Impuesto a los superricos: cómo Biden quiere hacer que los multimillonarios paguen más
La Casa Blanca presentó este lunes un proyecto de presupuesto para el próximo año fiscal de $5,8 billones (trillones, en inglés) que incluye aumentos sustanciales de fondos para las Fuerzas Armadas y la policía, así como para programas sociales.
En contraste con el plan del año pasado, que proyectaba un aumento del déficit en casi $1,4 billones para el fin de la década, en esta ocasión se propone reducir el déficit anual, hasta acumular $1 billón en los próximo diez años.
Ese objetivo se lograría, con tres estrategias: luchar contra las multinacionales que evaden impuestos refugiándose en paraísos fiscales; revertir la bajada del impuesto de sociedades de la era de Donald Trump y crear un nuevo impuesto mínimo a los multimillonarios.
¿Qué busca el nuevo impuesto a los millonarios de Biden?
La Casa Blanca afirmó en un comunicado que Con el nuevo "impuesto mínimo para los multimillonarios" busca evitar que “los más ricos acaben pagando una tasa menor que muchos hogares de clase media”.
Un ejemplo: en 2011, el fundador de Amazon, Jeff Bezos, tenía un patrimonio valorado en $18,000 millones. Ese año, el IRS le devolvió $4,000 por el crédito por hijos.
Según una investigación de Propública del año pasado, entre 2006 y 2018, quien estaba camino de convertirse en el hombre más rico del mundo aumentó su fortuna en $127,000 millones y había pagado en impuestos un 1.1%, $1,400 millones.
Y por supuesto, Bezos no es el único multimillonario cuyos impuestos han llamado la atención por su contraste con el estadounidense promedio, que gana $70,000 al año y paga un 14% en impuestos federales.
El inversor Warren Buffett es uno de los millonarios más entusiastas a la hora de promover el argumento a favor de que los ricos paguen más impuestos. Buffett aumentó su riqueza en $24,300 millones entre 2014 y 2018. Pagó $23.7 millones, menos del 0.1%, según ProPublica.
Y algo parecido ocurre con el actual hombre más rico del mundo, Elon Musk.
El impuesto de Biden a los superricos
Ahora, Biden quiere acabar con esas lagunas legales con la creación del nuevo “impuesto mínimo para los multimillonarios”, una nueva tasa que se aplicará solo al 0.01% más rico, los que tienen un patrimonio valorado en más de $100 millones.
“ Se asegurará que, cada año, paguen al menos el 20% de sus ingresos totales”, señala un comunicado del gobierno.
Se trata de un impuesto similar al que habían propuesto los demócratas a finales del año pasado para pagar la agenda "Build Back Better", el plan de inversiones en infraestructura que propuso Biden y que se topó con la oposición de la bancada republicana y del senador demócrata Joe Manchin, quien finalmente descarriló la agenda presidencial.
Con el nuevo impuesto, se calcula que el gobierno recibirá más de $361,000 millones en los próximos diez años. Y no es lo único que contempla el presupuesto de Biden para aumentar los ingresos.
El segundo presupuesto del gobierno de Biden, que entraría en vigor en octubre, si el Congreso cumpliera con los trámites para su aprobación, también contempla aumentar la tasa del impuesto de sociedades al 28%, revirtiendo la legislación aprobada en 2017 por el gobierno del expresidente republicano Donald Trump (2017-2021), que la redujo del 35% al 21%.
Según señala el Servicio de Investigación del Congreso en un informe de diciembre pasado, la subida del tipo de ese impuesto al 28% supondría un ingreso de $858,000 millones en diez años.
Además, el proyecto presupuestario contiene medidas adicionales para garantizar que las empresas multinacionales que operan en EEUU no puedan usar paraísos fiscales.
¿En qué quiere gastar Biden?
EEUU propone $6,900 millones para la Iniciativa Europea de Disuasión, para la OTAN y la "lucha contra la agresión rusa" a Ucrania y $1,000 millones adicionales de asistencia para Kiev. Si el Congreso adopta el presupuesto, esta cantidad pasaría a engrosar otras ayudas ya desembolsadas a favor del gobierno ucraniano.
Otro punto que ha enfatizado el gobierno es que Biden busca reducir el déficit.
“Mi gobierno va camino de reducir el déficit federal en más de $1.3 billones este año, recortando a la mitad el déficit del último año de la istración anterior y consiguiendo la mayor reducción en un año de la historia de EEUU”, afirma Biden en un comunicado.
Y el presidente agrega que al mismo tiempo el nuevo presupuesto contempla “inversiones en asegurar la nación y construir un país mejor” con “más policías en las calles” y “ una de las mayores inversiones en seguridad nacional de la historia”.
“Para que nuestro Ejército sigua siendo el mejor preparado, mejor entrenado, mejor equipado del mundo”, agregó.
Según el diario The New York Times, el gobierno pedirá al Congreso $813,300 millones para gasto en seguridad, un 4% más que en 2022. Esto incluye $4,100 millones para desarrollar las capacidades de Defensa, y cerca de $5,000 millones para un sistema en el espacio de alerta antimisiles y otros $2,000 millones para un sistema de interceptación de misiles balísticos intercontinetales.
En cualquier caso, se trata de un presupuesto presidencial, una propuesta que el Congreso debe hacer realidad o no con legislación y destinando fondos para las agencias gubernamen tales.