“Era apenas un niño”: Padre llora la muerte de su hijo de 18 años a manos de alguaciles de Los Ángeles
Después de cuatro semanas de protestas en las calles del país por la muerte de George Floyd en Minneapolis, las comunidades latina y afroestadounnidense se han unido para para pedir al fiscal estatal de California que conduzca una investigación independiente sobre la muerte de Andrés Guardado, un joven de 18 años.
El domingo, centenares de manifestantes concurrieron en la ciudad de Gardena, California, al sur de Los Ángeles, para protestar por el fallecimiento de Guardado. Cuatro días antes, un agente lo abatió de seis balazos en la parte superior del torso.
“Era apenas un niño”, dijo a Univision Noticias, Cristóbal Guardado, padre del muchacho abatido a tiros. “Mi hijo trabajaba honestamente para pagar su carro y en ese lugar del accidente trabajaba a tiempo completo, porque en su otro trabajo que tenía como guardia de seguridad lo habían descansado”.
Andrés Guardado trabajaba como agente de seguridad en un taller de reparación de automóviles. Supuestamente estaba armado.
“Tenía un arma semiautomática calibre 44 milímetros; es un tipo de arma aparentemente fantasma, es decir, que no tiene número de serie y no es un arma registrada”, declaró a Univision Noticias el Sheriff del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva. “Es un tipo de arma cuya composición es de varios manufacturadores; tiene un cartucho extendido ilegal y estaba cargada con 13 balas”.
Villanueva indicó que es ilegal que el joven fallecido tuviera ese tipo de arma, y el cartucho de extensión que tiene “es todavía más ilegal”.
Añadió que, legalmente, el chico no debería haber estado trabajando en el taller teniendo ese tipo de arma de fuego.
“La edad mínima para tener ese tipo de armas es 21 años”, dijo Villanueva. Andrés Guardado solamente tenía 18 años.
Hasta ahora, las autoridades no han explicado los motivos que desencadenaron el tiroteo. Ello provocó la ira de la comunidad.
“En el Día del Padre fuimos a honrar a los padres de familia y a todos los que han perdido a sus hijos a manos de la policía y alguaciles de Los Ángeles”, dijo a Univision Noticias, Ron Góchez, miembro de Unión del Barrio, una organización de Los Ángeles que aboga por la organización y movilización de la comunidad en defensa de sus derechos. “Ahí está el ejemplo de George Floyd, que no cometió ningún crimen mayor y fue asesinado también”.
Góchez indicó que “ahora más que nunca es necesario denunciar el terrorismo de violencia y brutalidad policiaca contra nuestras comunidades”, dijo. “Hablamos con el dueño del taller donde trabajaba Andrés y nos han dicho que la policía entró a la fuerza y le quitaron las cámaras de video donde seguramente se puede ver que lo balacearon por la espalda”.
La protesta contra la brutalidad policiaca había comenzado de manera pacífica, alrededor de las 2 de la tarde, y a medida que más de 100 personas comenzaron a marchar por las calles hasta la estación Compton del Sheriff, se enfrentaron a cuatro agentes que bloqueaban las puertas.
La manifestación se volvió caótica cuando los agentes lanzaron lo que pareció eran gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a un grupo.
Las autoridades declararon una “asamblea ilegal” y siete personas fueron arrestadas por delitos menores.
Congresistas piden respuestas
Las congresistas Nanette Díaz Barragán y Maxine Waters publicaron una declaración conjunta sobre la muerte a tiros de Andrés Guardado.
“Otro día, y otro niño afroestadounidense o latino ha sido baleado en la espalda por la policía. Estos asesinatos deben detenerse. Lo exigimos. El pueblo estadounidense lo exige”, señalaron las legisladoras.
“Exigimos respuestas y pedimos una investigación independiente sobre esta trágica muerte. Debe haber total transparencia para que el público pueda confiar en la investigación y saber que estamos entendiendo la verdad".
“Estamos pidiendo al Fiscal General de California Xavier Becerra que realice una investigación completa sobre este incidente.
Las respuestas del Sheriff Villanueva
Los agentes del alguacil que participaron en el incidente no llevaban puestas cámaras corporales de video y el jefe del Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva, dijo a Univision Noticias que, desde diciembre de 2018 solicitó fondos a la Junta de Supervisores para dotar con esos equipos a sus 9,000 agentes.
“La dotación de cámaras era mi prioridad principal, pocas semanas después que asumí el mando del departamento; era mi prioridad número uno”, dijo Villanueva, que alegó que no ha recibido esos fondos.
Con relación a la muerte de Andrés Guardado, dijo que hasta ahora no sabe si le dispararon seis veces.
“Lo sabremos hasta que el médico forense termine su investigación, ni tampoco sé si van a hacerse públicos los resultados o no”.
Manifestó que los videos del tiroteo fueron confiscados al dueño de Freeway Auto Bodyshop, después de recibir la aprobación de una orden de cateo por parte de un juez, “para tener la evidencia del tiroteo mismo o de las actividades que ocurrieron antes”.
En torno a las protestas públicas en demanda de justicia expresó: “ellos no aceptan la posibilidad de que tal vez es cierto lo que les estamos diciendo; muchos tienen que ejercitar la imaginación y piensan que lo que dicen es correcto, e explicar lo que hacía el joven con la pistola? ¿Por qué estaba asustado y corrió? Un agente de seguridad pide ayuda si es que está en peligro, pero no huye. ¿Por qué habría de correr por la presencia de policías?”.
El Sheriff aseguró que “si nosotros estamos mal y hay evidencia que hubo disparos por la espalda o que el (Andrés Guardado) estaba de rodillas, eso se convierte en un caso criminal y le irá mal a quien jaló el gatillo”.
Dijo que las investigaciones independientes solicitadas son “bienvenidas”, aunque primero “No hay indicación que nuestros detectives de homicidios estén haciendo una mala investigación, porque son los que tienen más experiencia y capacidad que los estatales; es algo que hacemos todos los días, semana a semana, y son los más capacitados de toda la nación. Ellos no van a parar hasta encontrar la verdad”.
La investigación por la muerte de Andrés Guardado tardaría de dos a cuatro meses. Los resultados se entregarán a la fiscalía de distrito del condado de Los Ángeles, que determinará si el uso de arma de fuego fue legal o no.