La boda de Meghan y Harry no fue la más vista de la historia (no creerás cuál la supera)
El 19 de mayo de 2018 la boda del reunió una audiencia de 11.5 millones de personas-, sin embargo este enlace de cuento de hadas no es la boda real más vista de todos los tiempos.
Seguramente te preguntarás, ¿cuáles son las primeras ? De hecho, son bodas que pertenecen a la misma familia real, y una de ellas es realmente sorprendente.
Hay que matizar que existe una excepción, y se trata de la boda entre Carlos y Diana de Gales, celebrada el 29 de julio de 1981 en la catedral de St. Paul en Londres. Para esa ocasión, 750 millones de personas se dieron cita frente a sus televisores alrededor del mundo para ver vía satélite el enlace del heredero a la corona y la joven Lady Diana Spencer, en una época en la que no había telecomunicaciones tan de vanguardia como las de hoy, por lo que ocupa un lugar especial en la historia.
Pero en el siglo XXI, la boda que ostenta el mayor número de televidentes conectados es la del príncipe William y Kate Middleton en la abadía de Westmisnter, que el 29 de abril de 2011 reunió una audiencia de aproximadamente 17.6 millones de personas solamente en Reino Unido (aunque se habla de que el 40% de la población mundial siguió este momento a través de diferentes dispositivos). Esto la coloca en primer lugar, ya que el diario 'El Mundo' anunció que la boda de Meghan y Harry tuvo una audiencia 30% menor que la de los duques de Cambridge en Gran Bretaña, lo que se explicaba con la noción de que William es el futuro heredero al trono y Kate algún día será reina.
Ahora bien, si la de los duques de Cambridge ostenta el primer lugar, la pareja que está en segundo lugar, superando a Harry y Meghan, termina siendo una sorpresa, sobre todo si tomamos en cuenta que son una de las parejas reales más discreta (y totalmente apartada de los reflectores).
Se trata de la boda del príncipe Eduardo (nacido en 1964) y Sophie Rhys-Jones, la condesa de Wessex. El 19 de junio de 1999, cuando llegaron al altar, 14.8 millones de personas siguieron todos los detalles desde Gran Bretaña (se calcula que fueron 200 millones alrededor del mundo).
Es probable que esto sorprenda a muchos, si se toma en cuenta que Eduardo y Sophie no figuran tanto en el panorama público, aunque hay que señalar que en ese momento se trataba del hijo menor de la reina Isabel II, contrayendo matrimonio con su novia con la que llevaba muchos años, una historia de amor sosegada y tierna, sin altibajos. Curiosamente, este enlace también tuvo lugar en la capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor.
Por supuesto, de estas tres, la más cara fue la de Harry y Meghan. Aunque la históricamente más relevante es la de los duques de Cambridge, los duques de Sussex no se quedan con las manos vacías, y es que en EEUU tuvieron 20 millones de telespectadores, que son 6 millones más de los que tuvo la boda de William y Kate.
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