null: nullpx
Título 42

Defensores de inmigrantes advierten que nueva política de asilo de Biden está "totalmente fuera de los límites"

Abogados, religiosos y activistas señalan que, al igual que el Título 42, la nueva regla final de asilo anunciada por el gobierno limita un recuso legal disponible al no permitirles llegar libremente a la frontera y que sea un juez de inmigración quien decida sus casos.
Publicado 11 May 2023 – 09:49 AM EDT | Actualizado 11 May 2023 – 11:17 AM EDT
Comparte
Cargando Video...

Abogados, religiosos, legisladores y defensores de los derechos de los inmigrantes criticaron duramente la nueva política de asilo anunciada por el gobierno de Joe Biden y advirtieron que tendrá severas consecuencias para los inmigrantes más vulnerables.

“La prohibición de tránsito de asilo de la istración Biden socavará la ley humanitaria de asilo de Estados Unidos y perjudicará a los solicitantes de asilo vulnerables”, dijo la Asociación Americana de Abogados de Inmigración (AILA).

La reacción se produce tras la emisión el miércoles de la regla final de la nueva política, que condiciona la entrada al país de solicitantes de asilo e incluye deportaciones y severos castigos a quienes no lo hagan bajo la estrategia que reemplaza al Título 42 a partir de primer minuto del 12 de mayo.


Tanto el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) como el Departamento de Justicia (DOJ), señalaron que la regla final “se basa en los esfuerzos para combinar vías legales con consecuencias por no utilizarlas, al establecer ciertas condiciones limitantes sobre la elegibilidad de asilo para aquellos que no utilizan esas vías”.

La regla supone que aquellos inmigrantes “que no utilizan vías legales para ingresar a Estados Unidos no son elegibles para el asilo” y permite que el gobierno federal “expulse a las personas que no establezcan un temor razonable de persecución o tortura”.

Señala además que los extranjeros “pueden refutar esta presunción basándose únicamente en circunstancias excepcionalmente convincentes”.

Hasta antes de la implementación de las nuevas reglas emitidas por el gobierno de Biden, los extranjeros que huían de sus países podrían llegar a la frontera, entre puertos autorizados o permitidos, pedir asilo, un recurso legal autorizado por el Congreso, y que sea un juez de inmigración quien decida sus futuros en el país.

Una "desviación de nuestras leyes y valores"

“Dados los desafíos complejos y sin precedentes en la frontera sur, la istración Biden se encuentra caminando en la cuerda floja entre la gestión fronteriza eficaz y la protección humanitaria significativa”, dijo Jeremy McKinney, presidente de AILA. “Si bien muchas de las acciones de la istración, como abrir canales legales para buscar seguridad y reunirse con sus seres queridos, logran ese equilibrio, esta regla de asilo está totalmente fuera de los límites”.

McKinney advirtió que, con la implementación de esta nueva norma, “es probable que niegue a decenas de miles de personas cualquier oportunidad de buscar protección de manera significativa”.

“Nuestras leyes de inmigración—y nuestros valores—garantizan el derecho a buscar asilo sin importar cómo alguien ingresa al país. Esta desviación de nuestras leyes y valores es inaceptable bajo cualquier circunstancia”, precisó.

Por su parte, Benjamin Johnson, director ejecutivo de AILA, señaló que “el Congreso tiene la responsabilidad de retener los recursos necesarios para financiar una gestión fronteriza eficaz”. Y que los actuales niveles de financiación “están muy por debajo de lo que se necesita para evaluar adecuadamente y procesar oportunamente a los solicitantes de asilo”.

Religiosos advierten de “graves consecuencias”

Las organizaciones religiosas nacionales también reaccionaron con temor y preocupación ante la entrada en vigor de la nueva regla de asilo, prevista para el 12 de mayo, una vez sea eliminado el Título 42.

Si bien celebra la cancelación de la política de seguridad sanitaria que en tres años permitió la expulsión acelerada e más de 2.2 millones de inmigrantes, la Coalición Interreligiosa de Inmigración dice que tiene “serias preocupaciones de que las políticas que la istración de Biden implementará en lugar del Título 42 tendrán graves consecuencias”.

La expulsión acelerada, la expansión de detención y aprehensiones fuera de los lugares de culto también figuran en la lista de preocupaciones.

“Las tensiones están aumentando con el Título 42 finalmente llegando a su fin. Sin embargo, el anuncio sobre una regla de asilo que negará la protección a familias con niños e individuos simplemente porque viajaron a través de otro país y no buscaron protección allí primero, con muy pocas excepciones, aumentará la angustia de los amados hijos de Dios”, dijo Giovana Oaxaca, directora del Programa de Política Migratoria de la Iglesia Evangélica Luterana en América y copresidenta de la Coalición Interreligiosa de Inmigración.

“¿Por qué acoger a los solicitantes de asilo?”, preguntó. Ella misma respondió: “el amor de Dios es para todas las personas, sin excepción independientemente de su raza, origen nacional, estatus migratorio o tradición de fe”.

“Normas peligrosas”

Para la rabina Jill Jacobs, directora ejecutiva de T’ruah: The Rabbinic Call for Human Rights, la nueva política de asilo no debe reemplazar al Título 42 porque es “peligrosa” y recordó que el asilo “es un derecho humano fundamental y protegido”.

“Tenemos la obligación moral de recibir a los solicitantes de asilo con un sistema digno, justo, transparente y oportuno para ingresar legalmente a Estados Unidos. La Torá enseña la obligación de brindar amor y cuidado a las personas de fuera de nuestra sociedad de origen”, apuntó.

En similares términos se refirió Anika Forrest, directora legislativa de política nacional en el Comité de Amigos sobre Legislación Nacional.

“El final del Título 42 llega con un alivio hastiado ya que la istración Biden y el Congreso proponen políticas violentas que prohibirían el derecho de asilo y expulsarían por la fuerza a familias y niños a una posible muerte”.

“Amar a tu prójimo significa asegurar refugio. Hacemos un llamado a los formuladores de políticas para que busquen medidas que aseguren el derecho de asilo, apoyen los programas de gestión de la migración basados en la comunidad, brinden servicios básicos y respiro a las poblaciones en riesgo, e inicien sistemas y vías para que las personas establezcan vidas estables y prósperas”, agregó.

“Lamentamos que la istración de Biden no haya hecho más para establecer una dirección más compasiva, justa y ordenada para las políticas migratorias”, dijo la hermana Marie Lucey, OSF, directora asociada de la Red de Acción Franciscana (FAN).

“Socava el sistema de asilo”

Un grupo integrado por tres senadores demócratas alzó la voz y se sumó a las críticas hacia la nueva política de asilo del gobierno de Biden.

“El Título 42 es una reliquia dañina de la era Trump diseñada para crear caos en la frontera y eludir nuestras obligaciones nacionales e internacionales con los solicitantes de asilo”, dijeron los senadores Bob Menéndez (Nueva Jersey), Ben Ray Luján (Nuevo México) y Alex Padilla (California) por medio de un comunicado. “Nunca fue una solución, sino parte del problema”.

Los legisladores señalaron además que “es decepcionante ver que la istración optó por seguir adelante con una prohibición de tránsito dañina que limita fundamentalmente el al sistema de asilo de nuestra nación”.

“La istración puede estar a la altura de los valores de nuestra nación mediante la implementación de políticas que aseguren nuestra frontera, mantengan el compromiso histórico de nuestra nación con los solicitantes de asilo e inviertan en la gestión de la migración en todo el hemisferio occidental”, señalaron.

Entre las soluciones que el grupo plantea en reemplazo del Título 42, se incluye apoyo a las comunidades fronterizas a corto plazo y garantizar que el DHS pueda reubicar de manera segura a los migrantes en sus destinos finales donde puedan presentar sus solicitudes de asilo para aliviar la presión en la frontera. Al mismo tiempo, añaden, el presidente puede ampliar las vías legales para los migrantes de América Central y ayudar a que las economías locales prosperen, así como designar a Honduras, El Salvador y Nicaragua para un nuevo Programa de Protección Temporal (TPS).

“Crear nuevas barreras al justo al asilo y una serie de medidas punitivas destinadas a bloquear a la gente que se ve obligada a migrar es erróneo y perpetúa ópticas de corto plazo por encima de soluciones duraderas”, dijo Vanessa Cárdenas, directora ejecutiva de America’s Voice.

“Las políticas severas y que buscan disuadir siguen malinterpretando las realidades fundamentales y lo que impulsa a la gente a migrar y pedir asilo en Estados Unidos”, concluyó.


Comparte
RELACIONADOS:Joe Biden