El brutal asesinato hace cuatro décadas por el que Florida ejecutará a Darryl B. Barwick
Darryl B. Barwick había visto a la joven Rebecca Wendt tomando el sol cerca de su apartamento de Panama City, Florida, cuando decidió seguirla para, lo que dijo, iba a ser un robo. El caso acabó en un cruento asesinato por el que este miércoles va a ser ejecutado.
La hermana y compañera de piso de Wendt fue quien la encontró muerta, en el baño, envuelta en un edredón.
El crimen ocurrió el 31 de marzo de 1986 y, tras ser arrestado dos semanas más tarde, Barwick confesó el asesinato. Alegó que la joven, entonces de 24 años, se había resistido al robo.
Además, dijo, la había matado para no volver a la cárcel. Pocos meses antes había quedado en libertad tras una condena por violación.
Pero el ensañamiento fue tal que la autopsia concluyó que Wendt había recibido 37 puñaladas.
Y aunque no había pruebas concluyentes de que también hubiera sido víctima de una agresión sexual, esa fue una sospecha que nunca se terminó de despejar.
De hecho, se encontraron restos de semen en una alfombra y el bañador de la víctima había quedado como si hubieran tratado de arrancárselo.
Condenado a muerte por unanimidad del jurado en el segundo juicio
Al final, la condena se basó en la confesión, los restos de semen y testigos que lo vieron dirigirse al apartamento de Wendt, así como las huellas que dejó tanto dentro como fuera del lugar.
En noviembre de 1986 fue declarado culpable de asesinato en primer grado, robo con violencia y a mano armada, y agresión sexual, y sentenciado a muerte dos meses después por recomendación del jurado por 9 votos a 3.
En 1992, hubo un nuevo juicio en el que volvió a ser declarado culpable y en esa ocasión la pena de muerte fue votada por unanimidad de los 12 jurados.
Tan solo tres meses antes del asesinato, Barwick había salido de prisión, donde estaba por violar a una mujer de 21 años armado con un cuchillo.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó el mes pasado la condena a muerte de Barwick, quien ahora tiene 56 años.
De consumarse, se trata de la tercera ejecución en Florida este año y la 102ª tras la reinstauración de la pena capital en 1976.
Con información de AP.
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