Él vota por Trump y su esposa, por Harris: el matrimonio que lleva 8 años en esquinas políticas opuestas
Han pasado 8 años desde que Mayra Campos Segura votó por primera vez en una elección presidencial en EEUU. Poco antes de ese 8 de noviembre de 2016, la entrevistamos. Ella y su esposo, Anthony Segura, estaban tan enamorados como opuestos en sus posturas políticas. Ella votó entonces por la candidata demócrata, Hillary Clinton; él, por el republicano, Donald Trump.
Aún están casados y aún siguen teniendo opiniones políticas opuestas.
Mayra ya votó, igual que en 2016, igual que en 2020: "En contra de Trump. No voté a favor del Partido Demócrata", se justifica al explicar que la candidata Kamala Harris era su única opción en la boleta, "la menos mala".
"Soy anti Trump y sigo siendo anti Trump (...) No voté por él, porque es una persona que no tiene calidad moral", dice la mexicana originaria de Chihuahua y ciudadana estadounidense desde marzo de 2016. "Después de haberlo conocido pienso que no solamente reitero lo que ya pensaba, lo refuerzo (...) Fue peor".
Como inmigrante, dice, vio en su comunidad "el terror que ocasionaba la retórica de Trump". Habla de amigas con niños llenos de miedo porque sus padres podían ser deportados mientras ellos estaban en la escuela; habla de ella misma y de la discriminación que, asegura, ha sufrido solo por ser mexicana. "Su retórica le dio poder a mucha gente que discrimina".
De demócrata a republicano
Cuando Mayra y Anthony se conocieron —hace 20 años— él era demócrata. Había pertenecido por 25 años al Comité Central del partido en Nuevo México y había votado por Bill Clinton y Barack Obama. También había trabajado para un alcalde demócrata, Martin Chávez, hasta que perdió su reelección en 2009 contra el republicano Richard Berry. Con esa derrota, Anthony perdió su empleo y decidió montar su propia empresa de consultoría política.
Ahí comenzaron sus decepciones con los demócratas: ninguno quiso contratarlo. Para su sorpresa, su siguiente oferta laboral se la hizo un miembro del Gran Partido Viejo y, cuenta, los demócratas se enteraron y le pidieron que renunciara al comité central. "No votaría de nuevo por el Partido Demócrata en mi vida", dice.
De Trump no se ha decepcionado en ocho años. Tampoco se han debilitado sus conexiones ideológicas con el republicano. Cree que —de ganar estas elecciones— Trump será un mandatario "más fuerte" que en 2016, que la economía mejorará —, que cerrará la frontera y promoverá una inmigración legal, como la de su esposa, a Estados Unidos.
Ocho años después del primer voto de su esposa, asegura que aún intenta convencerla para que se siente con él, en su bando. Ella se mantiene firme en la esquina contraria.
Una elección, una vida
Para Campos Segura, el problema es el sistema que mueve a Estados Unidos. Eso incluye que solo se pueda votar por dos opciones en un país con más de 300 millones de habitantes. Para ella, los partidos solo quieren mantener el poder. "Es decepcionante (...) Estoy segura de que hay miles de personas capacitadas para poder hacerlo mejor que cualquiera de los dos candidatos".
Sin embargo, confiesa que, aunque votó por Harris por falta de opciones, es momento de que una mujer tenga la oportunidad de llegar al poder: "Soy mujer y puedo demostrar que las mujeres hacemos cosas importantes".
Como inmigrante siente que ella lo hizo. Dejó sus tres consultorios y una carrera consolidada como cirujana maxilofacial en Chihuahua para vivir con Anthony en Albuquerque, Nuevo México. Cambió la vida profesional que soñó por la que puede tener en Estados Unidos. Es dueña de una estética que, asegura, levantó con "mucho esfuerzo y trabajo" y sin la ayuda de ningún gobierno.
Cuando conversamos con Mayra en 2016, su cáncer de seno había reincidido cinco veces. Recientemente regresó. Antes y ahora, Anthony Segura la acompañó en su recuperación. A pesar de sus diferencias, ambos reafirman que se aman.
Si Donald Trump resultara ganador, Mayra asegura que seguirá respetando la tendencia política de su esposo. Eso sí, no puede negar que cuando oye la voz del expresidente en la televisión "se me enchina la piel" de molestia y pide perdón a Dios por sus sentimientos: "No lo soporto".
Y si Kamala Harris ganara la Presidencia, Anthony confiesa que sentiría una "decepción extrema por la ignorancia de los votantes".