null: nullpx
Artes Visuales

Jóvenes cosen un millar de sábanas blancas para cubrir la mayor plaza de Colombia

En medio de unos acuerdos detenidos, la artista Doris Salcedo convocó a gente de todo el país a coser 4,3 millas cuadradas de sábanas blancas con los nombres de víctimas del conflicto para entapetar con su recuerdo la plaza en donde el gobierno define el destino de la paz.
11 Oct 2016 – 04:38 PM EDT
Comparte
Default image alt
Así luce la Plaza de Bolívar de Bogotá que está siendo cubierta por sábanas con nombres de las víctimas escritas en cenizas. Crédito: Archivo particular: Natalia Currea

4,3 millas cuadradas (7 kilómetros) de sábanas para cubrir toda una plaza.
4,400 libras de ceniza para escribir sobre esas telas blancas nombres y apellidos.
1,900 nombres y apellidos de víctimas del conficto colombiano que ya no están y que nadie quiere olvidar.
1,500 estudiantes y representantes de la sociedad civil colombiana reunidos en esa plaza para tejer cada una de esas sábanas.
El resultado…una “Suma de ausencias”.

Así, con el nombre “Suma de ausencias” se ha bautizado la acción viva liderada por la emblemática artista colombiana Doris Salcedo que hoy durante todo el día busca cubrir el perímetro completo de la Plaza de Bolívar, el corazón del gobierno colombiano, para presionar a los políticos, al Presidente, Juan Manuel Santos, y a las Farc a que se sienten a definir ya el destino de los acuerdos de paz.


“Vamos a coser a mano una bandera-mortaja. A nosotros, a los que estamos aquí, nos corresponde traer esas ausencias a nuestro presente. Las víctimas de la violencia sólo existen si las recordamos. Estas tienen que estar dentro de nosotros para que sean recordadas. Y esa es la intención”, le dijo Salcedo a la revista colombiana SEMANA antes de esta de empezar la acción que planea para las 8 de la noche tener vestido el piso de toda la plaza con ese recuerdo blanco de las víctimas.

Después de los resultados del plebiscito por la paz, que le dijeron No al acuerdo hubo una gran polarización. Éramos todos contra todos. Eso se buscó mitigar con una marcha masiva en la que todos los del sí y los del no, vestidos de blanco, salimos a las calles a exigir que los acuerdos siguieran. Muchos decidimos no volver a la casa, sino simplemente acampar en la plaza, quedarnos ejerciendo presión”, cuenta Manuel Llano, un joven que lleva desde el 5 de octubre viviendo en una carpa y quien hoy se unió a la legión de estudiantes que con paciencia bordan las sábanas de Doris Salcedo.

Ese campamento por la paz lo empezaron tres tímidas carpas. Luego, con los días, más personas han ido sumándose al punto de llegar a más de 80 cambuches que han acogido incluso a los más de 6,000 indígenas que se desplazaron a la capital del país para hacerle eco a su indignación. Hoy esas carpas se han recogido, puestas todas a un lado para darle lugar a esa acción colectiva de tejer las sábanas estampadas con los nombres y las memorias de los muertos. En las redes sociales todos convocan a que más manos se sumen para tejer esta mortaja.

La respuesta a estas acciones colectivas han movilizado a toda la sociedad civil. No más ayer, antes de que los preparativo de la acción artística empezara, un grupo de 12 chefs reconocidos de la ciudad juntaron sus fuerzas, su dinero y sus utensilios y se fueron a cocinarle ‘cuchuco de espinazo’ (una sopa abigarrada y sabrosa muy colombiana) a toda la gente que acampa en la plaza.

“Queríamos aportar llevando comida, en principio se pensó en 40 sánduches, pero luego de ver la magnitud de la concentración de gente terminamos sirviendo 350 sopas calientes. Hubo para todos, para los jóvenes, los policías que cuidan los campamentos, y hasta para los que suelen mendigar por la zona”, explica por su parte Alejandro Gutiérrez chef del restaurante Salvo Patria.

“Con actos por la paz como las marchas, el Campamento por La Paz y estas sábanas de ‘Sumando Ausencias’, les decimos a las víctimas de todos los lugares y bandos que no los olvidamos y que no les vamos a fallar”, confiesa Natalia Currea una joven ejecutiva que está descalza, arrodillada en el pavimento mientras termina su cometido. “Seguiremos cosiendo hasta que venga la noche, porque es nuestra manera de decir que no nos vamos a rendir hasta que este Acuerdo de Paz salga adelante. Que vamos a honrar la voz de los desaparecidos. Que estamos con ellos”.

Si Doris Salcedo sacudió al mundo con su monumental grieta que partió en dos el piso de la Tate Gallery de Londres, quizás con este manto logré clavarse en el corazón de todos los políticos en cuyas manos está que Colombia consiga de una vez por todas la paz.

Lea también:


Comparte
RELACIONADOS:Proceso de Paz