Los jóvenes en EEUU están teniendo cada vez menos sexo, muestra un estudio: ¿Por qué?

La investigación realizada por la Universidad Estatal de San Diego y publicada en la revista médica JAMA Network Open estudió la actividad sexual entre los jóvenes en Estados Unidos entre 2000 y 2018. Trabajaron con encuestas realizadas a más de 4,200 hombres y más de 5,200 mujeres.
"En esta encuesta desde 2000 a 2018, la inactividad sexual aumentó entre los hombres de 18 a 24 años y de 25 a 34 años y las mujeres de 25 a 34 años durante el período de estudio", indica la investigación. El aumento de inactividad entre los hombres "se produjo principalmente entre las personas solteras".
Además, el sondeo, escrito en la revista por Peter Ueda, Catherine H. Mercer y Cyrus Ghaznavi, señala que los hombres con ingresos más bajos y con empleo a tiempo parcial o sin empleo tenían más probabilidades de ser sexualmente inactivos.
"Este estudio encontró que la inactividad sexual aumentó entre los adultos estadounidenses, predominantemente hombres más jóvenes, entre 2000 y 2018, con posibles implicaciones para la salud pública", indica el informe.
La salud y la satisfacción sexual son componentes clave de la salud y el bienestar además, "la actividad sexual puede disminuir la frecuencia cardíaca y la presión arterial al tiempo que reduce el estrés al promover la liberación de oxitocina... por el contrario, una menor actividad sexual se ha asociado con una mayor mortalidad".
¿Motivos?
Jean. M. Twenge, profesor de psicología en la Universidad Estatal de San Diego, comentó en el informe de la investigación que existe "un conjunto de evidencia que sugiere que la actividad sexual ha disminuido en los países occidentales, particularmente en las últimas dos décadas".
"Primero, los adolescentes y los adultos jóvenes tardan más en llegar a la edad adulta. Esto incluye el aplazamiento no solo de la actividad sexual, sino también de otras actividades relacionadas con el apareamiento y la reproducción, como las citas, vivir con una pareja, el embarazo y el parto", señala Twenge añadiendo que estas tendencias "son parte de una tendencia cultural más amplia hacia el desarrollo retrasado".
El experto señala que la tasa de empleo de los adultos jóvenes "ha disminuido" y se descubrió que la inactividad sexual es "más común entre los hombres sin empleo a tiempo completo. A medida que las tasas de empleo han disminuido, también lo ha hecho la actividad sexual". Eso sumado a que más jóvenes viven con sus padres, hace más difícil las "actividades sexuales" porque muchos no son económicamente independiente.
La creciente disponibilidad de pornografía puede desempeñar un papel, pero el experto señala que no está tan claro aún. Pero sí considera que el avance exponencial de internet y los medios digitales desde el 2000 pueden tener parte de la responsabilidad.
"Incluso cuando las personas interactúan cara a cara, la tecnología móvil, como los teléfonos inteligentes, puede interferir con la satisfacción que las personas obtienen de la interacción en persona", añade.
Esa disponibilidad de entretenimiento 24 horas más los teléfonos inteligentes y las redes sociales, "la actividad sexual puede no ser tan atractiva como lo era antes". "En pocas palabras, ahora hay muchas más opciones de cosas que hacer al final de la tarde que antes y menos oportunidades para iniciar la actividad sexual si ambas partes están absortas en las redes sociales, juegos electrónicos y maratones (de series en TV)", concluye en su comentario.