En video: Otro joven muere por tres disparos en el pecho en una protesta opositora en Venezuela
Un manifestante de 22 años se sumó este jueves a la lista de jóvenes que han muerto al ser impactados en el pecho con objetos contundentes disparados por un militar durante las protestas opositoras en Venezuela, que ya superaron los dos meses.
La Fiscalía informó en un comunicado que se trata de David Vallenilla y que "resultó herido tras recibir tres disparos en el tórax" durante una manifestación en el este de Caracas.
Desde la clínica en la que fue recluido el joven, el médico y diputado opositor José Manuel Olivares aseguró que la muerte se produjo por balines de goma que le impactaron directamente en el corazón. La información fue confirmada por el alcalde del municipio Chacao, Ramón Muchacho.
El ministro de Interior y Justicia, Néstor Luis Reverol, dijo por su parte que la muerte del manifestante se produjo luego de un "asedio". "Recurrente asedio a base militar La Carlota (que) produjo hoy lamentable deceso de uno de los participantes en el hecho", tuiteó Reverol.
El ministro dijo que ya fue identificado el sargento que disparó y será "sometido a los procesos de ley" al emplear "un arma no autorizada para repeler el ataque, causando la muerte de uno de los participantes del asedio".
Apenas unas horas antes del suceso, el presidente venezolano Nicolás Maduro en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros presumía del "esfuerzo heroico" que hacen la Policía Nacional y la Guardia Nacional "sin armas de fuego, sin escopetas de perdigones, que están prohibidas, con agua y gasecito lacrimógeno, que está permitido".
En distintos videos divulgados por medios venezolanos en Internet se ve cuando el militar dispara al joven directamente en el pecho a menos de tres metros de distancia. El muchacho cae al suelo, se levanta, da unos pocos pasos, cae nuevamente y es ayudado por sus compañeros. El Ministerio Público ya designó un fiscal para que inicie la investigación mientras la Defensoría del Pueblo condenó los hecho y llamó a cesar la violencia.
La organización no gubernamental Control Ciudadano, exigió no solo una acción judicial contra el funcionario implicado en la muerte del joven, sino también la detención del comandante de la base aérea, del jefe de la policía aérea y de otros ocho funcionarios que participaron en la acción represiva contra los manifestantes.
Este viernes, el padre del joven, Daniel Vallenilla, le habló directamente al presidente Maduro desde la morgue: "Nicolás Maduro, sabes que trabajamos juntos. Soy el supervisor Vallenilla. Nicolás, claro que hubo una agresión directa contra el David José que conociste pequeño (...) Yo quiero que esto no quede así nada más, Nicolás, por favor. No era malandro, era un estudiante".
Golpes al pecho
Este lunes, un adolescente de 17 años murió cuando un Guardia Nacional le disparó con una pistola en el pecho en plena protesta. Su nombre, Fabián Urbina. Con él, 40 personas más resultaron heridas esa tarde, cuatro de ellas por armas de fuego.
Y hace justamente dos semanas, otro joven de 17 años, Neomar Lander, murió tras el golpe en el pecho de un objeto disparado por la Guardia Nacional. Esta muerte ocurrió a menos de 24 horas de que el ministro de la Defensa, general Vladimir Padrino López, instara a sus oficiales en las calles a evitar la violencia en el control de las protestas: "No quiero ver un Guardia Nacional más cometiendo una atrocidad en la calle", advirtió.
Lander falleció, según la Fiscalía, tras sufrir una herida en el tórax, aunque hubo versiones distintas de lo ocurrido: testigos –entre ellos diputados– acusaron a la Guardia Nacional de disparar una bomba lacrimógena contra el joven; el gobierno dijo que el muchacho manipulaba un artefacto de fabricación casera que explotó y le causó la muerte.
Los opositores intentaban marchar este jueves hacia la Fiscalía cuando fueron frenados con bombas lacrimógenas y chorros de agua por los militares. En ese momento, comenzó, una vez más, la batalla campal en la calle.
En una rueda de prensa este jueves, el presidente Nicolás Maduro aseguró que el uso de perdigones para el control de manifestaciones callejeras está prohibido. "La orden es muy clara (...) quien la viole, va preso", dijo. "La guardia y la policía han hecho un esfuerzo heroico y lo deben seguir haciendo, sin armas de fuego, sin escopetas de perdigones, están prohibidas, y con el agua y el gasecito lacrimógeno que está permitido".
Maduro aseguró además que ordenó una investigación para determinar si detrás de los militares que generan hechos de violencia "hay una conspiración".
La evidencia de los excesos, casi abusos, en las manifestaciones opositoras ha quedado registrada en videos difíciles de rebatir: se ve a oficiales disparando bombas lacrimógenas y perdigones directamente a la cara, al cuello y al pecho de quienes protestan y a pocos metros de distancia. Hay persecuciones, daños a la propiedad privada y hasta robos.
Una revisión de los reportes de prensa realizada por Univision Noticias, estima que en esta ronda de protestas al menos 13 jóvenes han recibido disparos de objetos contundentes en el pecho o en el tórax, al menos tres fueron impactados en el cuello y al menos ocho en la cabeza.
Con la muerte de Vallenilla este jueves, ascienden al menos a 76 las muertes en Venezuela en 83 días de protestas. La organización apartidista Foro Penal calcula que desde que iniciaron las manifestaciones ha habido 3,278 detenciones arbitrarias y que más de 2,000 personas permanecen privadas de libertad "ilegítimamente" . Además, 388 civiles ha sido presentados ante los tribunales militares: 220 de ellos quedaron detenidos por decisión de estas instancias.