Una vista aérea del México. El hoyo es ya más grande que una cancha de fútbol y las autoridades aseguran que seguirá creciendo.
Crédito: Hector Vivas/Getty Images
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Un policía recorre el área cercana al socavón en Santa María Zacatepec, Puebla, al centro de México. El hoyo está localizado a menos de 10 millas (20 kilómetros) al noroeste de la ciudad de Puebla y mide 400 pies de diámetro (125 metros). Crédito: Hector Vivas/Getty Images
El socavón, que tiene agua en el fondo, es un riesgo para la población según han advertido las autoridades. Algunos residente de la zona creen que es el resultado de la extracción excesiva de aguas freáticas de parte de las fábricas o de una planta embotelladora de agua en el área. Crédito: Pablo Spencer/AP
Un niño observa el socavón desde la valla de seguridad que las autoridades han dispuesto para que las personas no se aproximen al área. Los campesinos han denunciado que sus cultivos están siendo dañados porque las autoridades no les permiten acercarse para cuidarlos. Crédito: Hector Vivas/Getty Images
Un grupo de personas observan el socavón. El gobierno mexicano ha enviado a soldados para mantener a la gente 2,000 pies (600 metros) alejada de los límites del hoyo, que tiene una profundidad de 50 pies (15 metros). Crédito: Hector Vivas/Getty Images
Un grupo de personas junto al área que está restringida por las autoridades. Al mencionar el riesgo de que haya más fracturas, la dependencia advirtió a la población mantenerse alejada del lugar. Crédito: Hector Vivas/Getty Images
Vista aérea del socavón, al que las autoridades han advertido que no es seguro acercarse. “No es un atractivo turístico ni un sitio para visitar con tu familia”, advirtió este miércoles Protección Civil del estado de Puebla. Crédito: Hector Vivas/Getty Images
Esta imagen muestra a una construcción amenazada por el crecimiento del socavón que, según las autoridades, fue provocado por "flujos de agua subtérranea", lo que rechazan otras fuentes, que aseguran que se debió a la extracción excesiva. Crédito: Hector Vivas/Getty Images
Vista aérea del socavón, que no ha parado de crecer. “Lo estamos pasando muy difícil. Estamos dolidos por nuestro patrimonio”, dijo una de las residentes del área, Magalena Xalamigua Xopillacle, cuya casa de ladrillo y hormigón está desplomándose lentamente hacia el agujero, a la agencia AP. “A veces nos sentimos mal de tanta tristeza”. Crédito: Hector Vivas/Getty Images