Dana Sabraw, el juez que conoce de cerca la discriminación y ahora enfrenta a Trump por separar familias

Dijo que la separación de familias llevada a cabo por el gobierno de Donald Trump "rompe arbitrariamente los lazos sagrados entre padres e hijos". También definió ese proceso como "brutal, ofensivo".
Dana Sabraw, juez federal de 60 años que fue designado por el presidente republicano George Bush hijo, se ha convertido en un dolor de cabeza para la istración Trump. Es él quien ordenó reunificar a decenas de cientos de familias separadas por la política de 'tolerancia cero'.
Su contundencia para que el gobierno cumpla con los plazos fijados para reunificar a las familias inmigrantes ha convertido a este juez de San Diego en un personaje central de un drama que ha acaparado la atención nacional e internacional con historias de niños y adolescentes separados a la fuerza de sus padres.
Estos son cuatro datos sobre el juez que te ayudarán a conocerlo mejor:
1. Hijo de inmigrantes
Sabraw nació en San Rafael, cerca de San Francisco, y creció en el área de Sacramento, también en California. Su padre, un francocanadiense, fue enviado a la Guerra de Corea, donde conoció a su madre, japonesa, según explicó Los Angeles Times.
Descendiente de inmigrantes, el juez recuerda cómo la familia tuvo problemas al buscar casas debido al odio contra japoneses. "Debido a esa experiencia, crecí bastante consciente de las discriminaciones", dijo al diario North County Times en 2003.
2. Zona caliente
Ser juez en San Diego lo ha acercado a la realidad de la frontera, con audiencias por entrada ilegal o por tráfico de drogas. En abril de este año, llevó a corte a uno de los líderes del cartel de Sinaloa, Jesús Manuel Salazar Nuñez, acusado de importar desde México metanfetamina, cocaina y heroina para distribuirlas en el área de San Diego.
Durante el juicio, se supo que usaban bebidas y comida en latas, camarones congelados y cajas de vegetales para esconder la droga. El juez Dana Sabraw sentenció a Salazar Nuñez a casi 12 años de cárcel y cinco más de libertad condicional.
3. Contudente con el gobierno
Pese a que fue nombrado por un presidente republicano, el juez no ha dudado en reñir al gobierno de Donald Trump por las deficiencias en el proceso de reunificación de familias inmigrantes.
Por ejemplo, en contra de la voluntad de la istración, interrumpió temporalmente las deportaciones de familias migrantes separadas. También obligó al Departamento de Salud y Servicios Humanos a correr con los gastos de la reunificación de familias, en vez de que lo hicieran los propios padres o familiares.
También es cierto que recientemente Sabraw mandó elogios sl gobierno en una audiencia en San Diego: dijo que ha demostrado buena fe y que mayormente cumplió con el plazo que vencía para reunir familias con niños menores de 5 años.
4. Cambio de ideas
A principios de mayo, Sabraw pareció tener sentimientos encontrados sobre si parar la separación de familias en la frontera con México o no. Según explica la agencia de noticias AP, le pidió al gobierno que explicara cómo las familias migrantes veían sus derechos cumplidos mientras las separaban, pero también se mostró receloso de inmiscuirse demasiado con la aplicación de leyes migratorias.
"¿Cómo puede la corte emitir una orden tan amplia, que puede tener tantas repercusiones diciendo al fiscal general que detenga o libere (a las familias) del todo?", dijo entonces. Pero cambió de opinión.
Unas siete semanas después, Sabraw culpó al gobierno y su 'tolerancia cero' de haber creado una "crisis". Dijo que la separación de familias "no se ajusta a las ideas tradicionales de decencia y obediencia a las reglas".