De acuerdo a información, Francisco Romero Díaz recibió una llamada alertándolo de un supuesto incidente en un bar ubicado en Playa del Carmen, estado de Quintana Roo, por lo cual arribó al lugar para cubrir la noticia. El cuerpo del reportero fue encontrado con muestras de golpes y dos disparos en la cara. Tras el suceso, se realizó una protesta a las afueras del palacio municipal exigiendo respeto a la prensa y un alto a la violencia.