El Ejército de EEUU corta el alistamiento de inmigrantes, muchos de los cuales podrían ser deportados, según The Washington Post

Los reclutadores del ejército de Estados Unidos supuestamente han cancelado de forma abrupta los contratos de alistamiento a cientos de reclutas militares nacidos en el extranjero desde la semana pasada, exponiendo a muchos de ellos a la deportación, según reveló el diario The Washington Post, basándose en testimonios de varios efectivos afectados y exmilitares familiarizados con la situación.
Muchos de los alistados han esperado años para unirse a un programa de reclutamiento diseñado para atraer a inmigrantes altamente calificados a cambio de obtener la ciudadanía estadounidense por vía rápida.
Ahora reclutas y expertos dicen que los reclutadores están prescindiendo de sus contratos para liberarse de un proceso oneroso del alistamiento, que incluye investigaciones extensas, para centrarse en personas que pueden alistarse más rápidamente y satisfacer así los objetivos de alistamiento militar.
La interrupción a escala nacional llega en un momento en que el presidente Donald Trump atraviesa un campo político minado, trabajando con los demócratas en una ley de protección a los dreamers, los inmigrantes indocumentados que llegaron a Estados Unidos siendo niños y han cumplido mayoría de edad.
Margaret Stock, oficial retirada del Ejército que dirigió la creación del programa de reclutamiento de inmigración, ha recibido esta semana docenas de mensajes de los reclutas que denuncian la nueva situación, así como reportes similar en los grupos de Facebook, según contó al Post.
"Es una basura que arruina la vida de la gente. La magnitud de la incompetencia está más allá de lo creíble. Tenemos una guerra en marcha y necesitamos a estas personas", dijo Stock.
La oficial retirada aseguró que un reclutador le confesó que había presión del comando de reclutamiento para liberar a los reclutas nacidos en el extranjero, con una directiva que sugería que tenían hasta el 14 de septiembre para despacharlos, sin atentar en contra de los objetivos de reclutamiento.
El viernes, el Pentágono negó haber ordenado una cancelación masiva de contratos de reclutamiento de inmigrantes y dijo que no había razones para hacerlo. Los funcionarios dijeron que las directivas recientes ordenan que los reclutas inmigrantes sean separados de la institución al cumplir los dos años de alistamiento, a menos que "opten" por un año adicional.
Naomi Verdugo, una ex oficial de reclutamiento Senior para el ejército, contó al Post que "los inmigrantes son examinados mucho más que cualquier otro recluta que tengamos".
"Parece una exageración, pero hay una sensación de que no importa lo que haga la verificación de antecedentes, nunca es suficiente", dijo Verdugo, quien junto con Stock, ayudó a implementar el programa.
Según el Washington Post no está claro si con la novedad en el proceso de reclutamiento de extranjeros los funcionarios del Pentágono han asumido las mismas posturas de línea dura en inmigración de la Casa Blanca.