Mitch McConnell presenta en el Senado un nuevo plan de ayudas que es rechazado por los demócratas
El líder republicano Mitch McConnell presentó este martes un nuevo plan de ayudas económicas que espera sea votado esta misma semana en el Senado, aunque con pocas probabilidades de avanzar debido a que ya fue rechazado y catalogado de "enclenque" por los demócratas.
McConnell habló en el Senado el día en que regresaron del receso de verano y a pesar de que las negociaciones bipartidistas sobre otro paquete de estímulo se encuentran en el mismo punto muerto en el que quedaron el 7 de agosto.
"Nuestro plan no es un plan de varios billones de dólares para reconstruir a todo el país, no contiene todas las políticas de alivio que nosotros los republicanos pensamos que pueden ayudar en el corto plazo. Confío en que los demócratas sentirán lo mismo, pero las personas no necesitan que sigamos discrepando en lo que podría ser perfecto", acotó sobre el plan que afirmó será votado esta semana. Minutos después, McConnell dijo a periodistas que la votación sería este jueves, reportó el medio The Hill.
Se trata de el HEALS Act de $1 billón. No contiene dinero para enviar otra ronda de cheques a los hogares del país, ni fondos para las personas que no han podido pagar sus arriendos.
Hasta el momento no ha quedado claro si hay un consenso entre los republicanos para apoyar este plan. Reportes de medios precisaron la semana pasada que McConnell –quien ha permanecido al margen de las conversaciones con los demócratas– no tiene aún el respaldo de al menos 51 senadores republicanos en su intento por apuntalar las carreras de quienes afrontan desafíos electorales.
Ha sido difícil lograr un pacto entre los republicanos porque algunas de las voces más conservadoras, como el texano Ted Cruz, han dicho que es innecesario otro plan de ayudas federales tras el paquete de estímulo de $2 billones de marzo, el CARES Act.
Este nuevo plan republicano fue recibido con críticas de los demócratas, que lo consideran insuficiente cuando millones siguen desempleadas en Estados Unidos.
"Incluso el líder McConnell ha enfatizado varias veces que 20 senadores republicanos buscan no hacer nada frente a esta crisis histórica", agregaron.
Posturas muy lejanas
Cualquier negociación bipartidista se topará con obstáculos y posturas diametralmente opuestas.
Ese monto de $500,000 millones mencionado en la reciente propuesta republicana sigue alejado del número que sería aceptable para los demócratas, que abogan por nuevo paquete de al menos unos $2 billones.
Los demócratas han reducido con el paso de las semanas el 'precio' de su proyecto de ley HEROES Act de $3.4 billones –aprobado hace meses en la Cámara de Representantes–, pero siguen firmes en que se debe asignar dinero a los estados y ello es rechazado tajantemente por Trump y los congresistas republicanos. Los primeros apuntaban a darles unos $900,000 millones y los segundos aflojaron levemente su postura inicial de no otorgar nada prometiendo luego unos $150,000 millones.
Antes de que comenzara el habitual receso de verano eran varios los puntos espinosos que separaban a los congresistas y a la Casa Blanca. Ahí entraban, por ejemplo, la renovación del subsidio adicional de $600 semanales por desempleo –vencido a fines de julio– y la asignación de fondos a los estados.
Los demócratas buscaron extender la entrega de los $600 en su totalidad hasta principios del próximo año, mientras los republicanos abogaron por reducir la ayuda a $200 semanales por un par de meses y poner en marcha un nuevo esquema bajo el cual las millones de personas desempleadas recibirían el equivalente al 70% del salario perdido.
Como ello quedó en un limbo, Trump firmó un memorando reasignando fondos de la Oficina para el Manejo de Emergencias, FEMA, a este subsidio federal. FEMA ya aprobó los fondos para que casi todos los estados puedan entregar $300 semanales, pero ese dinero sería suficiente solo por unas cinco a seis semanas, han dicho analistas.