1- Trump y las presiones
David Holmes, diplomático de EEUU en Ucrania, reforzó el testimonio dado ayer por el embajador Sondland: que hubo presiones a Ucrania planeadas por el presidente Trump, no solo para otorgar la reunión en la Casa Blanca que su par ucraniano buscaba sino en la retención de la ayuda militar a ese país para defenderse de Rusia. "(Después de muchos intercambios) Mi clara impresión fue que la retención de asistencia de seguridad (a Ucrania) probablemente fue pensada por el presidente (Trump) como expresión de insatisfacción porque los ucranianos aún no habían aceptado lo de la investigación de Burisma / Biden o como esfuerzo para aumentar la presión para que lo hagan".
2- Desechan la teoría conspirativa de que Ucrania intervino en las elecciones de EEUU y no Rusia
Fiona Hill, experta en Rusia del Consejo Nacional de Seguridad, nuevamente descartó de lleno la teoría conspirativa de que Ucrania y no Rusia interfirieron en la elección de EEUU en 2016. Esto es algo que algunos republicanos deslizan y que el propio Trump pidió al presidente de Ucrania que investigue: "Está fuera de discusión. (...) El impacto de la exitosa campaña rusa de 2016 sigue siendo evidente hoy. Nuestra nación está siendo destrozada. La verdad es cuestionada. Nuestro servicio extranjero altamente profesional está siendo socavado. El apoyo de EEUU a Ucrania, que continúa bajo la agresión armada rusa, ha sido politizado. El objetivo (de Rusia) es debilitar a nuestro país y disminuir el papel global de EEUU".
3- Alarma por el 'inapropiado' rol de Giuliani (abogado de Trump) en cuestiones de política exterior de EEUU
Ambos dijeron que se habían "alarmado" por el nivel de participación que Giuliani, un abogado personal de Trump y no funcionario diplomático, estaba teniendo en la agenda estadounidense en Ucrania. "Me di cuenta de que el Sr. Giuliani, un abogado privado, desempeñaba un papel directo en la diplomacia ucraniana (...) se hizo evidente que Giuliani estaba teniendo una influencia directa en la agenda de política exterior que se estaba ejecutando en Ucrania", dijo Holmes.
"Los demócratas solo necesitaban un pretexto cuando su dossier ruso y sus investigaciones fallaron se movieron al plan b: la farsa ucraniana", dijo Devin Nunes al cierre de la audiencia en la que testificaron Fiona Hill y David Holmes.
Peter Welch, demócrata por Vermont, hizo un monólogo en el que explicó por qué es importante la investigación de 'impeachment' sobre las acciones del presidente Trump, en contra de lo que los republicanos dicen.
Welch señaló que Trump "como nunca antes" lo hizo "otro presidente" usó la Oficina Oval para su "pequeño" interés político personal.
La conducta de Trump "no puede ser la nueva normalidad" en los presidentes de Estados Unidos, cerró.
Eric Swalwell, congresista demócrata por California, trae a la audiencia en la que declaran Holmes y Hill un reporte explosivo de The Daily Beast: Lev Parnas, un asociado de Rudy Giuliani que fue detenido y acusado por la justicia, ayudó a organizar reuniones y llamadas en Europa para el republicano de mayor rango del Comité de Inteligencia, Devin Nunes.
El reporte dice que durante 2018, el asistente de Nunes, Derek Harvey, participó en las reuniones, que se organizaron para ayudar al trabajo de investigación de Nunes. Toda la información del The Daily Beast fue dada por el abogado de Parnas, Ed MacMahon, quien no especificó qué implicaban esas investigaciones del republicano.
Lev Parnas es asociado de Igor Fruman, dos empresarios de bienes raíces de origen ucraniano y bielorruso. Ambos son a su vez asociados del abogado personal de Trump, Rudolph Giuliani, en el centro de la investigación de 'impeachment'.
Parnas y Fruman fueron detenidos semanas atrás en un aeropuerto en Washington DC, cuando se disponían a viajar a Europa, según reportes, sin boleto de retorno. La acusación dice que armaron una conspiración para donar de manera ilegal cientos de miles de dólares a las campañas de congresistas y políticos estadounidenses en las elecciones de 2018. A cambio buscaban recibir influencia para funcionarios del gobierno de Ucrania y lucrativos contratos para los aliados del presidente Trump.
Ahora, según el propio abogado de uno de los dos acusados de violar las leyes de campaña de EEUU, se conoce el dato de que Nunes, principal republicano en el comité que maneja las audiencias de juicio político, está relacionado con Parnas, nombre que ha surgido repetidamente en el 'impeachment'.
"Los registros del Congreso muestran que Nunes viajó a Europa del 30 de noviembre al 3 de diciembre de 2018. Tres de sus ayudantes, Harvey, Scott Glabe y George Pappas, viajaron con él, según los registros", dice The Daily Beast y añade que ese viaje costó más de $ 63,000 con fondos del gobierno de EEUU.
El viaje se produjo cuando Nunes, en su papel en el comité de inteligencia, estaba trabajando para investigar los orígenes de la investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la intromisión en las elecciones de EEUU.
Esto deja, en pocas palabras, al principal republicano del comité vinculado con un hombre acusado de vulnerar leyes de campaña de EEUU, asociado a Giuliani quien, según reportes, también está siendo investigado entre otras cosas por violar leyes estadounidenses de campañas y por actuar como presunto lobista para un gobierno extranjero no registrado.
Durante la tarde, representantes republicanos como Chris Stewart y y Brad Wenstrup utilizaron sus minutos en la audiencia prácticamente sin hacer preguntas a David Holmes o Fiona Hill. Más bien han usado su tiempo para arremeter contra la investigación de juicio político liderada por sus colegas demócratas.
"(Ha habido) cero evidencia de que hubo coimas, cero evidencia de que hubo extorsión, cero evidencia de que hubo un quid pro quo, y aún así es inevitable un juicio político y, ¿por qué? Porque los líderes de este comité han sido injustos", dijo por ejemplo el representante Stewart.
Fiona Hill, sobre su relación con Gordon Sondland, el embajador ante la Unión Europea, describe un tema complicado y fundamental en esta investigación: la búsqueda del presidente Trump y sus aliados de algo que tiene que ver con la política interna de EEUU a expensas de la política exterior de EEUU.
Hill dijo que el embajador ante la Unión Europea, Gordon Sondland, y otros funcionarios de Trump estaban llevando a cabo un "recado político interno" al presionar por investigaciones que podrían ayudar políticamente al presidente Trump.
Ella era una de las principales expertas de Rusia en el Consejo de Seguridad Nacional hasta que renunció a su cargo.
El republicano Jim Jordan vuelve a ser uno de los más histriónicos en su defensa del presidente Trump.
Desde interrumpir a los testigos, hasta gritarles, como lo hizo en el caso de su interacción con el testigo Holmes.
Adam Schiff, presidente del llamó la atención después de la última interrupción al testigo.
"Sr. Jordan, puede que no le guste la respuesta del testigo, pero ya la escucharemos".
La respuesta de Holmes fue:
"(Tras escuchar la llamada de Ucrania) Todos estaban asintiendo. ¡Por supuesto, eso es lo que está pasando. Por supuesto, el presidente está presionando para una investigación de Biden antes de hacer esas cosas que los ucranianos quieren. Hubo un asentimiento ... Todos en ese momento acordaron que era obvio lo que el presidente estaba pidiendo!", dijo tras escuchar la llamada
Uno de los tantos tuits sobre este momento fue del exfiscal de Nueva York, quien comentó en Twiter: "Nunca promoví a un abogado que gritara a testigos, hostiles o no. Con copia a: Jim Jordan".
"No era algo nuevo para él (para el embajador Bill Taylor), que el presidente estaba presionando para una investigación a Biden (...) Cuando regresé (de vacaciones) dejé saber sobre la llamada y todos estaban asintiendo. Por supuesto que el presidente está presionando por una investigación a Biden", dijo David Holmes al ser cuestionado por el representante Jim Jordan sobre la llamada que dijo haber escuchado entre el embajador Gordon Sondland y el presidente Donald Trump.
"¿Fui por cada palabra de la llamada? No, porque todos en ese punto coincidían en que era obvio por lo que estaba presionando el presidente", dijo sobre el momento en que dejó saber al embajador Taylor sobre la conversación telefónica entre Sondland y Trump.
El abogado de los republicanos deslizó que cuando Trump le dijo al embajador ante la Unión Europea, Gordon Sondland, "habla con Rudy", pudo haber sido una "sugerencia" y no una orden.
Fiona Hill refuta eso indirectamente al decir que Sondland no quería reunirse con "Rudy".
Hill, además, habla de cómo las conversaciones sobre los intereses estadounidenses en Ucrania "divergieron" en junio.
Se trata de un punto más temprano en la línea de tiempo para señalar cuándo realmente comenzó la campaña de presión de Giuliani.
"Lo que me molestaba (de Gordon Sondland) es que no estaba coordinando con nosotros, y al escuchar su deposición supe que él estaba completamente correcto, no estaba coordinando con nosotros porque no estábamos haciendo lo mismo que él. Así que me irritaba que no nos estaba contando sobre todas las reuniones que estaba teniendo", dijo Hill al contar los roces que tuvo con el embajador poco antes de que ella dejara su cargo en julio.
"Le dije embajador Sondland creo que esto va a explotar y aquí estamos", acotó.
El republicano de mayor rango del comité, Devin Nunes, le preguntó a Fiona Hill sobre el dossier de Christopher Steele, un documento que está relacionado al 'Rusiagate' y, al menos hasta ahora, no tiene mucho que ver con el caso de Ucrania.
"Quiero tener algunos datos básicos sobre la mesa de las personas que participaron en las elecciones de 2016 para ver a quién conoce y con quién se ha reunido", justificó Nunes.
Se trata de la misma estrategia que ha usado Nunes hasta ahora para tratar de establecer una teoría de la conspiración sobre la que Hill, así como toda la comunidad de inteligencia de Estados Unidos, ya advirtieron que es mentira: que los ucranianos y el Partido Demócrata (DNC) coludieron para manipular las elecciones de 2016.
Nunes trató de presionar a Hill y Holmes y se econtró con respuestas del estilo "no soy experto en ese tema".
Una firma de nombre Fusion GPS fue contratada en 2016 por personal de la campaña de Hillary Clinton y del Comité Nacional Demócrata para investigar el pasado de Trump. Según informes, antes de los os de los demócratas, Fusion GPS había indagado en información del Trump cuando era candidato republicano a pedido de la web conservadora The Washington Free Beacon que no quería que él fuera el candidato de su partido.
La firma entonces contrató a Christopher Steele, un exespía de los servicios de inteligencia británicos, para recopilar información para los demócratas sobre cualquier vínculo entre funcionarios del Kremlin y el círculo de confianza de Trump.
Con la información dada por Steele, la empresa armó el famoso dossier que señalaba que la campaña de Trump coordinaba con el Kremlin, una información que aparentemente no fue verificada, aunque desde la firma sostienen que el FBI sí corroboró datos del documento. (El dossier son varios memorandos basados en conversaciones de Steele con fuentes rusas escritos entre junio y octubre de 2016).
De este modo, Fusion GPS se volvió objeto de escrutinio en la investigación tanto del fiscal especial Robert Mueller como la de los cuatro comités que investigan varias líneas, entre ellas, si hubo o no colusión entre los rusos y la campaña de Trump. Los republicanos se cuestionan si el dossier fue la chispa que encendió la investigación del FBI sobre el 'Rusiagate'.
Pero esa chispa, sin embargo, se señala como una conversación que el asesor de campaña de Trump, George Papadopoulos, que terminó confiándole exministro de Relaciones Exteriores australiano, Alexander Downer, que Rusia tenía información “sucia” que podía dañar políticamente a Hillary Clinton.
Esta nota de archivo habla sobre ese tema:
"Estaba muy claro en este punto que había un canal diferente en las operaciones y relaciones con Ucrania: uno que era doméstico y político en su naturaleza, que era muy diferente del canal en el que estábamos mis colegas y yo, en el que nos enfocábamos en las relaciones bilaterales y la política exterior de Estados Unidos respecto con Ucrania", dijo Fiona Hill al esbozar dos preocupaciones que tuvo poco antes de dejar su puesto en julio pasado. "Esas dos cosas se habían desviado", agregó.
La otra preocupación de la exdirectora para Europa y Rusia del Consejo de Seguridad Nacional era la manera en la que la exembajadora en Ucrania Marie Yovanovitch salió de su puesto. "Me preocuparon las circunstancias en las que se dañó su reputación", afirmó.
La exdirectora para Europa y Rusia del Consejo de Seguridad Nacional. Fiona Hill, y el asesor de política en la embajada de Estados Unidos en Kiev, David Holmes, serán interrogados ahora por el abogado de los representantes republicanos.
Consultada por un periodista sobre si los demócratas en la Cámara de Representantes consideran que se debe llamar a más testigos, Nancy Pelosi deslizó que ello podría darse.
"No hemos terminado aún, el día no ha terminado, y nunca sabes si el testimonio de una persona puede llevar a que se requiera el testimonio de otra", dijo la presidenta de la Cámara Baja de acuerdo con CNN.