“Los días difíciles vienen ahora”: España se ve en el espejo de Italia a una semana de encierro
MADRID, España.— Las calles de Madrid, normalmente un hervidero de trabajadores, turistas y obreros, lucen desoladas en lugares impensables como la Puerta del Sol, la plaza de Callao, Plaza España o el paseo de Recoletos —donde están el Museo del Prado y muy cerca, el Reina Sofía y Thyssen Bornemisza—, mientras el metro de la ciudad ha informado que la afluencia de pasajeros ha disminuido hasta 80%. La circulación en las carreteras españolas ha disminuido 65 por ciento y los traslados hacia las ciudades como Madrid y Barcelona han disminuido hasta 70%, según el Ministerio del Interior.
A una semana de que el recién instalado gobierno español declaró el estado de alarma para gestionar la crisis generada por el coronavirus y con un total de 1,350 fallecidos hasta este 21 de marzo, España no puede evitar mirarse en el espejo de una Italia desbordada, que este viernes sumó 4,032 muertos, más víctimas que la provincia de Wuhan, donde se originó la pandemia.
Integrantes de la diversa familia europea, son una separación de 1,400 kilómetros y poblaciones relativamente parecidas —España tiene casi 47 millones de habitantes e Italia 60 millones—, las estadísticas de España relacionadas al coronavirus parecen estar recorriendo el vertiginoso camino de Italia, donde hace menos de un mes se contaban 7 fallecidos y 276 contagiados, según el reporte oficial de ese país el 25 de febrero.
Para esa fecha, el coronavirus en España apenas calentaba los titulares con dos diagnosticados en Tenerife y uno en Barcelona y la advertencia de la Organización Mundial de la Salud de que el virus tenía el potencial de convertirse en una “eventual pandemia”.
Desde entonces ambos países parecen estar marcados por ritmos apenas diferentes, pero con un crecimiento exponencial tanto de contagiados como de fallecidos, sin que todavía se vislumbre el “pico” que marcaría el descenso y eventual control de la enfermedad.
Italia lleva una delantera considerable, con la región de Lombardía a la cabeza y donde ocurrieron 381 fallecimientos en las últimas 24 horas. En todo el país se contabilizaron 627 víctimas solo este jueves, lo que representa un incremento de 200 muertes más con respecto al día anterior y un total de 4,032 muertos por el coronavirus hasta la fecha.
En España esta semana fue la del despegue. Aunque las actividades presenciales en escuelas, colegios y universidades fueron suspendidas hace diez días y el cierre de restaurantes, bares, terrazas y centros comerciales hace siete, desde el 14 de marzo, cuando se emitió el real decreto, el número de personas diagnosticadas pasó de 5,753 a 24,92 este sábado, según datos oficiales del Ministerio de Sanidad. En Italia el número de diagnosticados hasta la fecha era de 41,035 personas hasta el viernes.
De este modo, Italia y España son los dos países de Europa con mayor número de personas diagnosticadas y fallecidas por coronavirus, con tasas de letalidad de la enfermedad por cada 100,000 habitantes de 8.3 y 5% respectivamente. En China la tasa llegó a 4%.
Madrid, epicentro de la crisis
A diferencia de Lombardía, la región más afectada de Italia, ubicada al norte y con menos densidad de población que el centro del país, la capital española se convirtió rápidamente en el epicentro de la enfermedad en España y hoy se lleva el 54% de los diagnosticados. Con una densidad de población mayor que el resto del España, solo en Madrid durante la última semana los contagios pasaron de 1,519 casos a 7,165 y fallecieron 130 personas las últimas 24 horas.
Las unidades de cuidados intensivos de la capital española comienzan a llenarse, y por la cantidad de hospitalizados ya se han acondicionados dos grandes hoteles como “hoteles medicalizados” para trasladar pacientes: el Ayre Gran Hotel Colón y el Hotel Marriott Auditorium.
Otra de las órdenes impartidas por las autoridades españolas es que los hoteles suspendan sus actividades completamente a partir de este domingo.
“Los días duros y difíciles vienen ahora”, dijo parcamente esta mañana Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Emergencias Sanitarias al momento de hacer su comparecencia diaria para informar sobre el virus.
El temor a que el coronavirus en España alcance los niveles de Italia ha empujado a las autoridades no solo a ordenar el distanciamiento social, sino endurecerlo. Aunque todavía no ordena el estado de sitio o el cierre oficial de los límites de Madrid, el gobierno ha prohibido los desplazamientos entre provincias —algo que Italia ordenó este viernes también, a pesar de la magnitud del contagio en el territorio— y los cuerpos policiales han comenzado las detenciones a quienes rompan la cuarentena sin justificación.
En menos de dos días 315 personas han sido apresadas por circular sin el debido justificativo de trabajo o resistencia a la autoridad y se han puesto más de 30,000 multas, que van de los 100 a los 600 euros (hasta 700 dólares). Desde el sábado 14 de marzo solo se permiten los traslados de una sola persona por familia a automercados, farmacias y consultas médicas estrictamente necesarias.