Cómo una cucharita puede salvar a una mujer de un matrimonio forzado o de la mutilación genital

Los matrimonios forzados son una plaga mundial que aún muchas mujeres (y menores de ambos sexos) sufren. Pese a que no hay datos exactos, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) considera que "en algunos países en vías de desarrollo, más de 70% de las niñas contraen matrimonio antes de cumplir los 18 años, muchas de ellas forzadas”.
La ablación genital, por su parte, es legal en aproximadamente 30 países y más de 200 millones de mujeres y niñas han sufrido esta cruel práctica que no aporta ningún beneficio y que pone en peligro sus vidas.
Por ello, para poder luchar contra estas dos realidades, se ha lanzado una campaña que puede ayudar a las mujeres que lo padecen a denunciar su situación sin miedo a ser represaliadas. El método consiste en esconder una pequeña cuchara de metal en la ropa interior.
El objetivo no es otro que la niña o la mujer esconda ese objeto cuando vaya a pasar por un aeropuerto de manera que se disparen las alarmas del detector de metales. Una vez que sea abordada por los oficiales, ella puede contarles su situación personal para así evitar prolongar su sufrimiento.
La idea se ha lanzado en Suecia, donde ya se ha implementado en el aeropuerto de Gotemburgo, en una ciudad de aproximadamente un millón de habitantes en el suroeste del país.
Katarina Idegard, encargada de los asuntos de violencia de género en esta ciudad, ha dado instrucciones a los funcionarios del aeropuerto sobre cómo actuar si ocurre una situación así.
"La cuchara hará que se dispare el detector de metales cuando avances por los puntos de seguridad", explicó Idegard a Thomson Reuters Foundation. "De esa manera, te llevarán a un lado donde podrás hablar con el equipo de manera privada", añadió.
"Es una última oportunidad para hacer sonar las alarmas", apuntó en referencia a la única posibilidad que pueden tener estas mujeres.
También un problema en EEUU
Suecia no tiene datos exactos sobre el número de mujeres que son obligadas a decir el 'sí quiero' bajo presión, pero Idegard reveló que una línea de teléfono para denunciar esta situación recibió el pasado año 139 llamadas con mensajes sobre matrimonios con menores o forzosos.
Por ahora, la iniciativa solo está implementada en la que es la segunda ciudad del país, pero se espera que pueda lanzarse en otras. Esta medida sigue la idea lanzada por un grupo británico llamado Karma Nirvana, que afirma que ha permitido evitar algunas uniones de este tipo en el Reino Unido.
En Estados Unidos, unos 207,000 menores se casaron en Estados Unidos entre 2000 y 2015, según un estudio de Human Right Watch. En algunos casos, con tan solo 12 años. Delaware se convirtió este mes en el primer estado del país en prohibir el matrimonio con niños, incluso con la autorización de los padres.
Por su parte, la mutilación genital femenina está prohibida en suelo estadounidense desde 1996 bajo pena de multa o cárcel de hasta cinco años. En 2013, había 507,000 mujeres y niñas en el país que habían padecido esta práctica o estaban en riesgo de que se les practicara, según un estudio de la organización sin ánimo de lucro Population Reference Bureau.