En medio de una reunión de gobernadores, Jay Inslee, gobernador de Washington, tomó el micrófono y dijo al mandatario estadounidense que varios maestros con los que habló "no quieren" tener sobre sus hombros la responsabilidad de ir armados a las clases. Después de la masacre de Parkland, Trump ha insistido en la idea de armar y entrenar a un porcentaje de los profesores de las escuelas.