Reportes de seguridad nacional advierten sobre serias amenazas de grupos extremistas de cara a las elecciones presidenciales
Los grupos extremistas domésticos representan una seria amenaza de cara a las elecciones presidenciales, de acuerdo con reportes del FBI y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).
Diversos funcionarios de seguridad de Estados Unidos creen que las tensiones políticas en constante crecimiento, las numerosas campañas de desinformación y los disturbios civiles instalados en diferentes partes del país, han creado un ambiente propicio para que se generen serias amenazas de grupos extremistas, de acuerdo con Reuters.
La oficina de Seguridad Nacional del Nueva Jersey decidió destacar públicamente esta preocupación -que hasta ahora se había mantenido en el ámbito interno-, mediante un informe publicado la semana pasada en su sitio web.
"Tienes este brebaje de brujas que realmente no había sucedido en la historia de Estados Unidos", precisó Jared Maples, director de la Oficina de Seguridad Nacional y Preparación de Nueva Jersey, área que dio a conocer la evaluación de estas amenazas.
Con tres posibles resultados para las próximas elecciones -uno rápido, un proceso de verificación que puede llevar meses y una férrea lucha legal que llegue a la Corte Suprema-, la evaluación dentro del informe advierte que cada uno de estos escenarios podría generar ambientes propicios para la violencia extrema que lleven a posibles enfrentamientos mortales.
Además de las protestas por las injusticias raciales y la brutalidad policial que han generado confrontaciones violentas entre grupos extremistas de izquierda y derecha, las próximas elecciones están marcadas por la pandemia del coronavirus, un alto índice de desempleo y la constante incertidumbre que el propio presidente Donald Trump ha puesto en la opinión pública -sin pruebas que lo confirmen- por un posible fraude electoral debido a la implementación de las boletas por correo, según Yahoo News.
Diversos expertos electorales han dejado claro que los fraudes en las boletas electorales por correo son extremadamente raros y que sería casi imposible que intrusos extranjeros puedan manipular una elección por medio de documentación falsa.
Un memorándum del (DHS) del pasado 17 de agosto establecía los peligros de que diversos extremistas pudieran movilizarse rápidamente motivados por su ideología y participar de manera activa en sucesos violentos vinculados al proceso electoral presidencial. Además, ponía a supremacistas blancos como parte del sector que representaba la mayor amenaza respecto a posibles acontecimientos mortales.
Este martes, durante el primer debate presidencial entre no condenó a los supremacistas blancos y aseguró que había visto más violencia originaria desde sectores de la izquierda
Si bien hasta el momento Trump o sus principales funcionarios no se han referido públicamente sobre una posible amenaza de este tipo con miras a las elecciones, sí han señalado abiertamente a activistas de izquierda y a Antifa, a pesar de que los diversos registros de arrestos por violencia durante la ola de protestas no hayan encontrado vinculación alguna con estos grupos referidos por el mandatario.
En cambio, funcionarios de alto rango del DHS reconocieron durante audiencias del Congreso que los supremacistas blancos han representado la amenaza interna más letal para Estados Unidos en los últimos años. El director del FBI, Christopher Wray, aseguró que su agencia estaba llevando a cabo investigacionessobre extremistas domésticos violentos, incluidos supremacistas blancos, de donde surgen la mayoría de los casos.
Las ideologías supremacistas blancas representan el 77% de los 454 presuntos asesinatos de extremistas domésticos en la última década, de acuerdo con datos -presentados ante el Congreso- de la Liga Antidifamación, una organización anti-odio con sede en Nueva York.
Al ser cuestionado si el presidente Trump había abordado públicamente la amenaza electoral, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Ullyot, le dijo a Reuters que la máxima prioridad del mandatario era "proteger a Estados Unidos de todas las amenazas, tanto extranjeras como nacionales".
El Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales con sede en Washington, conformado por un grupo de expertos bipartidistas, publicó en junio un informe en el que aseguraba que el resultado de las próximas elecciones, sin importar cuál sea, podría generar actos violentos desde los extremos de cada una de las ideologías, poniendo en peligro la vida de muchas personas.
"Si Trump pierde las elecciones, algunos extremistas pueden usar la violencia porque creen que hubo fraude (…) alternativamente, algunos en la extrema izquierda pueden utilizar el terrorismo si el presidente es reelegido", estableció el documento.
