Por qué el norovirus afecta más a los niños y otras cosas que debes saber de la "gripe estomacal" que repunta en EEUU
El norovirus, o la “gripa estomacal”, como muchos conocen a esta enfermedad que ha repuntado en las últimas semanas, es responsable de casi un millón de visitas médicas de urgencias pediátricas al año.
De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU (CDC, por sus siglas en inglés), entre los pacientes más afectados por este virus estomacal están los niños.
Las autoridades de salud dicen que, entre las personas con más probabilidades de acudir a urgencias que personas de otras edades, están los menores de 5 años.
Según las estadísticas de los CDC, 1 de cada 110,000 niños en ese rango de edad muere a causa del norovirus anualmente y uno de cada 160 necesitará ser hospitalizado tras contraer esta infección.
Además, los CDC reportan 2,270,000 consultas ambulatorias al año por infecciones de norovirus, sobre todo en niños pequeños.
El brote de norovirus repuntó el mes pasado y se espera que siga aumentando. De acuerdo con cifras semanales de los centros, de 1940 personas a las que se realizó un test en diciembre de 2024 para saber si estaban enfermos de norovirus, el 22.28% dio positivo.
Te contamos por qué esta enfermedad estomacal está afectando a los más pequeños de las familias.
¿Qué es el norovirus?
El norovirus es un virus muy contagioso que provoca vómitos y diarrea, alertan los CDC.
A veces se le llama “gripe estomacal” o “virus del estómago”. Sin embargo, la enfermedad por norovirus no está relacionada con la gripe. La gripe está causada por el virus de la influenza.
El norovirus causa gastroenteritis aguda, una inflamación del estómago o los intestinos.
La mayoría de las personas enfermas por norovirus mejoran en un plazo de uno a tres días, pero pueden seguir propagando el virus unos días después.
“La mayoría de las personas se recupera completamente sin tratamiento. Sin embargo, en el caso de algunas personas, especialmente niños pequeños, los vómitos y la diarrea pueden causar una deshidratación grave y requerir atención médica”, dice la Clínica Mayo.
¿Por qué el norovirus afecta más a los niños?
Aunque cualquiera puede infectarse y enfermar de norovirus cuando hay un brote, como por el que ahora pasa EEUU, los niños menores de cinco años y las personas con sistemas inmunitarios debilitados tienen más probabilidades de desarrollar infecciones graves, dicen los CDC.
Además, la infección por norovirus se produce con mayor frecuencia en entornos cerrados donde hay mucha gente. Algunos ejemplos son hospitales, guarderías, escuelas y cruceros.
Otro de los factores por las que los niños pequeños se contagian más frecuentemente de norovirus es porque interactúan constantemente con superficies que pueden estar infectadas con el virus y después se llevan las manos a la boca.
“Los niños lo tocan todo y tienden a llevarse las manos a la boca con más frecuencia que los adultos, lo que aumenta el riesgo de infección”, dijo Lisa Cooper, microbióloga de la Universidad de California al sitio Times Now.
Los contagios también se dan por comer o beber alimentos contaminados por norovirus, ya sea que se transfiera durante la preparación o a través de un vaso o utensilio compartido, dicen los CDC.
¿A qué debes estar atento si tu hijo enferma de norovirus?
En la mayoría de los casos, la infección por norovirus suele desaparecer en pocos días y no es mortal.
Sin embargo, en el caso de algunas personas, especialmente en niños pequeños, la infección por norovirus puede ser grave. El norovirus puede provocar deshidratación grave e, incluso, la muerte.
Las señales de alerta de deshidratación son las siguientes:
- Fatiga
- Sequedad en la boca y en la garganta
- Languidez
- Mareos
- Menor producción de orina
“Es posible que los niños que están deshidratados lloren con pocas lágrimas o sin ellas. Podrían estar inusualmente somnolientos o inquietos”, indica la Clínica Mayo.
¿Cómo prevenir contagios de norovirus ahora que los niños regresan a las escuelas?
La principal indicación de los CDC para prevenir el contagio de norovirus se centra en el correcto lavado de manos.
Hasta el 80% de las enfermedades infecciosas se transmiten por o. En las aulas hay innumerables superficies que se tocan mucho, como interruptores de la luz, mesas, material compartido, puertas, equipamiento deportivo y juguetes.
Lavarse las manos correctamente puede prevenir alrededor del 30% de las enfermedades diarreicas y alrededor del 20% de las infecciones respiratorias, como los resfriados y la gripe. Los CDC también informan de que lavarse bien las manos reduce el absentismo por enfermedades gastrointestinales hasta en un 57%.
Cooper destaca la importancia de la higiene de las manos. “Enseña a tus hijos a lavarse las manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos, sobre todo después de ir al baño y antes de comer”, dice.
Dado que el virus se transmite principalmente a través de partículas de heces invisibles a simple vista, es fácil contagiar y contraer la enfermedad sin saberlo si, por ejemplo, no te lavas bien las manos después de ir al baño o cambiar el pañal a un bebé, explica a FortuneWell el doctor Georges Benjamin, director ejecutivo de la Asociación Americana de Salud Pública.
Los desinfectantes de manos a base de alcohol son menos eficaces contra el norovirus, por lo que el agua y el jabón son cruciales, dice Cooper.
Además, la forma más importante de reducir la propagación de gérmenes y virus en la escuela es seguir el principio de mantener a los niños en casa cuando están enfermos, dicen los CDC, la Clínica Mayo y pediatras expertos.
“Cuando los niños enfermos van al colegio, no solo contagian a otros alumnos, sino también a los profesores y al personal. Cuando los profesores enferman, esto afecta al aprendizaje de los alumnos y cuesta a EEUU miles de millones de dólares al año”, dice Libby Richards profesora de enfermería de la Universidad de Purdue en un artículo de The Conversation.
Cada año, las enfermedades por norovirus transmitidas cuestan en Estados Unidos unos 2,000 millones de dólares, principalmente debido a la pérdida de productividad y a los gastos sanitarios, dicen los CDC.
Mira también: