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Coronavirus

Solo la mitad de los estadounidenses se inyectaría la vacuna contra el covid-19, según una encuesta

Este número es sorprendentemente bajo, si bien se estima que más personas se pondrían la vacuna contra el covid-19, ya que la encuesta encontró que el 31% de los entrevistados simplemente no estaba seguro.
27 May 2020 – 07:17 AM EDT
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7 de cada 10 de las personas que dijeron que se vacunarían argumentan que la vida no volverá a la normalidad sin una vacuna. Crédito: LM Otero/AP

Solo alrededor de la mitad de los estadounidenses afirma que se pondría una vacuna contra el covid-19 si los científicos consiguen crear una exitosa, según revela una nueva encuesta de The Associated Press - NORC Center for Public Affairs Research.

Este número es sorprendentemente bajo, teniendo en cuenta el esfuerzo realizado en la carrera mundial por una vacuna contra la pandemia del coronavirus que ya deja más de 350,000 muertos en todo el planeta; si bien se estima que más personas se sumarían, ya que la encuesta, publicada este miércoles, encontró que el 31% de las personas consultadas simplemente no estaba seguro. Del resto 1 de 5 personas dijo que no se pondrían la vacuna.

La encuesta AP-NORC entrevistó a 1,056 adultos y se realizó del 14 al 18 de mayo. El margen de error de muestreo para todos los encuestados es más o menos 4.2 puntos porcentuales.

Los expertos en salud ya se preocupan por si las promesas de vacunas, como las que ha anunciado el propio presidente Donald Trump, no llegan a materializarse. Solo el tiempo y la ciencia lo dirán, y la nueva encuesta muestra que el público es escéptico.

"Siempre es mejor prometer menos y entregar más", dijo a la AP el doctor William Schaffner, especialista en enfermedades infecciosas del Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt.

"Lo inesperado se hace grande y por eso creo que para cualquiera de estas vacunas, vamos a necesitar una gran base de datos de seguridad para proporcionar la tranquilidad", agregó.

Temor por la seguridad

Entre los estadounidenses que dicen que no se vacunarían, 7 de cada 10 se preocupan por la seguridad.

"No soy una anti-vacunas", dijo Melanie Dries, de 56 años y natural de Colorado. Pero, "recibir una vacuna de covid-19 dentro de un año o dos... me hace temer que no se pruebe ampliamente en cuanto a los efectos secundarios".

El doctor Francis Collins, quien dirige los Institutos Nacionales de Salud (NIH), insiste en que la seguridad es la máxima prioridad. El NIH está creando un plan maestro para probar los diferentes proyectos de vacunas del covid-19 en decenas de miles de personas y garantizar que funcionen y sean seguros.

“No quisiera que la gente piense que estamos acortando el camino porque eso sería un gran error. Creo que este es un esfuerzo para tratar de lograr eficiencias, pero no para sacrificar el rigor ”, dijo Collins a AP a principios de este mes.

"Definitivamente, lo peor que podría pasar es que apresuremos una vacuna que resulta tener efectos secundarios significativos", agregó Collins.

Proteger a la familia y la comunidad

Entre los que quieren una vacuna, la encuesta AP-NORC encontró que protegerse a sí mismos, a su familia y a la comunidad son las principales razones.

"Definitivamente lo voy a hacer", dijo Brandon Grimes, de 35 años, de Austin, Texas. "Como padre que cuida a su familia, creo que... es importante que me vacune tan pronto como esté disponible para proteger mejor a mi familia".

Aproximadamente 7 de cada 10 de los que se vacunarían dicen que la vida no volverá a la normalidad sin una vacuna. Grimes, jefe de obra del negocio de construcción de su familia, viaja de casa en casa interactuando con diferentes equipos, y dijo que algunos de sus compañeros de trabajo también esperan vacunarse para minimizar el riesgo en el trabajo.

El nuevo coronavirus es más peligroso para los adultos mayores y las personas de cualquier edad que tienen problemas de salud crónicos, como diabetes o enfermedades cardíacas. La encuesta encontró que el 67% de las personas mayores de 60 años dicen que se vacunarían, en comparación con el 40% de quienes son más jóvenes.


Los recuentos de muertes sugieren que los afroamericanos y los hispanos son más vulnerables al covid-19, debido al desigual a la atención médica y otros factores. Sin embargo, la encuesta encontró que solo el 25% de los afroestadounidenses y el 37% de los hispanos recibirían una vacuna en comparación con el 56% de los blancos.

Entre las personas que no quieren una vacuna, aproximadamente 4 de cada 10 dicen dicen estar preocupadas por contagiarse del covid-19 con la vacuna. Pero la mayoría de las principales candidatas a vacunas no contienen el coronavirus en sí, lo que significa que no pueden causar infección.

Por otra parte, 3 de cada 10 que no quieren una vacuna no temen enfermarse gravemente por el coronavirus.


Independientemente de lo que muestren las estadísticas finales sobre la frecuencia con la que mata, los especialistas en salud coinciden en que el nuevo coronavirus parece bastante más mortal que la influenza y con síntomas y manifestaciones que han desconcertado a los médicos. Sin embargo, la encuesta sugiere que una vacuna contra el covid-19 no sería más popular que la vacuna anual contra la gripe.

En todo el mundo, alrededor de una docena de candidatos a la vacuna contra el covid-19 se encuentran en las primeras etapas de las pruebas o están listos para comenzar. Los investigadores británicos están abriendo uno de los estudios más grandes hasta el momento, para probar una inyección creada por la Universidad de Oxford en 10,000 personas.

A pesar de todas las promesas de la "Operación Velocidad de Avispa" de la istración Trump, solo el 20% de los estadounidenses espera que una vacuna esté disponible para el público este año, según la encuesta. La mayoría piensa que en algún momento del próximo año es más probable.


Las divisiones políticas observadas sobre cómo el país reabre la economía también se reflejan en el deseo de una vacuna. Más de la mitad de los demócratas consideran que una vacuna es necesaria para la reapertura, en comparación con aproximadamente un tercio de los republicanos.

Mientras que el 62% de los demócratas recibirían la vacuna, solo el 43% de los republicanos dicen lo mismo.

"Todavía hay una gran incertidumbre acerca de la vacuna", dijo a la AP Caitlin Oppenheimer, quien dirige la investigación de salud pública de NORC. "Hay muchas oportunidades para comunicarse con los estadounidenses sobre el valor y la seguridad de una vacuna".

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