Del español y Venezuela al resurgir de los moderados: los momentos más destacados del tercer debate demócrata
1. El resugir de los moderados como Joe Biden y Kamala Harris
Un resurgimiento de la fuerza entre los más moderados en el Partido Demócrata, ese fue uno de los pilares más contundentes en el tercer debate celebrado este jueves en Houston.
Mientras el líder en las encuestas Joe Biden tomó una posición más dinámica y ofensiva, otros candidatos lograron anotar puntos en su popularidad.
Bernie Sanders y Biden iniciaron el debate con la discusión sobre cuidado de salud, donde el exvicepresidente logró mantenerse e incluso increpar a sus rivales por detalles.
Biden tuvo su mejor noche hasta ahora donde apostó por “rehusarse a posponer” una serie de prioridades en su futuro gobierno: "Nadie ha dicho todavía cuánto va a costar su plan. Para ser un socialista tienes mucho más confianza en américa corporativa que yo", dijo Biden al atacar a Sanders.
2. Frente común contra Trump
Kamala Harris fue otra de las candidatas que logró mayores aciertos a través del humor y de llevar la discusión a un nivel personal. La senadora inició el debate atacando directamente a Trump: “Has usado el odio y la intimidación, has usado 12,000 mentiras y promesas falsas. Lo que no entiendes es que los estadounidenses son mejores que esto. Ahora puedes volver a ver Fox News”, dijo Harris.
Beto O'Rourke fue otro de quienes mencionó en diversas ocasiones al presidente y lo culpó directamente por el tiroteo de El Paso. “La tragedia fue inspirada por nuestro presidente” y es “una consecuencia de su presidencia y racismo”, dijo el excongresista texano.
3. Castro en ofensiva
El exalcalde Obamacare.
Pero el tono y las palabras que escogió el precandidato lo retrataron como el más agresivo de la jornada.
4. Se habla español
Jorge Ramos, uno de los cuatro presentadores del debate organizado por ABC y Univision partió el debate hablando en español: “Este también es nuestro país”, dijo para después traducir sus palabras al inglés. En Texas un estado con 11 millones de hispanos, sus palabras resonaron con fuerza.
Al iniciar su presentación, Castro fue el único de los candidatos que pronunció unas palabras en español al dar la bienvenida a todos a Texas.
Aunque durante el debate prevaleció el inglés, Ramos cambió de español a inglés en varias ocasiones llamando a los candidatos.
Beto O’Rourke fue uno de los que tomó un paso más allá y habló al público directamente en español: “Si queremos asegurar nuestras comunidades necesitamos tratar a cada persona con respeto y dignidad”, dijo.
5. Control de armas tras tiroteos
O’Rourke fue quien tomó la postura más extrema en este tema. Mientras sus colegas hablaron del chequeo universal y más restricciones para licencias, el excongresista dijo que hay que confiscar las armas de asalto.
“Si las armas están diseñadas para matar a personas en una batalla, entonces vamos a quitárselas”, dijo O’Rourke.
Harris capturó la atención popular al hablar de niños preparados para enfrentar tiroteos en colegios y se enfrentó a Biden respecto a la capacidad de una futura presidencia de implementar acciones ejecutivas para el control de armas. “Digamos que 'Sí se puede Joe'” bromeó, mientras anotó puntos diciendo que “Trump ha cargado las municiones a través de sus tuits”.
Biden insistió en que hay propuestas de sus rivales, incluida Harris, que no se pueden implementar constitucionalmente con una orden ejecutiva, pero aseguró que el ambiente político es diferente ahora y se podrán lograr más avances en el Congreso.
6. En busca del voto venezolano
El voto venezolano y cubano son centrales para ganar estados como Florida en la próxima elección. Cuando Ramos abrió el apartado de preguntas sobre América Latina, varios candidatos quisieron intervenir.
Castro se comprometió a dar un Estatus de Protección Temporal ( TPS, por sus siglas en inglés) para los venezolanos y criticó a Trump por no hacerlo.
Por su parte, Biden dijo que Estados Unidos debería permitir la inmigración de venezolanos y recordó que durante el gobierno de Barack Obama implementaron un plan de ayuda para El Salvador, Honduras y Guatemala, equivalente a $740 millones de dólares.
Sanders enfrentó un momento complicado al hablar de Nicolás Maduro y lanzó la crítica más fuerte en su contra hasta el momento. “Es un tirano vicioso”, dijo el senador, mientras llamó a elecciones libres en Venezuela.
El senador de Vermont dibujó la línea entre el socialismo que él defiende y el de Maduro. “La democracia socialista se trata de crear una economía que trabaje para todos, no sólo para el 1%”.