estadounidenses”.
Entre los cambios llevados a cabo por el aparato de gobierno se incluyen modificaciones y reducción de los programas de asilo, visas para trabajadores profesionales, cancelación del programa Estatus de Protección Temporal (TPS), cancelación de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, que se mantiene por decisión de los tribunales de justicia), reducción de la cuota de refugiados, cambios en reglamentos para acceder a beneficios migratorios tal como la residencia y modificaciones a todo tipo de reglamentos aprobados por el Congreso, entre otros.
Los cambios han traído “consecuencias humanas, económicas y políticas devastadoras” para la comunidad inmigrante durante los últimos cuatro años”, asegura la organización.
“Desde 2017 el gobierno ha realizado innumerables cambios de normas y políticas a golpe de acciones ejecutivas y memorandos para dificultar que los inmigrantes que ya están en Estados Unidos contribuyan al país, y para hacer que el proceso de inmigración a Estados Unidos sea más restrictivo y oneroso para futuros inmigrantes que buscan venir a Estados Unidos”, puntualiza.
Daños incalculables
Según FWD.us las modificaciones al sistema migratorio hechas por el gobierno en los últimos casi cuatro años han sido costosos y, en gran medida, “impopulares” que incluyen una serie de restricciones, entre ellas a un procesamiento expedito de la ciudadanía para los inmigrantes que sirven en las Fuerzas Armadas.
También dificulta el proceso de regularización de cónyuges de ciudadanos, los escrutinios con más elevados y dificultosos, han desmantelado el sistema de refugiados y aumentaron los costos de los trámites (aunque por ahora están detenidos por orden de tribunales).
“Las restricciones han contribuido a una baja del 50% en los niveles de inmigración en comparación con la fecha cuando Trump asumió el cargo y prácticamente han cerrado la mayoría de las vías de inmigración para el resto del 2020”, precisa.
El cierre de programas y fronteras lo justifica el gobierno con la pandemia del coronavirus.
Ataque a estudiantes
El informe también incluye las políticas que el gobierno ha implementado para restringir el programa de visas de estudiantes extranjeros.
“Los ataques del gobierno contra estudiantes internacionales están creando gran incertidumbre y ansiedad para más de un millón de alumnos nacidos en el exterior que asisten a universidades estadounidenses”, se lee en el reporte.
“Debido a la constante evolución de las políticas de inmigración, los empleadores están cada vez más cautelosos de contratar a estudiantes graduados que poseen visas F-1. Crea obstáculos y estrés evidentes para nosotros los estudiantes, pero también para las empresas que buscan talento”, dijo Pratima Satish, originaria de la India que hace poco obtuvo su doctorado en química computacional de UC Berkeley.
“En lugar de usar a los inmigrantes como chivos expiatorios e ignorar nuestras contribuciones, Estados Unidos debería permitirnos usar nuestros talentos y buscar maneras de construir nuestras vidas aquí y, al fin y al cabo, ayudar al país a ser más competitivo económicamente”, agregó.
En una carta enviada el martes por un grupo integrado por casi 100 organizaciones y docentes universitarios para exigir más tiempo para opinar sobre una reciente regla migratoria, señalaron que los estudiantes foráneos cada año apoyan más de 458,000 empleos y contribuyen con $41,000 millones a la economía de Estados Unidos.
“Además de destruir la vida de millones de inmigrantes, las restricciones de esta istración en casi todas las vías de inmigración están dañando a las empresas estadounidenses al limitar el crecimiento de empleos y obligar a los empleadores a trasladar los trabajos y la producción fuera del país”, advierte.
Otros datos
El estudio, además, señala que “si las políticas se mantienen y se vuelven permanentes, los recortes propuestos por el gobierno reducirían el PIB en un 2% y costarían $4.6 millones de empleos en 20 años”.
“Los estadounidenses de todo el espectro político creen que la inmigración es buena para nuestras comunidades y nuestra economía”, dice Andrew Moriarty, subdirector de políticas federales de FWD.us. “En lugar de cerrarle la puerta a quienes buscan contribuir a nuestro país, debemos establecer un sistema de inmigración justo y ordenado que dé prioridad al bienestar de nuestras familias, garantice la creación de empleos, promueva el crecimiento económico y mantenga nuestra competitividad global”.
FWD.us también señala en el informe que las medidas migratorias del gobierno, adoptadas bajo el amparo de la política de tolerancia cero, “son sumamente impopulares entre los votantes”. Señala que el 70% de los estadounidenses respalda el mantenimiento o expansión de la inmigración legal, según una reciente encuesta de Gallup.
“El apoyo para mantener o aumentar la inmigración ha aumentado desde que Trump asumió el cargo. Incluso un pequeño número de republicanos, incluyendo algunos de los aliados más cercanos del presidente, le han instado en repetidas ocasiones reducir los ataques a varios programas específicos de inmigración”, indica.
“El futuro de la seguridad económica y el crecimiento de nuestra nación proviene de las contribuciones de los empresarios inmigrantes, no de usar como chivo expiatorio a la misma población que durante siglos ha sido una pieza fundamental del motor económico de nuestro país”, dijo Todd Schulte, presidente de FWD.us.
“Durante más de un siglo Estados Unidos ha sido el destino principal para los mejores talentos del mundo y para las personas que tratan de construir una vida mejor para ellas y sus familias. Si tienen éxito, los esfuerzos del gobierno de Trump para restringir de forma radical la inmigración legal eliminarían esta ventaja histórica que impulsa nuestra competitividad global”, concluyó.