¿Quién salta el muro de Trump? Un concurso internacional de escaladores desafía la supuesta invulnerabilidad de la barrera fronteriza
Trump estampa su firma en lo que llamó la "versión Rolls Royce" del muro fronterizo en California (fotos)
Más de un vez el presidente Donald Trump ha presumiendo del muro que quiere levantar en la frontera sur, que según él no podrán trepar ni los escaladores más experimentados.
Hace menos de un mes, en una visita al área de Otay Mesa en San Diego, California, el presidente 'autografió' un modelo de la obra estampando su firma en una de las fachadas del muro, al que calificó como un "sistema de seguridad de clase mundial" que será prácticamente " impenetrable".
Pero, ¿es cierto que el muro, la aún promesa electoral de Trump, es tan inexpugnable como él afirma?
La duda es la que un grupo de escaladores de varios países busca despejar este fin de semana cuando intenten saltar una réplica de la barrera fronteriza en una competencia que se celebrará en Kentucky.
Para Rick Weber, un instructor de la Asociación Estadounidense de Guías de Montaña de 75 años de edad y organizador de la actividad, las palabras de Trump y la seguridad con la que se jacta de su muro son un auténtico desafío.
"El presidente se ha jactado de que será imposible escalar, penetrar o pasar por encima de su muro. Y es lo que no debe decirle alguien a un escalador. Nada es imposible cuando existe la determinación de hacerlo", dijo citado por la agencia de noticias española EFE.
"Esto será mucho más grande de lo que esperábamos", auguró Weber por teléfono, desde la garganta del río Red en el este de Kentucky.
Y la duda sobre el muro es tanto mayor porque nadie dentro de la comunidad de escaladores de Estados Unidos conoce a los supuestos veinte expertos aludidos por Trump que se propusieron saltar su muro y fracasaron en el intento.
"Nadie en nuestra comunidad de escaladores sabe quiénes son esos montañistas", afirmó Weber.
Una niña de 8 años ya lo cruzó "sin demasiados problemas"
La competición se celebrará durante el Rocktoberfest, un festival anual que acoge una de las congregaciones más grandes de escaladores y montañistas del país.
Weber, que es ingeniero jubilado, es el artífice de la réplica del "muro de Trump" que tendrán que saltar los escaladores. La estructura consiste en columnas de casi 27 pies (7 metros) de altura y placas metálicas en lo alto.
Habrá tres categorías: en una, los escaladores podrán usar cuerda y escalera; en la segunda solo usarán cuerdas y en la tercera y más difícil intentarán la escalada libre.
El experto explicó que el espacio que hay entre las columnas permite lanzar cuerdas que pasan al "lado mexicano" y se usar para trepar.
De hecho, la réplica ya ha sido probada por varios escaladores, entre ellos la niña Lucy Hancock, de 8 años: "Una chica muy atlética que pasó por encima sin demasiado problema", subrayó el organizador.
Además, agregó, "un hombre lo hizo en escalada libre, sin cuerda y sin equipos, y pasó sobre la valla en unos 30 segundos".
Trump quiere levantar el muro fronterizo a toda costa antes de las elecciones de 2020. Para ello ha ordenado a sus ayudantes acelerar la entrega de 3,600 millones de dólares en contratos de construcción, tomar tierras privadas por las que podría correr la pared, e inclusive pasar por alto regulaciones ambientales, si es preciso con tal de tener esa pared antes de la justa electoral.
La barrera fronteriza tendría una expansión de 174 millas y cruzaría territorios de Texas, Nuevo México y Arizona.
El presidente inclusive ha planteado que se pinte de negro —para que absorba el calor y lo haga caliente al tacto— y tenga puntas afiladas.
Weber, para quien "el muro es una monstruosidad en la que se va a gastar una cantidad enorme de dinero", aclara que la competición de escalada no es una invitación a que la gente salte ilegalmente la frontera.
"Es una solución del siglo XIV para un problema del siglo XXI. Trump no entiende que nada que pueda detener a una persona resuelta" a cruzar, dice el montañista.