Exfiscal mexicano denuncia que gobierno de Peña Nieto intentó comprar su silencio por caso Odebretch
CIUDAD DE MÉXICO.- Santiago Nieto, el exfiscal para la atención de delitos electorales que investigaba los tentáculos d el caso Odebrecht en México, aseguró en una entrevista con The Wall Street Journal que el gobierno de Enrique Peña Nieto lo trató de sobornar para que guardara silencio sobre la investigación vinculada a la campaña presidencial del PRI en 2012.
“Intentaron comprarme para que guardara silencio”, dijo Nieto. Sin embargo, aseguró que ante esa oferta respondió: “Lo siento, pero no puedo recibir dinero de Peña Nieto”.
De acuerdo con la entrevista, el ofrecimiento sucedió después de que el pasado mes de octubre lo despidieran de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade). El exfiscal estaba investigando en el caso Odebrecht y la probabilidad de que estos recursos hubieran llegado a la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto en 2012.
Nieto relató al diario que, tras ser retirado de su puesto en la Fiscalía, fue convocado a un hotel por un funcionario de la Secretaría de Gobernación, quien le dijo que el gobierno quería mantener una buena relación con él y que, como un gesto de buena fe, le ofrecieron dinero por no tener trabajo.
"Yo era un fiscal molesto para el gobierno y querían que me fuera", dijo el extitular de la Fepade, quien además declaró que intentaron chantajearlo con fotografías que evidenciaban una relación extramarital.
La esposa de Nieto le informó que, de manera anónima, le enviaron fotos de él con otra mujer, por lo que su matrimonio terminó. Luego, aseguró, comenzaron más amenazas, incluyendo uno con el alias de "La muerte te sigue".
Santiago Nieto fue despedido en octubre tras dar declaraciones a la prensa en las que, según la fiscalía general, reveló detalles de la investigación y afectó la presunción de inocencia de uno de los implicados. En esa entrevista, Nieto sugirió que el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya lo presionó para que declarara públicamente su inocencia a través de una carta.
Aunque la Fiscalía sostuvo que su despido obedeció a razones técnicas, partidos de oposición en México y el propio Nieto objetaron la decisión. Además, pidieron su reposición en el cargo alegando una maniobra política que buscaba entorpecer el esclarecimiento de la presunta corrupción de Odebrecht en México.
Tras varios días de polémica, Nieto desistió de su intención diciendo que ya no existían condiciones para que desarrolle sus funciones. Sin embargo, negó haber sido presionado por Lozoya.
Testigos han declarado a la justicia brasileña que Lozoya, quien fue coordinador de la campaña de Peña Nieto y luego director de la petrolera estatal Pemex, recibió más de 10 millones de dólares en sobornos, tanto durante la campaña como cuando era funcionario.
Durante la entrevista, Nieto aseguró que teme por su vida y la de sus hijas.
