El triste fin de este Mercedes AMG, Porsche y McLaren que chocaron
El pasado 4 de febrero se reportó un accidente entre tres autos deportivos, una camioneta y un autobús de pasajeros, en la vía Bogotá-Tunja, a 78 kilómetros de Bogotá, Colombia. Los coches quedaron destruidos y un depósito de chatarra podría ser su lugar de residencia de ahora en adelante.
Las autoridades no han podido definir quién fue el culpable del accidente y las discusiones entre los abogados de los implicados para definir el pago de daños no terminan, lo que ha impedido la recuperación de los coches.
Mientras tanto, en un deshuesadero de Villapinzón, en Cundinamarca, una región cerca de Bogóta, se encuentran guardados los restos de los autos accidentados: un AMG GT, Porsche Boxster S, McLaren 650 S y una camioneta Toyota Land Cruiser (Toyota Prado para el mercado colombiano), reporta el diario ‘El Tiempo’ de Bogotá. A la fecha no se sabe si los coches deportivos participaban en una carrera clandestina o eran parte de una caravana que circulaba a exceso de velocidad.
Afortunadamente solo hubo daños materiales, entre los que se incluye el precio estimado de los autos involucrados, gastos de hospital de nueve heridos y afectaciones a la carretera. Todo se estima en casi 900,000 dólares. Las declaraciones de los conductores del AMG GT y del McLaren 650 S, no han permitido establecer un verdadero culpable ni el pago de los daños.
Todo apunta a que el conductor del McLaren 650 S, del que se dice era el único ejemplar que existía en Colombia, iba a exceso de velocidad 111 mph (180 km/h) e inició este choque al perder el control del auto deportivo. Como consecuencia pegó a la Toyota Land Cruiser y ésta a su vez al AMG GT, el cual era manejado por un joven de 18 años que unas horas antes acababa de recibirlo como regalo de cumpleaños.
El McLaren 650 S tiene un valor estimado de 350,000 dólares, el Mercedes AMG GT de 150,000 dólares y el Porsche Boxster S aproximadamente de 50,000 dólares. Los tres están considerados pérdida total y permanecen en un cementerio de chatarra.
Con el objetivo de esclarecer un culpable, el dueño del Mercedes AMG GT espera recuperar su auto para que el fabricante pueda recuperar datos de la computadora del vehículo y establecer que él no venía a exceso de velocidad. Por su parte el propietario del McLaren podría demandar a esta marca, ya que alega al momento que su coche se impactó no se activaron las bolsas de aire y él resultó con fractura de clavícula.