No procesarán a los policías involucrados en la muerte de un afroestadounidense en Louisiana
El Departamento de Justicia no presentará cargos contra los policías que mataron al afroestadounidense Alton Sterling el verano pasado en Baton Rouge, Louisiana, reportaron The Washington Post y The New York Times citando fuentes con conocimiento del caso que reavivó las tensiones raciales en Estados Unidos.
Sterling, de 37 años, fue baleado de muerte mientras se encontraba en el suelo durante su arresto, generando polémica por la manera en la que las autoridades proceden en casos que involucran a minorías en el país. En ese momento, la división de derechos civiles del Departamento de Justicia, el FBI y la oficina del fiscal general en Baton Rouge abrieron una investigación por lo ocurrido.
La tensión podría surgir nuevamente pues se trata de la primera decisión en un caso de alto perfil tras la llegada de Jeff Sessions a la jefatura de la fiscalía general. Loretta Lynch, la anterior fiscal general, había pedido una revisión a los procedimientos de las fuerzas del orden.
Lynch también dijo en un reporte en agosto pasado que la policía de Baltimore incurrió en un patrón sistemático de discriminación. Sin embargo, Sessions ordenó examinar poco después de llegar al cargo los acuerdos a los que habían llegado el gobierno y las agencias del cumplimiento del orden, como el propuesto para reformar la policía de Baltimore.
Controversiales casos
La muerte de Sterling fue grabada por testigos. En el video se ve a un oficial corriendo tras un hombre alto y delgado. Luego, otro agente ayudó a sujetarlo en el suelo y le disparó a quemarropa cuatro veces.
La autopsia reveló que el hombre murió por varias heridas de bala en el pecho y la espalda.
Casos como este alentaron el movimiento conocido como Black Lives Matter (las vidas de los negros importan) en todo el país. El mismo busca honrar a personas que han muerto en incidentes con la policía, como Michael Brown en Ferguson, Missouri, y Freddie Gray, en Baltimore.
Otro caso fue el de Walter L. Scott, un afroestadounidense que fue baleado en la espalda por un policía de Carolina del Sur en 2015. El agente Michael T. Slager se declaró culpable este martes por esta muerte.
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