Mortal impacto de tornados: una bebé de un año y su padre se encuentran entre las víctimas en Mississippi
Riley Herndon, una bebé de un año, perdió la vida junto a su padre, Ethan Herndon, de 33, en medio de uno de los devastadores tornados que azotaron la noche del viernes varias comunidades rurales de Mississippi.
Riley es, hasta lo que se tiene conocimiento en este momento, la víctima más joven de este desastre. Su familia ha vivido en la zona durante generaciones, al punto de que la calle en donde viven lleva su nombre, según el diario The New York Times.
Los Herndon vivían en una casa móvil que fue destruida por uno de los tornados. Los hermanos de la bebé, Aubrey, de 4 años, y Brantley, de 7, resultaron gravemente heridos y se encuentran hospitalizados. También la madre, Elizabeth, de 31 años, quien fue enviada a otro hospital.
Según una campaña de GoFundMe creada para apoyar a la familia y que ya ha recolectado más de $104,000, Elizabeth, la madre, sufrió múltiples lesiones, entre ellas las fracturas de un brazo y una pierna, así como una cadera dislocada. Brantley, el niño, fue trasladado vía aérea al hospital LeBonheur con múltiples huesos rotos, el hígado lacerado y un pulmón perforado. Y Aubrey, la niña, también se encuentra en ese hospital, con múltiples heridas, entre ellas un codo y un tobillo rotos.
"La pérdida más dolorosa"
"Esta dulce familia está destrozada física y emocionalmente. Han sufrido la pérdida más dolorosa y aterradora que cualquiera de nosotros pueda imaginar", dice en la plataforma el creador de la campaña, Walter Edington.
Fue el padre de Ethan, abuelo de los niños que vivía en una casa cercana, quien descubrió los cuerpos entre los escombros de la vivienda destruida.
La pequeña Riley estaba a solo un mes de cumplir dos años. Fue una bebé prematura y arrastraba varios problemas de salud, por lo que era posible que fuera sometida a una cirugía próximamante.
Era “una bebé realmente feliz” que tocó muchos corazones, dijo la tía de los niños, Rachel Atkins, citada por The New York Times. Atkins visitó a sus sobrinos hospitalizados este sábado y dijo que los niños, que están delicados de salud, habían preguntado por su hermanita. "No van a poder entender esto por un tiempo”, agregó.
Sobre su hermano Ethan, un veterano que tras su servicio en la Marina había trabajado en un concesionario de vehículos recreativos, Atkins aseguró que "haría lo que fuera por cualquiera". “Amaba a su familia más que a nada, y amaba a Dios más que a nada también”, agregó.
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