Toyota recortará en un 40% su producción de septiembre debido a escasez de chips
propagación del COVID-19 en el sudeste asiático.
En otras palabras, la firma construirá alrededor de 360,000 vehículos menos de lo que en un inicio tenía planeado. Solo en Norteamérica supondrá una caída de 80,000 unidades, debido a que todas las plantas de Toyota quedarán temporalmente inoperativas a excepción de una, ubicada en San Antonio, Texas, y donde actualmente son ensambladas las pickups Tacoma y Tundra.
La producción de la Toyota Highlander, RAV4, Corolla y Camry, cuatro de los modelos más vendidos en Estados Unidos tras la primera mitad de 2021, permanecerá en pausa durante este tiempo.
El recorte también involucra a 14 plantas de Toyota en Japón y otras ubicadas en China y Europa.
Toyota no es el único fabricante que se ve obligado a tomar medidas como estas a causa de la falta de microchips. la F-150. El cierre de una semana está programado para dar inicio este lunes, 23 de agosto.
Por otro lado, Volkswagen también dijo este jueves que es posible que necesite recortar aún más su producción por esta misma problemática.
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