Estudiantes avanzan casi un año en términos académicos solo con que les retrasen la hora de entrada a la escuela

Retrasar el horario de entrada de una escuela por al menos una hora ayuda a los estudiantes a aumentar sus calificaciones y a adelantar tanto en términos académicos como lo que progresan típicamente en un año, según un nuevo análisis del Center For American Progress (CAP).
El CAP, un centro de investigaciones sobre política pública, aboga porque la jornada escolar en todo EEUU sea entre las 9:00am y 5:00pm, alineada a con la jornada laboral típica para que los padres y madres trabajadoras no se vean en la obligación de incurrir en gastos adicionales para que les cuiden a sus hijos en lo que salen de sus empleos.
Por otro lado, en EEUU también existe un movimiento, Start School Later, que pide a las escuelas no iniciar sus clases antes de las 8:00am (8:30am para los adolescentes), basado en estudios que indican que despertarse antes de la salida del sol altera el reloj biológico de los jóvenes entre los 12 y 25 años de edad.
“Cualquier padre que haya luchado para sacar a su hijo o hijo de la cama y llegar a la escuela a tiempo sabe que el horario temprano de entrada en la mañana representa un reto”, dijo Ulrich Boser, coautor del análisis del CAP.
“Este análisis documenta por primera vez los aumentos en el desempeño (académico) a nivel nacional que podrían surgir de comenzar la escuela más tarde”, agregó Boser.
Para su análisis Boser aplicó a nivel nacional los resultados de otro estudio hecho en escuelas intermedias de Carolina del Norte en 2012, que halló que retrasar el inicio de la jornada escolar por una hora aumentaba las calificaciones de los estudiantes en dos puntos en exámenes estandarizados de matemáticas y en un punto y medio en lectura.
El estudio de Carolina del Norte halló razones biológicas primordialmente para las mejores calificaciones, porque comenzar una jornada escolar temprano les resta horas de sueño a los jóvenes y perjudica su rendimiento académico.
Este estudio sostiene que los jóvenes, incluso acostándose más temprano todos los días, no alcanzan a compensar el sueño perdido por levantarse más temprano.
Los estudiantes que comienzan la escuela más tarde, sin embargo, tienen menos ausencias, miran menos televisión y pasan más tiempo haciendo tareas cada semana, lo que facilita que saquen mejores calificaciones en sus exámenes, indica el estudio de Carolina del Norte.
El mismo recomienda retrasar el inicio de la jornada escolar como una manera “costo efectiva de aumentar las calificaciones en los exámenes”.
Boser aplicó los cálculos del estudio de Carolina del Norte a los resultados de 2015 de los exámenes del Registro Nacional de Progreso Educativo (NAEP) y halló que las calificaciones en matemáticas para los estudiantes de octavo grado aumentarían hasta ocho puntos si cada escuela retrasara el inicio de la jornada escolar por una hora.
“Según muchos expertos en educación este aumento ( en puntuación) es equivalente a casi un grado entero”, pues entre grado y grado es común que se registren incrementos de 10 puntos en las calificaciones de este tipo de pruebas, indica el análisis.
Aunque los investigadores solo aplicaron la metodología a los exámenes de matemáticas de octavo grado, indicaron que los estudiantes de secundaria con mucha probabilidad obtendrían los mismos beneficios que los de intermedia si retrasaran por una hora su entrada a la escuela, pues los adolescentes son los más perjudicados por la pérdida de horas de sueño.