La agresiva temporada de gripe ya afecta a todo EEUU y ha matado a 20 niños
La epidemia de influenza se apoderó ya de Estados Unidos continental en al menos 20 niños.
"La influenza está en estos momentos en todas partes", dijo en rueda de prensa el doctor Daniel Jernigan, director de la división de influenza de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
El aspecto más destacado de la actual temporada es que los niveles de infección y actividad están casi nivelados en cualquier punto del país y solo esta semana el aumento de casos fue de 5.8%.
Aunque la tasa de infección aumenta con las horas, se estima que el país ya registra más de 60,000 casos reportados desde que se inició el brote el pasado mes de octubre, aunque aquí no están incluidos aquellos enfermos que se mejoraron sin tener que acudir a un hospital.
De los dos tipos de gripe activos –H1N1 y H3N2– es el segundo el que está presentando mayor actividad e implicaciones clínicas, que pueden llevar al paciente a complicaciones de salud e incluso la muerte, según indicó el informe de los CDC dado a conocer este viernes y que registra casos hasta el pasado 6 de enero.
El problema con la cepa H3N2 es que la efectividad de las vacunas es menor, es decir, de apenas 30%.
Del total de casos, los CDC están reportando cerca de 6,500 hospitalizaciones a nivel nacional debido a complicaciones y el mayor número de muertes se produjo en la penúltima semana del 2017, muy por encima de la tasa promedio según indicó la doctora Lynnette Brammer, al frente del equipo de vigilancia nacional de la influenza.
"La temporada de gripe está justamente en su punto más alto, sabemos de experiencias pasadas que tomará muchas semanas más para que la actividad desacelere", dijo por su parte la doctora Brenda Fitzgerald, directora de los CDC.
Las autoridades sanitarias creen, que como en otros años, la temporada de vacaciones en las dos últimas semanas de 2017, cuando cientos de miles de personas viajan por todo el país para reunirse con sus familias, es el factor que más ayuda a acelerar los contagios.
Por ello, reiteran que hay que tener mucho más cuidado con los niños y con las personas mayores de 65 años, que generalmente son los más expuestos.
El diagnóstico de la influenza a veces puede ser escurridizo. Los síntomas son similares a los de otros problemas de salud e incluso algunos exámenes que se usan para detectar el virus no siempre son 100% certeros.
Por ejemplo, las Pruebas de Diagnóstico Rápido de Influenza (RIDT, por sus siglas en inglés) proveen resultados en 10 a 15 minutos, pero no son tan precisas. Aun si el resultado es negativo, tu doctor podría concluir que tienes la gripe, basándose en su juicio clínico.
También podría hacer otros exámenes más fiables, pero que tardan más tiempo. El problema es que la efectividad de los medicamentos que suelen recetarse para la gripe es mayor si se toman desde el inicio, de ahí que muchas veces se prescriba el tratamiento sin hacer el examen, una práctica avalada por los Centros para el Control de Enfermedades.