Obama y Bourdain cenaron juntos en Hanoi para Parts Unknown

A 241 días de dejar la Casa Blanca, el presidente Barack Obama, en el marco de su visita oficial a Vietnam, no solo hace historia al anunciar el levantamiento del embargo militar a este país asiático, sino que también come y hace tv.
El mandatario cenó la noche del lunes con el chef y presentador de televisión Anthony Bourdain en el restaurante Bún chà Hu'o'ng Liên —cuya especialidad es el cerdo a la parrilla con salsa de caldo o de inmersión, flanqueado por fideos de arroz y hierbas frescas—, de Hanoi, Vietnam.
La conversación entre el reconocido chef y el presidente de los EE.UU. transcurrida durante la cita formará parte de la octava temporada de la serie “Parts Unkown”, que la cadena CNN transmitirá en septiembre próximo.
Por el momento se sabe que la cena duró aproximadamente 60 minutos. Ambos se sentaron en pequeños bancos de plástico para degustar unos baratos (pero deliciosos, apunta Bourdain) noodles y cerveza de Hanoi. Fue el chef quien pagó la cuenta que, por cierto tuvo un costo total de sólo 6 dólares.
A su salida del restaurante, el Presidente Obama saludó amablemente a algunas de las personas que se habían apostado en la calle esperando verlo.
Aunque tendremos que esperar hasta el otoño para conocer los mejores extractos de esta entrevista, si partimos de la postura crítica que Bourdain ha externado sobre la gestión de Barack Obama, podría anticiparse un intercambio de ideas por demás interesante entre estos dos personajes.
Diferencias aparte, si existe un terreno de coincidencia entre ambas personalidades, no sorprende que sea una mesa, pues el gusto gastronómico de Obama ha sido del conocimiento público desde que inició su campaña electoral para las primarias del partido demócrata. Desde entonces se le ha visto lo mismo degustando ricas costillas en Carolina del Norte, que delicias de los paladares cubanos o de las parrillas argentinas; la costumbre de salir a cenar a menudo con su esposa para probar restaurantes nuevos o su decisión de elaborar cerveza artesanal en el jardín de la Casa Blanca, dejan más que claro (como puede verse claramente en este reporte de Time sobre el papel de la comida en la vida del mandatario) que Obama, más allá de su talla política, es un foodie digno de acompañar a Bourdain en Parts Unknown.
Lea también: