Adrianna Campos es una científica que durante tres meses trabajó en un programa de USAID hasta que fue despedida por el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Campos asegura sentir indignación y tristeza tras haber perdido el empleo que la motivó a mudarse desde Florida. Algo similar le ocurrió a Susan Acosta, quien asegura que le arruinaron su carrera tras ser despedida del Instituto Nacional de Salud.
También puedes ver: ¿Cómo el gobierno Trump busca justificar la reactivación del Título 42 sin una pandemia de por medio?