Taylor Rogers, una habitante de Santa Fe, Texas, está demandando a la policía de esa ciudad después de que, en medio de una detención, la pusieran boca abajo sobre hormigas bravas. La mujer denuncia que fue picada en la cara y el cuello por los insectos; sin embargo, las autoridades dicen que fue tratada con "respeto y dignidad". Te puede interesar: ¿Puede un gusano comerse parte de tu cerebro? Un doctor explica qué le pasó a Robert Kennedy Jr.