Gobierno de Biden pondrá fin a las restricciones en la frontera para aceptar a migrantes debido a la pandemia
El gobierno de Joe Biden se prepara para poner fin a la política sanitaria Título 42 que dejó a cientos de miles al otro de la frontera como consecuencia de la pandemia. Según reportes de medios, se espera que la medida comience a regir a partir del 23 de mayo para permitir al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) prepararse ante una posible oleada de migrantes llegando a su borde sur.
La orden, que se espera sea emitida esta semana por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), considera que "ya no existe un peligro serio" de que los migrantes puedan contagiar a otros con covid-19 en los centros de detención, reporta el diario The Wall Street Journal.
Este miércoles, el DHS había publicado una estrategia para hacer frente a un eventual aumento de inmigrantes en la frontera a partir del momento en que los CDC decidieran suspender la aplicación del Título 42.
La polémica norma, implementada en 2020 por el gobierno de Donald Trump como parte de las medidas de salud pública para contener la pandemia del coronavirus, era revisada en momentos que se registra un incremento de nuevos contagios, esta vez causados por la variante BA.2 de ómicron, que ya representa el 55% de los casos en el país.
Los CDC hasta ahora habían estado reevaluando la política y la habían renovado cada 60 días. Le permitió al gobierno deportar de manera acelerada a extranjeros cuando los agentes federales determinaban que no existía una causa probable de asilo.
Desde su implementación en 2020, más de 1.7 millones de personas fueron devueltas a México bajo la autoridad del Título 42, según datos de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP).
El escenario
El martes, funcionarios del DHS que pidieron mantener el anonimato dijeron a ABC News que el plan contempla un aumento de hasta 18,000 casos diarios de asilo que deberán ser procesados por los agentes fronterizos al reabrir la frontera con México.
La estrategia difundida por el Departamento señala que el plan es mejorar la seguridad al tiempo que se “construye un sistema de inmigración justo y ordenado”.
Sin embargo, advierte que la violencia, la inseguridad alimentaria, la pobreza y la falta de oportunidades económicas en varios países del hemisferio occidental “siguen impulsando niveles de migración sin precedentes hacia nuestra frontera suroeste”, un problema que fue advertido por primera vez en 2013 por investigadores de la Universidad de California en un reporte entregado a Naciones Unidas (ONU).
El DHS agrega que el devastador impacto económico de la pandemia de covid-19 en la región “solo ha exacerbado estos desafíos” y agrega la actuación de organizaciones dedicadas al contrabando de personas “que difunden información errónea de que la frontera está abierta”.
La citación de grupos traficantes de personas refleja las preocupaciones del gobierno de un aumento de cruces ilegales causado principalmente por el retiro del Título 42.
La estrategia
El DHS dijo que la estrategia ante el previsible aumento de inmigrantes en la frontera incluye:
- Adquirir y desplegar recursos para abordar mayores volúmenes de personas;
- Entregar un proceso de inmigración más eficiente y justo;
- Tramitar y deportar a quienes no tengan pretensiones válidas (causas de asilo);
- Trabajar con otros países del hemisferio occidental para gestionar la migración y abordar las causas profundas.
Los puntos 3 y 4 citados en el documento se vienen implementando desde inicios del gobierno de Joe Biden el año pasado. Algunos resultados, como el éxodo continuo de personas, no ha bajado sino que se incrementa cada vez más.
Pero el DHS no solo culpa a los países desde donde se genera la migración hacia Estados Unidos; también apunta a la existencia de “un sistema de inmigración que está fundamentalmente roto”, que hasta ahora no ha sido reparado por el Congreso y pide que se establezca “un sistema de inmigración que fortalezca las vías legales”.
Cómo planea hacerlo
La estrategia indica que el plan de respuesta incluye planificación y apoyo entre agencias y dependencias que participan en el proceso migratorio.
También menciona la contratación de personal “y recursos para la frontera suroeste”, además de voluntarios del Departamento “para descomprimir rápidamente los puntos a lo largo de la frontera con México y procesar a los migrantes de manera más eficiente”.
El documento menciona aumentar la capacidad de retención temporal de la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP) “para procesar grandes volúmenes de personas de manera humana”.
Cabe señalar que, por ley, la Patrulla Fronteriza no debe mantener por más de 72 horas detenido a un extranjero. Después de ese plazo debe entregarlo al cuidado de otra agencia federal o proceder a su deportación si no existe una causal de asilo o la persona es inisible en Estados Unidos.
El proceso incluye además nuevos centros y expansión de los existentes “a fin de proporcionar un procesamiento integral más eficiente para los migrantes que se encuentran en la frontera sur”. Esta fase contará con apoyo de agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).
Fondos para la estrategia
El nuevo plan del DHS en la frontera revela que se financiará con fondos provenientes del proyecto de ley de asignaciones para el año fiscal 2022, donde el Congreso proporcionó $1,450 millones adicionales para un aumento potencial de trabajo en la frontera.
La cifra incluye $1,060 millones para instalaciones blandas de CBP, atención médica, transporte y costos de personal; $239.7 millones para ICE por capacidad de procesamiento, transporte y costos de personal; y $150 millones para el Programa de Alimentos y Refugio de Emergencia de FEMA en la frontera suroeste.
A su vez, el DHS dijo que el presidente había incluido en el Presupuesto de Gastos de la Nación para el año fiscal 2023 fondos para la contratación de 300 nuevos agentes de la Patrulla Fronteriza y 300 nuevos coordinadores de procesamiento de la agencia federal.
Nuevo plan de asilo
La estrategia del DHS menciona la nueva regla de asilo para extranjeros sujetos a deportación acelerada, que será implementado en dos meses, una vez se cumplan los plazos de publicación en el Registro Federal.
La semana pasada, el Departamento de Justicia (DOJ) y el DHS señalaron que estaban emitiendo la regla que “asegurará que aquellos que son elegibles para asilo reciban alivio rápidamente, y los que no lo son, sean rápidamente expulsados”.
“Hasta ahora las personas que pasan la entrevista de miedo creíble son puestas en un proceso de asilo únicamente ante un juez de inmigración, quien decide su futuro en Estados Unidos", explicó José Guerrero, un abogado de inmigración que ejerce en Miami, Florida.
"Con esta nueva regla, los oficiales de asilo podrán adjudicar ellos directamente la aplicación de asilo y agilizar el proceso en vez de esperar años”, añadió.
De acuerdo con la nota emitida por ambos departamentos, la regla autoriza a los oficiales de asilo de la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS), quienes evalúan cada caso que se presenta en la frontera, “a considerar las solicitudes de asilo de personas sujetas a expulsión acelerada que afirmen miedo de persecución o tortura, y pasen la evaluación de temor creíble requerida”.
Abogados consultados por Univision Noticias advirtieron que las entrevistas de miedo creíble que llevan a cabo los agentes de USCIS pueden demorar hasta dos horas cada una. "El gobierno necesitará muchos agentes de asilo para atender a miles de personas diariamente en la frontera con México", dijo el abogado Álex Gálvez, quien ejerce en Los Ángeles, California.
Otros detalles del plan
Además de mejorar instalaciones, agilizar procesos y preparar una nueva regla de asilo, el DHS dijo que la estrategia es:
- Continuar procesando a los migrantes de acuerdo con las leyes de Estados Unidos, incluida la remoción expedita de aquellos que no tienen reclamos válidos para permanecer en el país;
- Las personas que crucen la frontera sin autorización legal serán sometidas a procedimientos de deportación y, si no pueden establecer una base legal para permanecer en Estados Unidos, serán expulsadas de manera expedita;
- Aquellos que intentan ingresar a Estados Unidos sin autorización y sin una solicitud de asilo válida, están sujetos a consecuencias adicionales a largo plazo más allá de la deportación, incluidas las prohibiciones para futuros beneficios de inmigración;
- Trabajar con otros países para gestionar la migración y abordar las causas profundas que motivan el éxodo, y con los países de tránsito de la región para desalentar la migración; y
- Continuar la estrecha colaboración con el Gobierno de México en temas relacionados con la migración.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) dijo que bajo la orden del Título 42, el gobierno de Biden "ha negado repetidamente a las personas que huyen de la violencia y la persecución el derecho a buscar protección en Estados Unidos y las ha enviado directamente de vuelta al peligro".
