De la campaña a la victoria: así han evolucionado las propuestas más polémicas de López Obrador
CIUDAD DE MÉXICO.- Desde ofrecer amnistía a líderes criminales hasta su firme oposición a la construcción de un nuevo aeropuerto en la Ciudad de México o su rechazo a vivir en Los Pinos, la residencia oficial de los presidentes mexicanos. Andrés Manuel López Obrador y su equipo de campaña han hecho algunas propuestas que han llamado la atención de algunos votantes. Ya como presidente electo tiene cinco meses para analizar cómo llevará sus propuestas a cabo.
Por el momento, desde que fue elegido presidente, López Obrador ya ha matizado algunas de sus propuestas más polémicas:
Cómo se aplicará la llamada amnistía
Una de sus propuestas más polémicas fue la de otorgar una amnistía a los líderes criminales para garantizar la paz, una decisión que sería sometida a consulta ciudadana. Esta propuesta fue recibida con rechazo por algunos políticos y diversos sectores de la sociedad.
Fue durante un mitin en Guerrero donde el entonces candidato de 'Juntos Haremos Historia' dijo que exploraría todas las posibilidades para disminuir la violencia en México. "Desde decretar una amnistía, escuchando también a las víctimas, hasta exigir al gobierno de Estados Unidos que lleve a cabo campañas para aminorar el consumo en ese país: hay mucha pobreza, se abandonó a los productores y se está optando, se está decidiendo por el narcotráfico, todo eso lo vamos a plantear para que se serene el país", dijo entonces López Obrador.
Tras su triunfo en las urnas, López Obrador lejos de echar esta idea atrás, dijo que convocará a representantes de Derechos Humanos, líderes religiosos, a la ONU y otros organismos nacionales e internacionales para elaborar un plan de reconciliación y paz para México, donde se analice si podría caber la amnistía a quienes hayan cometido delitos.
Olga Sánchez Cordero, propuesta por Andrés Manuel López Obrador como titular para la Secretaría de Gobernación, afirmó que para combatir la inseguridad, el nuevo gobierno federal no solo planteará una ley de amnistía, sino que también propondrá una reducción de penas.
Tres opciones para el futuro del nuevo aeropuerto
Antes del inicio del periodo de campaña, Andres Manuel López Obrador había declarado que, si ganaba las elecciones, cancelaría el proyecto a pesar del volumen de inversiones comprometidas y el avance de las obras. La declaración causó una ola de reacciones entre políticos y grupos empresariales de México.
En el Proyecto De Nación 2018- 2024 que Andrés Manuel López Obrador presentó a finales de 2017 como su propuesta de campaña, hay un apartado donde se señala que debe paralizarse su construcción. Su argumento es que el gasto que se ha hecho es excesivo, tiene impactos serios en el medio ambiente y no vale la pena dejar de utilizar un aeropuerto que ya está construido.
López Obrador propone construir otras dos pistas de aterrizaje en el Aeropuerto Militar de Santa Lucía como solución a la saturación del actual aeropuerto. No obstante, ya durante el periodo de campañas, AMLO moderó su postura y señaló que estaría dispuesto a llegar a un acuerdo con los empresarios para lanzar una convocatoria para concesionar la construcción y operación del aeropuerto.
En días pasados, ya como presidente electo, López Obrador ha hablado del tema con empresarios y con el presidente Enrique Peña Nieto, pero no ha dado una postura clara de lo que hará.
Sin embargo, Carlos Urzúa, quien, de acuerdo con López Obrador, será el próximo secretario de Hacienda, explicó en una entrevista para Foro TV que cuentan con tres planes sobre el futuro del aeropuerto. La primera de ellas sería mantener el proyecto actual, la segunda opción sería concesionarlo y un tercer plan sería construir las pistas en Santa Lucía.
Reforma Energética a revisión
De acuerdo con su proyecto de nación, el objetivo es el rescate del sector energético a través de impulsar la producción nacional de energía, la generación de alternativas de energías renovables, así como el fortalecimiento financiero y operativo de Pemex y las Comisión Federal de Electricidad, con la finalidad de reducir la dependencia energética del exterior.
Durante la campaña, AMLO, como le conocen sus seguidores al presidente electo, dijo en repetidas ocasiones que revisaría la reforma energética realizada por el gobierno de Peña Nieto, quien abrió la puerta a la inversión privada en la explotación de hidrocarburos. Además, prometió modernizar y construir nuevas refinerías, así como impulsar la extracción de gas.
El pasado domingo, en su discurso de triunfo, fue consistente con lo que dijo durante las campañas al prometer que revisará los contratos derivados de las licitaciones energéticas. Como respuesta, los empresarios mostraron apertura a que se les audite.
Este jueves, durante una conferencia de prensa, AMLO dijo que está trabajando ya en un proyecto para la construcción de dos nuevas refinerías y para la rehabilitación y mejora de las seis refinerías que existen en México.
Quiere mantener vigente Nafta y mejorar relación con EEUU
En su proyecto, López Obrador dijo que buscaría mantener vigente el Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) siempre y cuando “no se convierta en una fatalidad para los mexicanos”. Por eso, durante el periodo de campaña aseguró que de llegar a la presidencia haría lo posible para que su equipo formara parte del grupo de las negociaciones.
Tras las elecciones, y luego mantener una reunión con el presidente Enrique Peña Nieto y con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), se confirmó que integrantes de su equipo se sumarán a los negociadores mexicanos sobre la renovación del tratado.
Esta misma semana, López Obrador sostuvo una conversación vía telefónica con el presidente estadounidense Donald Trump y hablaron sobre proyectos de desarrollo para generar empleos en México. El presidente estadounidense también declaró que durante la llamada se tocó el tema de las negociaciones del TLCAN.
"Tuvimos una gran conversación, como de una media hora de duración, hablamos sobre seguridad fronteriza, hablamos sobre comercio, hablamos sobre TLCAN y sobre un acuerdo por separado, solo entre México y Estados Unidos", dijo el republicano en la Casa Blanca.
Reforma educativa “va para atrás”
Desde antes del inicio de las campañas, López Obrador prometió dar “marcha atrás” a la Reforma Educativa aprobada por Peña Nieto a través de un proyecto de reforma a la Ley del Servicio Profesional docente. “Se cancelará la mal llamada reforma educativa. Haremos uso de las facultades del ejecutivo para detener las afectaciones laborales y istrativas al magisterio nacional”, según afirmó el candidato presidencial durante uno de sus eventos de campaña en el sureño estado de Oaxaca.
Uno de los puntos más celebrados por los integrantes del magisterio durante sus giras fue la promesa de reparación del daño a los profesores que han sido despedidos tras la aplicación de las evaluaciones.
Como presidente electo, fue cuestionado por la prensa mexicana si durante su reunión con Enrique Peña Nieto hablaron de esta iniciativa y aseguró no haber tratado ese tema porque "ya es un compromiso" por su parte. La excoordinadora de campaña de López Obrador, Tatiana Clouthier, confirmó la declaración de Obrador diciendo que la reforma “va para atrás”.
Las pequeñas promesas que siguen en pie
Existen otras promesas de campaña que López Obrador ha prometido cumplir al pie de la letra en cuanto llegue a la presidencia de México como vender el avión presidencial, reducir el salario de los altos funcionarios (incluyendo el suyo), eliminar la pensión que reciben los expresidentes del país y ser el primer mandatario que no viva en la residencia oficial de Los Pinos.
Otra de sus promesas fue no hacer uso de la seguridad del Estado Mayor presidencial, pues asegura, “el pueblo será quien lo cuide”. Sin embargo, personal que él mismo propuso para su gabinete como la exministra de la Suprema Corte de Justicia, Olga Sánchez Cordero, han reconocido que el futuro presidente debe contar con protección.
“Como candidato él decía: la gente me cuida... pero como presidente, el estatus jurídico, político y de gobierno debe tener obviamente un sistema de seguridad que lo proteja porque estamos hablando de que, en un momento determinado, lo que está en juego es la gobernabilidad, la estabilidad del Estado mexicano”, dijo Sánchez Cordero.
