Estas son la seis ideas ganadoras que intentarán mejorar el metro de Nueva York

La Autoridad del Transporte Metropolitano (MTA, por sus siglas en inglés) buscó a alguien, en cualquier parte del mundo, que pudiera dar con una solución para el (alicaído, desgastado) metro de Nueva York. Una medida desesperada, pero, que aparentemente dio en el clavo.
Con la esperanza de hallar respuestas a, digamos, la persistente aglomeración, los retrasos de los trenes y a una infraestructura en ruinas, la MTA lanzó el concurso Genius Transit Challenge el pasado mes de junio. Con un premio de hasta $1,000,000 para la mejor idea, cerca de 500 grupos provenientes de 23 países distintos enviaron sus propuestas.
Ahora viene lo interesante: ya se conocieron los resultados.
Hace una semana, un de expertos eligió a 6 ganadores, premiándolos con un total de 2,5 millones de dólares. A continuación, un video de cada equipo explicando su iniciativa:
Señales de control del tren
El actual sistema de señalización del metro está desactualizado y es una de las principales causas de los retrasos y el hacinamiento. Hoy, todas las líneas excepto la L emplean un sistema de señalización llamado de bloque fijo. Este divide las líneas en “bloques”, evitando que dos trenes estén sobre el mismo bloque a la misma vez. Si bien es eficaz para mantener la seguridad, el sistema de bloques fijos impide que los trenes corran lo más cerca posible unos de otros, como sí lo permiten los sistemas modernos. MTA planea instalar sistemas de señalización más eficientes –conocidos como Control de Tren Basado en Comunicaciones (CBTC, por sus siglas en inglés)– en muchas de sus líneas. La línea 7 ya está, por ejemplo, casi terminada.
Pero el proceso consume tiempo y dinero. De ahí que dos ganadores del Genius Transit Challenge triunfaron con métodos más baratos y rápidos de instalar sistemas de control de trenes de vanguardia.
Entretanto, Robert James y Metrom Rail recomendaron la instalación de dispositivos para realizar comunicaciones inalámbricas a lo largo de la vía, los cuales requerirían mucho menos hardware y trabajo de instalación que los actuales métodos para la tecnología CBTC.
La propuesta de Ansaldo STS & Thales también reduce los costos, por medio de la implementación tecnología CBTC con cámaras y sensores en el frente de cada tren.
Más capacidad, nuevos vagones
Craig Avedisian, abogado de Nueva York, optó por incrementar la capacidad de pasajeros añadiendo más vagones a los trenes, sin tener por ello que construir plataformas más grandes. Esta iniciativa se materializaría creando una sección “A” y otra “B” en los trenes, en correspondencia con estaciones asignadas a esas letras, respectivamente. En una estación A, solo se abrirían las puertas de los vagones de la sección A, y así con las B y las C. La intervención podría, teóricamente, aumentar la capacidad del tren en un 42%.
El fabricante chino de trenes CRRC MA planea invertir $50 millones para desarrollar los futuros vagones del metro de Nueva York. Sus rasgos esenciales serán materiales más ligeros, gran eficiencia energética, y un diseño modular que facilitaría la actualización conforme las nuevas tecnologías estén disponibles.
Gestión de datos
CSinTRANS (o simplemente CSiT), por su parte, sugiere centralizar los datos relativos a los vehículos de transporte público, permitiendo al personal de MTA y a los pasajeros estar al tanto de los problemas en tiempo real. El sistema también está dirigido a reducir los costos de mantenimiento al detectar roturas antes de que estas se vuelvan más complejas y difíciles de solucionar.
Mantenimiento del túnel
El metro de NYC es uno de los pocos sistemas en el mundo que funciona las 24 horas, por ende dispone de escaso tiempo para hacer reparaciones. En este sentido, la propuesta de Bechtel Innovation quiere dotar al sistema de un robot para el mantenimiento de túneles, especializado en reparaciones rutinarias. El robot, similar a esos que ya operan en Reino Unido, podría ayudar a reducir los costos y a mejorar la seguridad de los trabajadores.
Si serán aplicadas o no estas “geniales” ideas no queda claro todavía. Ahora bien, si se implementan, el ritmo notoriamente glacial del progreso en MTA significa que pasará un buen tiempo antes que los s experimenten sus beneficios. Con todo, tras los incontables retrasos y los infernales percances del pasado verano, cualquier proyecto creativo debería ser una señal de aliento.
Este artículo fue originalmente publicado en inglés en CityLab.com