¿Se convierten en ángeles nuestros seres queridos al morir?
Durante mis consultas o charlas muchas personas constantemente me preguntan si quienes han fallecido se convierten en ángeles ya que muchas de ellas han tenido experiencias únicas.
Estas pueden ser recibir mensajes de sus seres queridos a través de sueños o a través de alguna sensación a nivel físico (como por ejemplo un hormigueo en el cuerpo o el sentir la presencia de ese ser en nuestra habitación u hogar).
¿Nos convertimos en ángles al morir?
De acuerdo con la información que he recibido, los seres humanos que mueren no se convierten en ángeles ya que el proceso evolutivo de cada uno es distinto.
El “punto en común” está - si lo puedo definir de esta forma - en que algunos de los primeros pueden cumplir funciones parecidas a las que conocemos realizan los ángeles: acompañar, guiar y hasta proteger.
Las almas que asumen esta misión se convierten pues en nuestros guías espirituales y por ello podemos llegar a sentir su presencia de una manera algunas veces tangible.
¿Qué se necesita para convertirte en ángel?
Los ángeles me enseñaron que para que un ser amado que ya ha partido se pueda manifestar, debe primero haber recibido el permiso o “luz verde” de Dios para hacerlo.
Si en algún momento has tenido un sueño con un familiar ya fallecido o sientes su presencia, presta atención a dichas experiencias pues puede haber un mensaje que Dios quiere enviarte.
Respetando siempre tu libre albedrío, la recomendación es no pedir a las almas por tus necesidades.
Recuerda: solamente Dios es quien nos concede lo que pedimos, no los ángeles o no nuestros familiares que ya partieron.
Una recomendación final: envíale luz a tu familiar o ser querido. Esto quiere decir que desde tu corazón imagines una hermosa luz blanca que llega a él y lo cubre. Esto le ayudará en su proceso de evolución y de acercamiento a Dios.