El 15% de latinos de Estados Unidos ve a los indocumentados como delincuentes que deben ser deportados
El 15% de la población hispana de Estados Unidos cree o está convencida de que los inmigrantes no autorizados o indocumentados “deben ser designados como delincuentes” y ser “deportarlos a sus países de origen”.
Así lo revela una encuesta del National Opinión Research Center (NORC) la Universidad de Chicago (una de las organizaciones independientes de investigación social más grandes de Estados Unidos) y AmeriSpeac, con la realización de The Associated Press y Univision publicada el martes previo a la entrega del Informe del Estado de la Unión por el presidente Joe Biden.
Clasificar a los indocumentados como criminales fue parte central del expresidente Donald Trump, quien durante su mandato desarrolló una política migratoria de 'tolerancia cero' que incluyó separaciones forzadas de familias en la frontera con México, severas restricciones a la política de asilo y decretó la presencia indocumentada, una falta de carácter civil, como una amenaza a la seguridad pública y nacional de Estados Unidos.
El gobierno anterior también tildó a los indocumentados como violadores y traficantes de drogas. En los tres casos, las calificaciones no fueron respaldadas por evidencias que así lo demostraran.
Una reforma migratoria, pero con "ciertos" requisitos
Ante la misma pregunta, 'cuál es la que más se acerca a su opinión sobre cuál debería ser la política del gobierno con respecto a los inmigrantes no autorizados que ahora viven en Estados Unidos', el 62% de los encuestados dijo que “se les debería permitir que permanezcan en el país y puedan obtener la ciudadanía estadounidense, pero siempre y cuando cumplan con “ciertos” requisitos y paguen una “multa”.
En Estados Unidos viven unos 11 millones de indocumentados, algunos de los cuales llevan más de dos décadas y tienen familias establecidas con cónyuges y/o hijos nacidos en el país.
Durante la campaña electoral 2020 Biden prometió deshacer la política migratoria de Trump, construida a base de unos 400 memorandos y órdenes ejecutivas, y aprobar una reforma migratoria para legalizar a la mayoría de los extranjeros sin papeles.
Sin embargo, los planes del mandatario se estancaron en marzo del año pasado en el Senado tras la aprobación en la Cámara de Representantes de dos proyectos de ley bipartidistas que cumplieron con la promesa de legalización y ciudadanía ofrecida por Biden.
Otro 21% de los encuestados dijo estar de acuerdo con la aprobación solo de un programa de trabajadores temporales que le permita a los indocumentados trabajar legalmente en el país, pero sin un estatus de permanencia legal, tal como una residencia (Green Card o tarjeta verde).
“No hay diferencia” entre el gobierno de Biden y Trump
Otro hallazgo de la encuesta señala que para el 55% de los latinos “no hay diferencia” entre el actual gobierno y el anterior en cuanto a las preocupaciones de que alguien pueda ser detenido y/o deportado de Estados unidos, lo que evidencia una percepción negativa de la política migratoria de Biden.
Sólo el 30% de los encuestados dijo que ahora estaba “menos preocupado” y el 13% respondió que bajo la actual istración las preocupaciones han aumentado.
Desde un inicio del gobierno de Biden, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) estableció nuevas prioridades de deportación con énfasis en aquellos extranjeros que han cometido delitos o crímenes graves, y aquellos que permanecen indocumentados desde el 1 de noviembre de 2020.
Las prioridades fueron actualizadas en octubre junto con la entrega de poderes extraordinarios a los agentes fronterizos para utilizar la discrecionalidad, no solo para deportar a extranjeros, sino para procesarlos si existe evidencia de temor creíble y permitirles que soliciten asilo.
Bajo el gobierno de Trump los agentes fueron autorizados para utilizar la discrecionalidad con fines de deportación en el marco de la ‘tolerancia cero’.
De quién es la culpa que no haya una reforma migratoria
A la pregunta de quién es el culpable que no haya una reforma migratoria 13 meses después de la llegada de Biden a la Casa Blanca (el presidente la prometió en el primer año de su mandato), el 40% de los latinos encuestados dijo que la responsabilidad era tanto de demócratas como republicanos “por igual”.
Y mientras el 27% respondió que la responsabilidad recae por completo en los republicanos (oposición), el 11% considera que los responsables del incumplimiento de la principal promesa migratoria de Biden es de los demócratas.
El 21%, sin embargo, dijo que la culpa del fracaso de la aprobación de una ley para legalizar a los 11 millones de indocumentados es del presidente Biden.
Cabe señalar que la reforma migratoria permanece estancada en el Senado desde mediados de diciembre, cuando la principal asesora de la Cámara Alta, Elizabeth MacDonough (Parlamentarian), rechazó el denominado Plan C de los demócratas que incluía una residencia temporal renovable por 10 años para unos 6.5 millones de indocumentados.
La estrategia es incluir la reforma migratoria dentro de la Ley de Gasto Social y aprobarla como parte del paquete de reconciliación con 51 votos (mayoría simple). Para lograrlo se requieren los 50 votos demócratas, pero los senadores Kyrsten Sinema (Arizona) y Joe Manchin (West Virginia) no están de acuerdo con la ley de gasto social de Biden y tienen detenido indefinidamente la iniciativa de ley.
Otros datos de la encuesta de Univision sobre los hispanos
La encuesta también halló que:
- El 61% no conoce a un indocumentado;
- Al 63% no le preocupa mucho que un indocumentado sea arrestado y/o deportado;
- El 47% confía más en los demócratas frente al 21% en los republicanos;
- El 43% desaprueba la gestión de Biden en el tema migratorio y el 37% lo aprueba; y
- En caso de aprobarse una reforma migratoria, el 36% dice que ambos partidos merecen el reconocimiento;
Las entrevistas para esta encuesta se realizaron entre el 1 y el 12 de febrero de 2022, con votantes hispanos registrados mayores de 18 años que representan a los 50 estados y el Distrito de Columbia (DC).
La cobertura de muestra alcanza aproximadamente el 97% de la población de los hogares de Estados Unidos. El NORC dijo que se realizaron controles para garantizar la calidad de los datos.