La fiesta se acabó para los oligarcas rusos, pero ¿funcionarán las sanciones?
Las sanciones impuestas por EEUU y sus aliados a Rusia por la invasión de Ucrania pareció sorprender a algunos de los que eran su objetivo.
Algunos de los oligarcas rusos sancionados tardaron en sacar sus superyates de los puertos europeos y se vieron doblemente sorprendidos al comprobar que sus tarjetas de débito ya no funcionaban, viéndose obligados a depender del dinero en efectivo que podían tener en sus cajas fuertes.
Cuando se preparaba para zarpar, las autoridades sas incautaron un superyate de 600 millones de dólares, el Amore Vero ("Amor verdadero"), propiedad de Igor Sechin, jefe de la empresa energética estatal rusa Rosneft.
En Italia, la policía incautó villas y yates valorados en 143 millones de euros (156 millones de dólares) de cinco rusos de alto perfil, según informó
el sábado el gobierno. Las propiedades están en Cerdeña, el lago de Como y en la Toscana, unas de las zonas más exclusivas del país, mientras que los yates fueron asegurados en puertos del norte.
En España, un mecánico ucraniano itió ante el tribunal la semana pasada haber intentado hundir un superyate, llamado Lady Anastasia, en la isla de Mallorca, perteneciente a un exportador de armas ruso.
Los líderes occidentales esperan que al cortar la economía rusa del sistema financiero mundial, puedan crear dolor económico para el presidente ruso, Vladimir Putin, mientras que también despojan a los oligarcas de sus activos transatlánticos en los paraísos de los ricos, desde la Costa del Sol y la Riviera sa a Miami.
"Hoy, Rusia parece estar al borde de un colapso económico sin parangón en su historia posterior a la Segunda Guerra Mundial", dijo Maximilian Hess, consultor de riesgo político con sede en Londres y miembro del Instituto de Investigación de Política Exterior.
"La decisión de Estados Unidos y la Union Europea de sancionar al banco central ruso ha cortado la médula espinal de la economía del país. Rusia está a punto de incumplir sus deudas... su moneda se desploma aún más, y ahora es posible que la calidad de vida de la mayoría de sus residentes caiga hasta los estándares iraníes o incluso venezolanos en un futuro próximo", añadió.
Sin embargo, se cuestiona la eficacia de las sanciones para obligar a Putin a dar marcha atrás y retirar sus fuerzas de Ucrania. Los regímenes proscritos de Irán y Venezuela -así como Cuba y Corea del Norte- se han visto afectados por sanciones devastadoras, pero siguen en el poder, más de 50 años después en el caso de Cuba.
Putin ha pasado los últimos años preparándose para las sanciones, construyendo un cofre de guerra de reservas extranjeras en el Banco Central de 600,000 millones de dólares en bonos, oro y dinero en efectivo, que algunos han bautizado como "la fortaleza de Rusia".
Pero Rusia es especialmente vulnerable a las sanciones debido a su dependencia de sus exportaciones de petróleo y gas. Al menos en un principio, Estados Unidos y Europa se han mostrado recelosos de sancionar al sector del petróleo y el gas de Rusia por el efecto que tendría en los precios mundiales de la energía, especialmente en Europa, que depende de Rusia para el 40% de sus necesidades energéticas.
De hecho, los expertos afirman que parte del daño de las sanciones acabará sintiéndose en casa, en Estados Unidos y Europa, donde la inflación, más preferible que una guerra nuclear en toda regla.
Rusia y Ucrania y los principales productos de granos, mientras que algunos de los oligarcas están fuertemente invertidos en metales, como el aluminio. Ucrania y Rusia representan el 60% de la producción mundial de aceite de girasol y el 30% de las exportaciones mundiales de trigo, según los expertos en materias primas.
"El estallido de una guerra económica en toda regla entre Rusia y Occidente significa que la agitación en los mercados de la agricultura, los metales y los hidrocarburos ha llegado para quedarse", dijo Hess. "Sin embargo, dada la agresión unilateral del Kremlin, no hay alternativa", añadió.
Estados Unidos y Europa persiguen a los "cleptócratas" rusos
El Departamento de Justicia de Estados Unidos anunció esta semana la creación de un grupo de trabajo de "cleptócratas" para investigar y perseguir a los oligarcas rusos que intenten evadir las sanciones. El Reino Unido y Francia también dijeron que habían creado un grupo de trabajo sobre oligarcas para coordinar sus sanciones, con la elaboración de una lista de propiedades de los ultrarricos rusos que incluye cuentas bancarias, coches de lujo, yates y casas de vacaciones en la costa mediterránea.
Durante décadas, los oligarcas rusos han acudido a las principales ciudades del mundo, adquiriendo lujosas mansiones, enviando a sus hijos a escuelas privadas de élite y aparcando su dinero en centros financieros mundiales, fuera del alcance de las autoridades fiscales, así como de Putin.
Esto podría tener un impacto en los bancos de los principales centros financieros como Nueva York, Londres y Suiza, así como en los centros turísticos de invierno y verano, desde Colorado hasta el Mediterráneo.
En 2017, economistas estadounidenses y ses de la Oficina Nacional de Investigación Económica estimaron que la élite rusa tenía aproximadamente 800,000 millones de dólares en cuentas en el extranjero.
Transparencia Internacional del Reino Unido, un grupo que hace campaña contra la corrupción, dice que se han comprado propiedades en Gran Bretaña por valor de 2,000 millones de dólares en solo los últimos cinco años por parte de rusos acusados de corrupción o con vínculos con el Kremlin.
La semana pasada, el Reino Unido cerró su programa de visados para inversores, que había resultado muy popular entre los rusos ricos como forma de obtener la residencia en el país. Un programa similar de la UE ha expedido 431 visados a ciudadanos rusos.
Otros cientos de visados de inversor EB-5 se han concedido a rusos en Estados Unidos, a cambio de invertir al menos 500,000 dólares en las denominadas áreas de empleo específicas.
Rusos ricos enamorados del sur de Florida
El sur de Florida también ha sido durante mucho tiempo popular entre los rusos, incluidos los del crimen organizado, con apartamentos en Miami Beach anunciados en la revista de a bordo de Aeroflot. Un mafioso ucraniano, Ludwig Feinberg, conocido como 'Tarzán', intentó en una ocasión vender un submarino de la era soviética a narcotraficantes colombianos por 35 millones de dólares en un acuerdo negociado en un club de striptease llamado Porky's junto al aeropuerto internacional de Miami.
Entre los propietarios se encuentra Dmitry Rybolovlev, un multimillonario productor ruso de fertilizantes de potasa y propietario mayoritario del club de fútbol Mónaco, que en 2008 compró a Donald Trump una mansión en Palm Beach por 60 millones de dólares más de lo que pedía unos años antes.
Rybolovlev y su hija también son propietarios de un apartamento de 10 habitaciones junto a Central Park en Nueva York adquirido en 2011 por 88 millones de dólares, una casa en Hawái y una isla en Grecia.
En 2017, una revisión de Reuters encontró que al menos 63 personas con pasaportes o direcciones rusas habían comprado al menos 98,4 millones de dólares en propiedades en siete torres de lujo de la marca Trump en el sur de Florida. Encontró que al menos 703 de los propietarios de las 2,044 unidades en los siete edificios de Trump, o alrededor de un tercio, eran compañías de responsabilidad limitada, o LLC, que pueden enmascarar las identidades de los verdaderos propietarios de las propiedades.
La Costa del Sol se convirtió en el patio de recreo favorito de los rusos ricos
Para relajarse, los rusos también han acudido en masa en los últimos años al sur de España. En la historia no tan alejada de la vida real de La Reina del Sur, la narcotraficante mexicana Teresa Mendoza se asocia con un mafioso ruso, Oleg Yosokov, en Málaga, en la Costa del Sol del sur de España.
La Costa del Crimen, como también se la conoce, se ha convertido en el lugar favorito de los rusos, que pueden salir de sus yates en Puerto Banús, al este de Marbella, directamente a la última discoteca de moda.
Según el Instituto Nacional de Estadística de España, el año pasado se registraron 7,379 rusos en la provincia de Málaga, de los cuales unos 2,800 vivían en Marbella, según la web de noticias Sur.
Los superyates y jets privados de la élite rusa, han atraído el escrutinio público a raíz de la invasión del país a Ucrania la semana pasada.
España alberga varios otros yates rusos, entre ellos el Solaris, de 461 pies de eslora, propiedad de Roman Abramovich, el dueño del Chelsea FC, que se terminó de construir el año pasado con un coste estimado de 600 millones de dólares, según el sitio web Superyacht Fan. Abramovich anunció esta semana que abandona la propiedad del Chelsea, actual campeón de la UEFA.
Según Reuters, al menos cinco superyates de multimillonarios rusos se encuentran anclados o navegando por las Maldivas, en el Océano Índico, beneficiándose de que en esta nación no existe un tratado de extradición con los Estados Unidos.
Estados Unidos sanciona a una serie de oligarcas rusos
Dmitry Peskov, secretario de prensa de Putin, se encuentra entre los supuestos "compinches" de éste a los que la Casa Blanca ha impuesto la última ronda de sanciones el jueves.
Peskov, de 54 años, se unió a una lista de ocho oligarcas y casi dos docenas de sus familiares y asociados cuyos activos en Estados Unidos serán congelados. Otros 19 oligarcas -entre ellos Alisher Burhanovich, aliado de Putin- y 47 de sus familiares se enfrentan a restricciones de visado en Estados Unidos.
El Reino Unido ha anunciado sanciones contra otros dos oligarcas rusos: Alisher Usmanov e Igor Shuvalov, tras la invasión rusa de Ucrania.
Shuvalov fue viceprimer ministro de Putin y actualmente es presidente de un banco y posee dos apartamentos de lujo en el centro de Londres por un valor estimado de 15 millones de dólares, según el gobierno británico.
Usmanov fundó la empresa USM Holding, un grupo de inversión que posee proveedores de hierro, acero y cobre y una empresa de telecomunicaciones. La empresa de Usmanov, USM, también tenía lazos de patrocinio con el club de fútbol británico Everton, que se rompieron esta semana.
Usmanov es propietario de una casa en un barrio acomodado de Londres, con un valor estimado de 64 millones de dólares, y de una finca del siglo XVI en el campo, a las afueras de Londres, que fue propiedad del magnate petrolero estadounidense John Paul Getty, el hombre más rico del mundo en su época.
Sin embargo, las listas negras de personas sólo pueden llegar hasta cierto punto debido al turbio mundo de las finanzas en paraísos fiscales.
Como han puesto de manifiesto las tres recientes filtraciones de documentos bancarios en paraísos fiscales -los Papeles de Pandora-, los expertos financieros afirman que los gobiernos tendrán que adoptar medidas más duras para hacer frente a las prácticas bancarias opacas, como los "fideicomisos ciegos" que los oligarcas utilizan para ocultar sus activos.
"Las acciones para sancionar a los asociados con el régimen ruso han llevado a los responsables políticos a una dura constatación: las normas y regulaciones existentes son totalmente inadecuadas para abordar las amenazas de la riqueza anónima", según la Red de Justicia Fiscal, que aboga por reformas para evitar que los súper ricos y los gigantes corporativos evadan impuestos.
Un Índice de Secreto Financiero publicado por la Red de Justicia Fiscal, situaba a las Islas Caimán como el lugar que ofrece más secreto financiero, seguido de Estados Unidos, Suiza y Hong Kong.
Hess, que vive en Londres, está de acuerdo en que las sanciones son necesarias para frenar a Putin. Pero advierte que las sanciones económicas derivadas de la invasión de Ucrania, también podrían conducir a un conflicto económico más amplio si no van acompañadas de mayores esfuerzos diplomáticos.
Eso incluye el impago a los prestamistas extranjeros, así como el corte de petróleo, gas y fertilizantes.
"Los rusos han dejado muy claro que planean tomar represalias económicas. Han estado construyendo sus propias herramientas geoeconómicas", dijo.