Alexi Lubomirski fue el encargado de inmortalizar fotográficamente los momentos de la boda entre Meghan Markle y el príncipe Harry. En la familia real británica hay muchos niños lo que complica la tarea de un fotógrafo. Para asegurarse que estuvieran tranquilos y viendo a cámara, Alexi aplicó un truco que para su sorpresa funcionó.