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Donald Trump

Trump hace pausa de negocios para inaugurar su hotel en Washington

En la calle sindicalistas y otros manifestantes recibieron al magnate con una protesta.
26 Oct 2016 – 05:15 PM EDT
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El personal del Hotel Trump Internacional estuvo atento al momento en que Donald Trump cortó la cinta roja y el hotel quedó inaugurado Crédito: Getty Images

A pesar de su caída en las encuestas, el candidato republicano Donald Trump encontró tiempo en su agenda para promover su negocio más reciente: el Hotel Internacional Trump.

De camino a un mitin en Carolina del Norte este miércoles, el magnate hizo una parada en Washington para la ceremonia de apertura de su nuevo hotel ubicado en la prestigiosa avenida Pensilvania.

Situado a medio camino entre la Casa Blanca y el Capitolio, este hotel cinco estrellas cuenta con más de 200 habitaciones donde uno puede pasar la noche por poco más de $800. La habitación más grande conocida como la “Trump Townhouse” tiene 6,300 pies cuadrados y se alquila por $25,000 la noche.

Pero la visita del candidato republicano no estuvo ausente de controversia. Afuera le esperaban unos 150 manifestantes.

Hotel Trump: ¿una metáfora para su gobierno?

Frente a los de invitados VIP reunidos en el salón de baile del hotel y compartiendo escenario con sus tres hijos mayores Donald Trump Junior, Eric y Ivanka, el magnate dijo que la reforma de su hotel es “una metáfora” para lo que quiere conseguir con el país.

El tema de hoy es “gastamos menos de lo presupuestado y acabamos antes de tiempo”, dijo el propio Donald Trump.

El hotel está ubicado en el antiguo edificio de correos del gobierno federal, que le otorgó un contrato por 60 años. Y aunque se mantuvo la estructura principal, se incorporaron espacios adicionales y el todo fue sujeto a una importante reforma que lideró Ivanka Trump.

La obra estaba pendiente de finalizar en agosto de 2018, pero a mediados de septiembre de este año los primeros huéspedes ya habían pernoctado en el hotel.

Los invitados políticos más destacados este miércoles eran Jefferson Sessions, Senador por Alabama y el republicano Newt Gingrich, que anoche puso en duda las acusaciones de acoso sexual que pesan sobre Donald Trump, en una entrevista con Megyn Kelly de Fox News.

La esposa de Donald Trump Melania y su hija menor Tiffany también estaban sentadas entre los VIPs.

Protesta sindical

Mientras tanto, afuera del reciento, la visita de Trump fue recibida por decenas de representantes sindicales de AFL-CIO y United Here que protestaban por la negación de los directivos del Hotel Trump en Las Vegas a concederles el derecho a sus empleados de formar un sindicato.

“Un señor que no está dispuesto a respetar los derechos más básicos de sus trabajadores no tiene ningún lugar como presidente de la república”, dijo a Univisión Noticias Yoel Bitrán, un estadounidense de 27 años, hijo de chilenos exiliados.

A algunos pasos, un comerciante callejero conocido como “Business Dave”, vendía chapas a favor y en contra de Trump. El que más se vendió era el de “Dump Trump” (Trump a la basura). “Si hubiera sabido, hubiera traído más”, dijo con una sonrisa pícara.

Otros manifestantes alzaban un cartel: “Los inmigrantes y musulmanes están bienvenidos aquí. El Hotel Trump no.” Pero James Harcomb, un manifestante a favor del candidato republicano también quiso hacer escuchar su voz: “No me preocupa la inmigración ilegal pero los indocumentados sí que me preocupan”, afirmó este votante republicano.

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