Baldes y arena para gatos para ir al baño si hay un tiroteo: los materiales para el regreso a clases en Colorado
Corredores curvos y arena para gatos: regresar a clases en la era de los tiroteos escolares
Más allá de los suministros en sí, por los cuales está agradecida, fue la manera casual con que le entregaron los baldes, la arena para gatos y el marcador Sharpie durante una capacitación rutinaria de regreso a clases que dejó en shock a la maestra de Colorado Cassie López.
"Estábamos haciendo [desarrollo profesional], y fue como, 'Ah, vengan por sus cubos, y para esto es que son'", dijo López entristecida. “Fue impactante. Estaba bastante molesta después".
Los cubos y la arena para gatos son para que los estudiantes los usen como baños en caso de que deban cerrarla por un tiempo prolongado debido a un tiroteo en la escuela.
El Sharpie es para que los maestros escriban la hora en que le aplicaron un torniquete a un estudiante que esté sangrando, para que los paramédicos sepan cuánto tiempo ha pasado.
López también recibió un kit con suministros de primeros auxilios normales, así como dulces para darle a los estudiantes con diabetes en caso de que se les bajen los niveles de azúcar en la sangre mientras se esconden de un atacante.
El jefe de seguridad escolar de las Escuelas Públicas de Jeffco describió los suministros y otros nuevos esfuerzos de seguridad como enfoques innovadores para un problema con el que este distrito suburbano de Denver tiene experiencia de primera mano.
Jeffco es justamente el lugar de la Secundaria Columbine, donde dos adolescentes asesinaron a 12 de sus compañeros y a un maestro hace 20 años.
"Estos eventos no son exclusivos a nosotros, pero tenemos una experiencia asociada con esto que está en primera plana constantemente", dijo John McDonald, director ejecutivo del departamento de seguridad escolar del distrito. "Parte de nuestra responsabilidad es estar a la vanguardia y tomárnoslo en serio".
El día que López recibió los suministros, hizo un breve video expresando cómo se sentía.
"Esta es la realidad actual en nuestras escuelas públicas. No se puede permitir que esta sea la nueva normalidad. #EstoesEEUU", escribió su amiga Melea Mayen al compartir su video.
López quiere ser clara: no está molesta con la escuela por proporcionar estos suministros. Está molesta porque los maestros de hoy tienen que preocuparse por cosas como atarle torniquetes a sus estudiantes.
"Parece que, en general, a Estados Unidos no le importan nuestros niños, ni siquiera tengo palabras para lo horrible que es eso", dijo López. "Parece que existe esta presión para que los maestros pongan su vida en peligro. Eso es mucho que pedirle a los maestros".
Este no es el primer año que a los maestros de Jeffco les dan "baldes-baños" (' go buckets', en inglés), y la escuela de López no es la única que los usa. McDonald estima que más de la mitad de las 158 escuelas de Jeffco tienen los baldes, junto con carpas improvisadas o cortinas de baño para darle privacidad a los estudiantes.
La idea nació hace unos años después de que una escuela en el distrito, Alameda International Junior and Senior High School, se cerrara ( lockdown) por una hora tras un reporte de que había un arma en la escuela, dijo McDonald. Los estudiantes terminaron haciendo sus necesidades en botes de basura y armarios, dijo.
Los baldes no son un requerimiento en las aulas, pero McDonald dijo que son muy recomendables.
"Queremos darles dignidad a nuestros hijos en medio de este tipo de crisis", dijo.
En la escuela, ahora también se aprende cómo "detener un sangrado"
Los Sharpies son parte de un esfuerzo más amplio para enseñar a los educadores a responder mejor en situaciones en las que los estudiantes o colegas pueden resultar heridos. Incluye lo que McDonald describe como un nuevo "equipo de respuesta de enfermeras escolares" exclusivo de Jeffco de 33 enfermeras escolares con experiencia en emergencias y trauma que pueden brindar atención médica en caso de tiroteos u otras crisis.
Las Escuelas Públicas de Jeffco también comenzaron a ofrecer capacitación para "detener un sangrado" para enseñar a los educadores cómo atar torniquetes y tratar heridas. Finalmente, McDonald dijo que la esperanza es entrenar a los estudiantes también.
"Realmente partimos de la creencia de que la capacitación crea un clima y una cultura fundamentales de seguridad escolar, y de que usted puede estar preparado para una emergencia sin tener miedo de esa emergencia", dijo.
López aún no ha recibido la capacitación. De hecho, cuando sus supervisores le entregaron los Sharpies, ella dijo que incluso ellos no estaban seguros de su propósito. Los maestros en el entrenamiento comenzaron a adivinar y llegaron a la teoría de que los marcadores deberían ser para escribir el momento en que se aplicaba un torniquete.
Resulta que tenían razón.
Esta historia fue publicada originalmente por Chalkbeat, una organización de noticias sin fines de lucro que cubre la educación pública. Regístrate para recibir sus boletines aquí: ckbe.at/newsletters