La crisis venezolana deja huella en la salud de la región: confirman casos de sarampión en varios países de América Latina
QUITO, Ecuador. - Con la confirmación de un caso importado de sarampión en retorno del virus en la América Latina en lo que va de 2018. El paciente es un niño venezolano de cinco años que ingresó al país andino desde Colombia a finales del mes pasado por el puente fronterizo de Rumichaca.
El pequeño llegó a un centro de salud de Quito con síntomas de un resfriado, pero se confirmó que se trataba de sarampión el primero de abril. Entonces se estableció un cerco epidemiológico de cinco kilómetros a la redonda en los lugares por donde había pasado el portador del virus. Esto incluyó la misma línea de frontera, donde se instalaron puestos de vacunación para inmunizar a todos los extranjeros que no portaban su cartilla de vacunación. Más de 1.5 millones de dosis se han distribuido en Ecuador en esta cruzada para atajar la expansión del virus, según el Ministerio de Salud.
La propagación del virus es rápida, por eso toda precaución parece poca ante el temor de un brote como ya ocurre en Brasil, donde según la Organización Panamericana de la Salud (OPS) “hay un brote de sarampión en curso”. Aparte de los 14 casos confirmados en ese país (todos son niños y adolescentes venezolanos que no estaban vacunados), hay otros 36 casos sospechosos que aún son analizados (entre ellos se cuenta a un fallecido).
Venezuela está en el centro de los esfuerzos de la OPS. Desde la detección del primer caso a mediados de 2017 y hasta marzo de 2018 se han confirmado 886 pacientes contagiados, incluidas dos defunciones. Una de las razones para la propagación son los bajos niveles de inmunidad que tiene la población que, en medio de la rampante crisis de alimentos y medicinas que vive el país, no pueden cumplir con el calendario de vacunas obligatorias. Por eso, la intención del organismo regional de salud es reforzar la vacunación para controlar esta ocurrencia de casos.
“Tenemos consultores que están en el país, trabajando mano a mano con el Ministerio de Salud, facilitando la compra de la vacuna. El gobierno de Maduro está haciendo un esfuerzo grande para cubrir todo el país”, cuenta Gina Tambini, representante de la OPS en Ecuador.
Casos importados
Además de Ecuador y Brasil, también se han registrado casos de sarampión en Colombia, Estados Unidos, Guatemala, México, Perú, Antigua y Barbuda y Canadá. La situación es nueva en el continente americano donde el virus endémico ya se había eliminado por completo, según la OPS. “El último caso endémico se registró en 2002 y se certificó que los países de la región estaban libres del virus endémico en 2016”, explica Tambini.
El organismo regional insiste en que se trata de un virus importado, pero no solo mira a Venezuela sino también hacia Europa, donde los casos de sarampión se cuadruplicaron en 2017 (pasaron de 5,273 a 21,315 casos) y 35 personas perdieron la vida como consecuencia de esta enfermedad, según la oficina regional europea de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los casos de sarampión que llegaron a Antigua y Barbuda y a Guatemala de hecho fueron importados de Europa. “Están ocurriendo casos importados en la región de las Américas. Hay alertas en Rumania, Italia, Alemania y Reino Unido, entonces el vehículo del virus puede ser un turista o un nacional de los países de la región que viaje a esos países”, dice la experta consultada.
El niño que levantó la alerta en Ecuador estuvo aislado en un hospital de la capital durante una semana, luego recibió el alta médica. La autoridad sanitaria, sin embargo, mantiene la alerta y ha tomado la decisión de vacunar a todos los venezolanos independientemente de su edad. No quiere que se repita la epidemia que se registró en 2011, en una población deprimida en el centro del país. “Se registraron casi 70 personas contagiadas. Todo empezó por una turista que introdujo al país una cepa del virus africano”, recuerda el epidemiólogo Mauricio Espinel. “La cobertura de vacunación en esa zona del país estaba por debajo del 60%”, añade el investigador Marcelo Aguilar.
Ambos expertos coinciden en señalar que hoy habría un riesgo similar en el país andino. “En 2017 hubo tasas bajas de vacunación y un caso de sarampión puede generar un brote en estas circunstancias, más cuando el portador ha estado en movimiento”, explica Aguilar en referencia al niño que desde la frontera hasta la capital de Ecuador hizo un tramo de casi 250 kilómetros por tierra.
