¿En verdad tenemos que usar hilo dental?

El debate comenzó cuando la agencia AP publicó una pieza en la que explicaba que los beneficios del hilo dental no han sido probados. Es decir, ponía en entredicho una de las más recomendaciones más universales para la salud bucal: usar hilo dental para prevenir caries y problemas con las encías.
Se supone que las normas establecidas por las autoridades de salud, deben estar basadas en la evidencia. Y según el resumen realizado por AP, hay muy poca que demuestre que el hilo dental es efectivo. Cuando el gobierno federal dio a conocer este sus recomendaciones más recientes ( dietary guidelines) no incluyó el uso del hilo dental.
La ausencia del uso del hilo dental en las nuevas recomendaciones viola de alguna manera un componente para el cuidado de la salud oral que los higienistas dentales y dentistas solemos sugerir: “Cepillar y usar el hilo dental dos veces al día y visitar al dentista dos veces al año”. Incluso se han creado frases graciosas como: “No tiene que usar hilo dental en todos los dientes, solo úselo en los que prefiera conservar”.
Por décadas, profesionales dentales de todo el mundo han recomendado el uso del hilo dental para ayudar el cepillado. Todos sabemos que si la comida se queda atrapada entre los dientes, solo es posible removerla con la ayuda de un palillo o del hilo dental. Además, todos los que usamos hilo dental a diario, sabemos que ayuda a remover placa dental, así como otros restos de comida que no se ven y que el cepillo de dientes no puede alcanzar. Entonces, ¿cuál es el problema?
Para incluir recomendaciones, las guías federales requieren evidencia de dos grupos de estudios clínicos. En el caso del hilo dental, sería necesario comparar a un grupo de pacientes de lo use con otro que no lo use. Luego, por varios años, se podría ver si quienes usaron el hilo tuvieron menos caries y menos enfermedad periodontal.
Lo que la AP encontró es que prácticamente no hay estudios que lo hayan hecho y además, los datos proporcionados, no son confiables. Hay muy pocas investigaciones de personas que usen el hilo dental en su casa, y esos escasos estudios no confirman beneficios o daños específicos, por lo que las autoridades federales no pueden realizar una recomendación basada en la evidencia.
Pero la ausencia de evidencia no es lo mismo que la evidencia de ausencia. No necesitamos un estudio para probar los beneficios del uso de paracaídas. Tampoco hacen falta pruebas clínicas para demonstrar que la comida atascada entre los dientes puede ocasionar problemas.
Por esa razón, a pesar de no contar con la evidencia necesaria, la Asociación Dental Americana considera esencial combinar el cepillado con el hilo dental para mantener la salud bucal.
Sabemos que algunas personas se benefician más que otras de usar el hilo dental, incluso que hay quien se siente a gusto usándolo y otros para los que resulta difícil. En general, los riesgos asociados al uso del hilo dental son mínimos, pero tampoco tenemos evidencia que pueda probarlo.
Por eso nuestra recomendación es que sea práctico: use el sentido común y mantenga su boca limpia en todo momento con un buen cepillo, pasta con fluoruro e hilo dental. También puede incluir en su rutina el enjuague bucal, del cual sí existe evidencia de que funciona.
*La Dra. Analia Veitz-Keenan es profesora asociada de patología oral y maxilofacial, radiología y medicina en NYU Dentistry. El Dr. Richard Niederman es profesor y presidente de Epidemiología y Promoción de Salud en NYU Dentistry. Para más información, visite la página web del New York University College of Dentistry.
