Trump agita el miedo a los inmigrantes en Europa y se enorgullece de su dura política de 'tolerancia cero'

Donald Trump intentó este jueves agitar el miedo a la inmigración, una estrategia que utilizó durante su campaña electoral, en el mismo corazón de Europa, donde en los últimos años se ha producido el ascenso de partidos de corte racista ante la llegada de refugiados y migrantes de África y Asia.
El presidente llegó a advertir a la Unión Europea (UE) que debe estar atenta a la inmigración porque este fenómeno, según sugirió, podría afectar negativamente al Viejo Continente.
"La UE debe prestar mucha atención, porque la inmigración está tomando el control de Europa y deberían prestar atención", sostuvo el mandatario en una rueda de prensa improvisada tras la cumbre de la OTAN en Bruselas.
Trump se lanzó a la campaña electoral para las presidenciales de 2016 política de 'tolerancia cero', se han separado a niños y padres en la frontera, un hecho que despertó una gran indignación en el país.
El mandatario estadounidense aludió a la cuestión migratoria cuando le preguntaron por la visita que inicia este jueves al Reino Unido y para la que numerosos británicos han preparado protestas en su contra.
"Está bien", indicó sobre sobre las manifestaciones, aunque las minimizó afirmando que "les gusto mucho en el Reino Unido, creo que están de acuerdo conmigo en inmigración".
El presidente además se mostró orgulloso de su política agresiva contra los inmigrantes. "La inmigración es uno de mis puntos fuertes", subrayó, e indicó que "probablemente, al menos parcialmente, gané las elecciones por la inmigración".
Trump justificó su advertencia a los países europeos con "lo que pasa en Italia: Giuseppe (Conte, el primer ministro de ese país) ganó sus elecciones por una fuerte política migratoria".
Conte, el jefe del Gobierno italiano, no se presentó a los comicios, sino que fue propuesto por los líderes del Movimiento Cinco Estrellas y la Liga Norte. El nuevo gobierno italiano se ha convertido en uno de los más antimigratorias de la Unión Europea, sobre todo tras negar la entrada a sus costas de los buques que rescatan inmigrantes de las aguas del Mediterráneo.
El ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, ha repetido en numerosas ocasiones durante las últimas semanas que no van a dejar que entren refugiados en el país. "Salvar vidas es un deber, convertir a Italia en un gran campo de refugiados, no. Italia ha dejado de agachar la cabeza y obedecer, esta vez HAY ALGUIEN QUE DICE NO", escribió Salvini en su cuenta de Twitter recientemente. Además, incluyó el hashtag #chiudiamoiporti ("cerremoslospuertos).