¿Por qué se ignoraron las pistas que dejó Nikolas Cruz antes de actuar?

¿Se podía haber prevenido la matanza de Parkland, El FBI ha reconocido que se equivocó al no investigar al joven de 19 años cuando una persona cercana a Cruz los ó el pasado 5 de febrero y avisó de su deseo "de matar gente, de su comportamiento errático y de sus perturbadoras publicaciones en redes sociales, además de sus intenciones potenciales de llevar a cabo un tiroteo en una escuela". El FBI también erró al no conseguir identificar a Cruz como autor del comentario de YouTube "voy a ser un pistolero de escuela profesional” , a pesar de estar informados.
Hubo avisos de compañeros, familia, vecinos. Su escuela tenía prohibido a Cruz entrar con mochila en sus instalaciones, y fue expulsado. Todas las pistas estaban allí y, como el propio FBI ha reconocido, ellos fallaron. Pero además, y teniendo en cuenta que en Estados Unidos hay 11 veces más tiroteos que en cualquier otro país industrializado, sorprende que no se implementen los sistemas de prevención de amenazas de tiroteos masivos que ya en algunos institutos, universidades, comunidades y corporaciones están operativos y que establecen cuáles son las señales de alarma y los métodos de actuación.
El doctor Reid Mellow forma parte de uno de esos grupos y es autor del 'Manual internacional de prevención de amenazas' publicado por la Universidad de Oxford. No sabe exactamente qué falló en este caso porque, dice, aún es muy pronto para sacar conclusiones, pero sí apunta a que en Florida no existen grupos de prevención de amenazas "a pesar de que ha sufrido 3 tiroteos masivos: Pulse, Fort Lauderdale y ahora este".
Explica así a Univision Noticias el funcionamiento de estos grupos: "en una secundaria o en una universidad los grupos se forman con autoridades del campus, el director, un psicólogo, de la facultad y cuando hay información preocupante sobre un alumno se acude a ese grupo y se decide si se le propone terapia, incluso supervisión psiquiátrica o, por ejemplo, si un alumno postea imágenes de armas en las redes sociales o hace declaraciones de intenciones de cometer un acto violento se acude a la policía y este es típicamente el momento de implicarse mucho más en el caso porque el alumno ha avanzado en el comportamiento tipo del tiroteador masivo". Es decir, no basta con tomar acciones disciplinarias o prohibirle acercase a la escuela.
El comportamiento que los grupos de prevención de amenazas tienen tipificado consta de 3 pasos y como explica Reid se basa en que "los individuos siempre alertan con ciertos comportamientos antes de participar en violencia planeada con un objetivo en mente".
1. El camino
Es como denominan a los primeros pasos antes de cometer un asesinato masivo. Primero comienza con la idea de hacerlo. Una vez que se plantean cometer un asesinato de estas características empieza la etapa de investigación en la que recogen información sobre otros tiroteos, armas, etc. Después viene la fase de planificación y ahí pueden empezar a comprar armas y munición y es la etapa en la que deciden su objetivo.
2. Filtración
Es otro signo de alarma y es cuando comunican a una tercera parte su intención de atacar. Esta tercera parte en los últimos tiempos suelen ser las redes sociales. El futuro atacante postea sus intenciones en sus redes o en las de otros, como sucedió con Cruz. "Sabemos por nuestras investigaciones y las de otros grupos de prevención que la mayoría de los individuos que perpetran asesinatos masivos comunican su intención a un tercero".
Otro comportamiento que los grupos de prevención buscan como señal de alarma es que en este momento el individuo se comienza a obsesionar con las armas, con lo militar, con la violencia y hablan de esto mucho a las personas de su alrededor y en sus redes sociales. "este comportamiento suele hacerlo público para que sea notado por otras personas", dice Reid.
Otra alarma es que se suelen identificar con atacantes anteriores. "Esta es una señal muy importante, una advertencia que miramos muy de cerca", explica el doctor.
3. El último recurso
"En la mayor parte de los casos vemos un evento desencadenante. Normalmente es la pérdida de un amor o de un trabajo. Es algo que hace pensar al individuo que tiene que atacar y que tiene que hacerlo ya", explica Reid.
¿Qué falló entonces? Un sistema entero de detección que no está implementado. "En Virginia, tras Virginia Tech por ley todas las universidades tienen grupos de prevención de amenazas, pero no se suelen poner en marcha estos grupos hasta que no sucede una tragedia", cuenta Reid. Y añade algo más: estos grupos funcionan. Según un estudio realizado por su grupo, de 80 matanzas o intentos de ataque que querían imitar a Columbine estudiados desde 1999, 50 fueron abortados por las autoridades tras el seguimiento de grupos de prevención de amenazas.
Vea también: