¿Quién es la popular repostera que hará la torta de cumpleaños de la Reina de Inglaterra?
Nacida en Bangladesh, musulmana y naturalizada británica, Nadiya Hussain está a unos pasos de tocar la gloria que a cualquier repostera le haría la vida: preparar la torta de cumpleaños de la reina Isabel II de Inglaterra. Y no es un cumpleaños cualquiera, son 90 años de vida de la monarca los que se celebrarán este jueves 21 de abril.
Hay detrás, obviamente, la intención del liderazgo británico (reflejado por la casa real, el gobierno y el parlamento) de reconocer —y aplaudir— el rostro multicultural de la isla del norte europeo. Y Nadiya lo refleja de un modo irreprochablemente auténtico.
Comenzó a coquetear con la repostería inglesa desde sus tiempos estudiantiles, pero fue en realidad en su faceta de ama de casa (con 31 años, Nadiya tiene tres hijos) cuando su marido la incitó a inscribirse en el muy popular reality de la BBC The Great British Bake Off. La familia ya reconocía desde tiempo antes su talento como repostera, pero el encanto de Nadiya se viralizó sin tregua al ganar la contienda.
Nadiya está nerviosa. No importa la cantidad de pruebas que debió superar en el muy estresante reality —que somete a pruebas extremas de tiempo, apariencia, originalidad y sabor a quienes contienden—, de acuerdo con lo que reveló en el programa Loose Women de ITV, ella sabe que en la prueba de este jueves se enfrentará a una sinodal, la reina, sumamente exigente,
Siempre sonriente, la simpática cocinera ha tenido sus episodios polémicos, como cuando en ese mismo show narró, al medio día, la manera en que había conocido a su esposo: ella no lo conocía (tenía entonces 19 años), y cuando llegó a su casa sus hermanas le anticiparon que era un hombre muy bien parecido y que, además, tenía un trasero gigantesco. “Así que cuando bajé a conocerlo, lo único que quería era corroborar era si en efecto tenía ese enorme butt del que me habían hablado mis hermanas.”
La presentadora Andrea McLean tuvo que intervenir y pedir disculpas a la audiencia por el uso de esa palabra a la hora del almuerzo, a lo que Nadiya respondió con un “ oooops, sorry”. Pese al desliz, el público reaccionó con enorme simpatía hacia la repostera en las redes sociales. Esa es la estrella de Nadiya.
Bake-Off y trolls racistas
Sin embargo, como ella mismo reportó en una entrevista con The Telegraph, fue víctima de amenazas racistas, vía Twitter sobre todo, cuando resultó ganadora del Great British Bake-Off. Fue bombardeada con insultos raciales y por trolls anti-islámicos, lo cual provocó que durante algunos días debiera tener vigilancia policíaca a las afueras de su casa. “Hay mucha negatividad en Twitter”, señaló. “Y uno se cuestiona realmente para saber si hice lo correcto al participar, si por eso había puesto en peligro incluso la vida de mis hijos”.
Y que lo diga. La columnista del Telegraph, Shalina Janmohamed, escribió un muy sentido artículo sobre ella —y las reacciones racistas y anti-islámicas de los trolls de las redes sociales—, vinculando la imagen de Nadiya con lo que realmente representa hoy la sociedad británica contemporánea. Inicia así: “Amo a Nadiya. Millones de personas al norte y al sur de este país aman a Nadiya. Ella ya no necesita ni el apellido. Ella es el rostro de la Gran Bretaña de hoy: auténtica, honesta, creativa, emocional, de gran corazón y honesta”. El contexto era oportuno: sí, era una mujer islámica que estaba triunfando en la repostería —la sagrada repostería— inglesa, y no haciendo cupcakes jihadi. Daba lo mismo si portaba un yihab en la cabeza (es su religión, ¿o no?), porque lo importante era que se estaba convirtiendo en una celebridad que empezó a dar más voz a quienes usualmente no tienen voz: las mujeres musulmanas. Como cerró Janmohamed: “ OK, DON’T PANIC. She can bake”.
Claramente la casa real británica no entró en pánico. Lejos de eso, eligió a la amada Nayida para cocinar el pastel de la nonagenaria reina.
¿Qué es lo que Hussain le tiene reservado a la gran dama en su cumpleaños? Si bien consideró en algún momento hacer un pastel de frutas, al final, según reveló a The Guardian, se decidió por un pastel de “llovizna” ( drizzle) de naranja con crema de cítricos y nata de naranja. Una gran explosión cítrica que llenará de aroma, sabor y sonrisas el Castillo de Windsor este jueves.
God save the Queen. Y a Nadiya.
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